Capítulo 36 "Volver a estar juntos"

Volver a estar juntos

Abigail

—¡Un poco más a la derecha! ¡No, al contrario! Un poco más inclinada… ¡perfecto! Ahora, ¡no te muevas!

Eran ordenes soltadas por Katy y que las modelos estaban acatando. Mientras, yo estaba sentada en una esquina viendo como toda la magia ocurría. Era una jodida locura ver a Hanna Skinner en modo profesional, su aura seguía siendo radiante, pero ahora con autoridad. Eso explicaba porque muchos no dejaban de verla.

Al estar Cooper fuera, ella estaba encargada del proyecto colaborativo entre ambas corporaciones.

Miro de nuevo el vestido que estoy usando. Es increíble como Hanna esta muy involucrada en la creación de CyS, no solo su nombre y el capital principal, sino que ella en un principio era la diseñadora.

—La empresa inicialmente era solo de telas —murmuró Katy mientras me enseñaba la maquinaria —Les iba afortunadamente algo bien, pero entonces asomó Hanna, para darte más énfasis y dramatismo ella dio esencia a la empresa.

—No lo veo de ese modo —murmuró Hanna avergonzada —Ellos me dieron una oportunidad a mí, que podría solo destruir sus telas y dejarlos con deudas.

—Pero no lo hiciste.

—Afortunadamente.

—Te presento a la diseñadora de CyS, Hanna Skinner, alias Ner.

En ese momento vi el final de página del boceto y se encontraba en letras cursivas Ner.

—Eres asombrosa Hanna, no cualquiera lo hace.

—Tener a Hailey me ayudó mucho.

—Gracias por reconocerlo —murmuró Hailey sin descaro a lo que yo le codee.

—No, de verdad Abi, Hailey me ayudó en muchas cosas. Con su falta de modestia y dolor de cabeza, yo debo reconocerlo.

Asentí.

—¿Quieres ver más bocetos? Hay algunos de los que no estoy segura para intentarlos, o no tengo idea de que telas usar.

—No sé si yo te sea de ayuda, pero adelante.

Eso explicaba los bocetos que tenía en mis manos y los estaba viendo mientras esperaba que fuera mi turno. Entre ellos uno llamó mi atención, uno tenía esencia de la época vitoriana en la parte del corse mientras que la falda era de un solo pliegue, pero con varias capas. Era hermoso, el color gris le resaltaba, pero como decía Hanna, no sabría definir el tipo de tela que escogería para hacerlo.

—¿Lista Abigail?

Asiento levantándome y entregándole la libreta de diseños a Hanna, ella sonríe y me desea suerte mientras escucha a Katy acomodar todo. Tomo aire repetidas veces antes de entrar en escena y dejar que Katy manipule mi cuerpo como ella desea.

De fondo se oye un sonido musical y estoy divirtiéndome con las poses cuando veo a las modelos reunidas y comenzar a comentar mientras me observan. Lo tomo como algo natural porque debían juzgar mi inexperiencia, pero algo esta mal cuando el resto lo sigue haciendo.

Entonces sé que pasa y que ha sido confirmado.

—¿Es ella?

¿Por qué ahora?

—¿Se involucró con su jefe?

No es, bueno, no era mi jefe. Trabajo de medio tiempo aquí y en la cafetería.

—Ella era su ex novia.

Las orejas se me vuelven rojas y no solo por la vergüenza, sino porque pican de tanto que escucho.

—¿Abigail?

Katy frunce el ceño mientras yo trato de aflojar mi cuerpo tenso y solo sonrío. Los comentarios vuelven a ser susurrantes y Katy suspira.

—Pueden salir todos, de esto me encargaré yo.

—Pero…

—Solo están haciendo ruido y no me dejan concentrarme, así que, por favor, ahorrémonos molestias y despejen el lugar todos aquellos que ya han hecho su trabajo.

Hay varias miradas y finalmente la puerta se abre y empiezan a salir varias personas. Solo se queda el grupo fotográfico.

—Bien, ahora que no hay nadie, posa para mí. ¡Que te haré ver como una diosa! —me río y niego —¿Qué? ¡Debemos cerrarles la boca a los cibernautas!

—Creí que no dejaría que eso me importara.

—No lo hace, pero es divertido de hacerlo. Ahora, continuemos.

La puerta se abre en medio de una de las tomas y por ella entra Lady sonriendo.

—¿Todavía no terminan?

—Solo unas tomas más y es toda tuya.

—Y de toda la red —murmura Hailey mientras me retoca el maquillaje.

—Hailey…

—Solo le informaba.

—¿Por qué? —mientras pregunta Lady revisa su teléfono y jadea —Mierda. Y yo creía que todo se vendía por tu don en decorar.

—¿De qué hablas?

—La cafetería esta a reventar, por eso tengo que irme, Jeremy esta enloqueciendo. Creí que eran por los nuevos diseños, pero al parecer no. No quiero acusar a nadie de ser superficial, pero todo lo que decora Abigail se vende como pan caliente.

—Y ahora también su información —dice Hailey dando por terminado mi maquillaje —Felicidades señora Cooper, estás dentro de las tendencias más buscadas.

—¡¿Qué señora?! —gruño avergonzada.

—Entonces señorita —tose —próxima señora.

—¡Hailey, por favor! Ya tengo suficiente con el resto.

—De acuerdo señorita sensible, me retiro. Hey, Hanna, iré con Oliver Duch para alistarlo y te lo traigo ¿de acuerdo?

Hanna asiente y Hailey, quien todavía no esta satisfecha con molestar, se voltea antes de salir.

—¿Traerlo incluye a una Lady?

Hanna empieza a reírse.

—Creo que sí.

***

—Esto es agotador, y no soy la actriz principal —se queja Hailey.

Lo era.

Pero tras confirmar la noticia y que todos se enteraran, solo me queda afrontar con la cabeza en alto, y evitar chocar con lo que se me atraviese en frente. Así que agradezco que en la salida Hanna me acompañara y con ella todo el sequito trabajador.

Conforme veo la puerta la línea de meta es más visible y me informa que he sobrevivido al primer día. Estoy por festejar cuando gritan por mí.