Te quiero sólo para mi

Capítulo 20

Me despierto sintiendo un brazo alrededor de mi cintura y me asusto hasta que mi cerebro se despierta y recuerdo lo que paso ayer con Alex. Siento los colores subirme a las mejillas y intento zafarme de su brazo. Pero mientras mas intento quitarlo, mas fuerte me abraza. 

Siento a Alex moverse y reírse.

-Buenos dias dormilona.- Me dice mientras me besa el hombro. Miro hacia abajo levantando la sábana, cuando veo que estoy en ropa interior. 

¿¡PERO QUE COJONES!?

Alex, al ver lo que hago y mi cara de circunstancias, me dice riéndose:

-No te preocupes, no te he hecho nada. He sido un caballero. ¿Recuerdas lo que pasó anoche?

-Eh... sí.- Digo mas roja que la capa de Superman y el traje de Deadpool. Sí, me gustan esas cosas. 

Alex con voz seductora que hace que se me vaya toda la sangre a la parte baja de mi cuerpo, me dice:

-¿Y que te parece si seguimos por donde nos quedamos ayer?- Se pone sobre mi besándome.

2 horas después...

Estoy tan tan tan cansada que ahora mismo podrían operarme sin anestesia. No siento ni las pestañas. 

Alex es una máquina. No descansa ni para beber agua. ¿Porque no habré quedado antes con este macho man? Menos mal que hoy no tengo que ir a trabajar.

Iba a salir para hacer el desayuno pero Alex se ha dado cuenta de mi estado y literalmente me ha dicho "Cariño quédate aqui mientras yo hago el desayuno. Descansa cielo".

DIOOOOOOOOOOOOS. 

Me encanta este hombre. Él al lado de Lucas es la octava maravilla del mundo. Y ¿Porque lo comparo con Lucas?

En fin. Desayunamos en la cama, aunque solo le da tiempo a comerse una tostada ya que he saltado sobre él como una pantera.

Ahora si estoy mucho mejor, así que decido levantarme y ducharme. Eso sí, en compañía de Alex. Despues de una hora, nos vamos a dar un paseo por el centro. Necesito comprar varias cosas y voy a aprovechar el viaje.

Cuando termino de comprar y nos cansamos de andar, vamos a una cafetería. Es como un Starbucks pero en pequeñito y acogedor. Encima hay poca gente, menos mal porque no se si os lo he dicho, no me gusta escuchar muchisimo jaleo.

Mientras nos tomamos un cafe hablamos de todo un poco, nada importante. Le digo que voy al baño y hago pis, cuando salga me encuentro a un hombre que tiene muy mala pinta.

-Hola guapa. ¿Necesitas ayuda?- Me quedo con cara de ¿que haces imbécil?- Anda ven aqui que te voy a hacer maravillas.

Cuando se acerca a mi recuerdo lo que mis hermanos me enseñaron. Le cojo del brazo retorciéndoselo hacia atrás y hago que se arrodille. Le doy en la nuca y eso hace que se desmaye. Llamo a Alex y el llama a sus compañeros.

Al final acaba todo bien o eso creo, ya que antes de que se lo llevaran me gritó "¡De esta te acuerdas zorra!" y por un momento he sentido miedo, que se suprimió en el momento en el que Alex me abraza y me besa la frente.

 

 

 



#45581 en Novela romántica
#7292 en Chick lit

En el texto hay: destino, celos, amor

Editado: 14.04.2018

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.