Después de que salieras de la casa de Song Kang, te dirigiste a tu casa para descansar de la tremenda resaca que tuviste el día anterior.
Ni bien llegaste te tiraste en tu cama, cuando escuchaste el timbre, abriste y era... Hyunjin. Le quisiste cerrar la puerta en la cara pero el puso su mano para evitarlo.
¿Así tratas a tu mejor amigo? -dijo indignado-.
¿Por qué o para qué viniste? -le dijiste con un toque de molestia-.
¿No te puedo visitar? -dijo despreocupado-.
¿Qué quieres ya dímelo de una vez? -dijiste esta vez mas molesta-.
¿No me invitaras a pasar? -dijo entrando a tu casa-.
¿Qué quieres Hyunjin? ya me estas hartando -dijiste molesta-.
Hablar contigo -dijo respondiendo a tu pregunta-.
¿De qué? -dijiste confundida o eso aparentabas-.
De Yeji -dijo un poco preocupado-.
Para eso viniste, mejor vete -dijiste haciéndole una seña de que se fuera-.
No quiero -dijo mirándote fijamente-.
Estabas apoyada en una pared, en eso Hyunjin se acerca a donde tu estabas.
¿Qué crees que haces? -dijiste un poco mas calmada-.
Nada ¿por? -dijo acercándose mas y mas hasta dejarte acorralada-.
No que te gustaba la tal Yeji -dijiste con un poco de sarcasmo pero con nerviosismo a la vez-.
Nunca dije que me gustara -lo dijo mirándote directo a los ojos-.
No mientas, entonces explícame porque me dejaste de lado, me dejaste de hablar y me ignorabas -acercándote a el como si lo estuvieras confrontando-.
Porque era parte de mi plan, sabia que te ibas a poner así -dijo con seguridad y volviéndote a acorralar-.
¿Así como? -dijiste confundida-.
Celosa -dijo de golpe-.
P-por que me sentiría celosa, si ni siquiera m-me gustas -dijiste nerviosa, sentías que tu corazón iba a salirse de tu pecho-.
Mientes -dijo mirado tus labios-.
Di-digo la verdad!! -dijiste aun mas nerviosa-.
Entonces si me acerco mas, ¿no te pondrás mas roja? -dijo acercándose mas-.
A q-que -no te dejo terminar y te beso-.
Te sorprendiste, pero le seguiste el beso. Ninguno de los dos se quería separar del otro, hasta que por falta de aire lo tuvieron que hacer. Al separarte de el le preguntaste.
¿Por qué me besaste? -preguntaste agitada y con falta de aire-.
Se te quedo viendo en silencio, para luego responderte.
Porque quise -respondió-.
¿Solo por eso? -dijiste-.
Si, porque mas seria -te respondió-.
"Porque quise ñaña"-lo arremedaste-.
Ya te vas supongo -dijiste haciéndole una seña para que se valla-.
Sin hacerte caso, entro a tu cuarto, lo seguiste y te sentaste en tu cama. Sin que te des cuenta Hyunjin cerro la puerta; estuvo mirando y esculcando tus cosas por largo tiempo, hasta que decidió sentarse a tu lado.
¿Por qué lo hiciste? y dime la verdad -le preguntaste-.
Ya te lo dije, porque quería -respondió-.
No te creo, que solo haya sido un impulso -dijiste incrédula-.
De verdad, si quiero ahora te puedo volver a besar -dijo acercándose a ti-.
A ver, inténtalo -dijiste como jugando-.
Te paraste de la cama y te fuiste a un lado como si fuera un gran escondite.
Si no me muevo no me ve -dijiste en tu mente-.