Te reconquistaré

Capítulo 48 "Niño lindo y niña tonta"

Niño lindo y niña tonta

 

Aprendí algo con los meses.

Sin duda vivir en pareja era algo completamente un mundo nuevo.

Nadie me lo dijo, lo estaba todavía averiguando.

Aunque debí intuirlo cuando Cris sonrío encogiéndose de brazos y alegando que sobreviviría. Ella no se comidió en ser amable con la información y me dejó a la deriva. Prácticamente me gritó: ¡Vive, polluelo ingenuo!

Y aquí estaba. Sobreviviendo.

Claro, luego de una batalla con Sara, quien se quejaba de que era una pésima compañera de cuarto porque casi no pasaba ahí, que me mudé con Alan. Sara se pasó quejando por un tiempo, pero luego pareció aceptarlo. Aunque estuvo recia a quedarse sola en el apartamento, y Hailey se ofreció a quedarse con ella. Así que ahora ambas vivían juntas.

La convivencia fue algo a lo que poco a poco nos íbamos acostumbrando y habían pasado desde vergonzosas situaciones hasta unas subidas de tono.

Ambas me provocan sonrojarme de manera inmediata con solo recordarlas.

Pero toda situación vergonzosa tiene su buena contra, una buena obra era el claro ejemplo de ello. Así que mi relación con Neymar había mejorado.

No me sorprendía estar desde la mañana jugando con él.

—¡Hey, Neymar! —grito y una vez que tengo su atención sonrío —Dame la pata.

Todavía me admiro cuando Neymar me la entrega como si nada.

Ahogo un mini grito y luego procedo a abrazarlo y besar su cabecita mientras él se acuesta y empiezo a tocarle la pancita.

—De verdad lo conscientes —masculla Alan entrando y mirándome tirada en el suelo.

Sonrío sintiendo el calor invadir mis mejillas. Miro a Neymar y él eleva una oreja ante las palabras de su dueño.

—¿Un poco?

—No, no un poco, mucho.

Sonrío y Neymar lame mi mejilla.

—Tal vez tienes un poco de mucha razón.

Su boca se curva ligeramente y lo llama para darle una croqueta. Neymar me mira, y luego sale corriendo. Y así señores, es como acabo de ser dejada por una croqueta.

Mi ceño se frunce al ver eso.

Tal parece que me equivoqué respecto a nuestra mejoría de relación.

Alan por el contrario parece feliz de lograr su objetivo y Neymar también porque sale corriendo con la croqueta en la boca.

—Así que igual…no, menos que una croqueta ¿eh?

Me dejo caer en el suelo de nuevo y escucho a Alan reírse. No me río, ruedo los ojos y me dedico a ignorarlo cuando me llama. Siento su pie tocar mi pierna, pero como buena actora, me hago la dormida.

Lo escucho bufarse y luego ruido. Me estremezco cuando siento algo sobre mí. Con miedo abro un ojo y luego ambos al ver a Alan sobre mí dándome un corto beso.

Me trato de alejar, pero sus manos se colocan sobre las mías y me retiene.

—¿Qué crees que haces? —le pregunto.

—Besar a mi novia.

Mi corazón se acelera por eso y pese a mi protesta sonrío.

—¿Qué novia? ¿La menos que una croqueta?

—Muy resentida.

—Lo hiciste apropósito.

Su respuesta es sonreír y darme un beso corto, luego otro y finalmente mis brazos se son liberados cuando protesto y le digo que quiero acercarlo. Solo ahí me suelta, y como dije, estos brazos le rodean y él profundiza el beso. Mis piernas le abren espacio y sonrío cuando sé por dónde va esto.

—Lo hiciste a propósito —mascullo y el ríe sin negarlo.

 

***

 

Esto es un desastre.

El más grande que pudo haber.

Los flashes se disparan en mi cara y aunque Ismael me trata de hacer pasar junto a otros compañeros de seguridad, muchos paparazis logran colarse y con micrófonos empiezan a soltar preguntas y gritarme en los oídos.

—¡Abigail! ¡Abigail Martins aquí, mire aquí por favor!

—¡Solo será un minuto señorita Martins! 

—Por favor, déjenme pasar. Señores…yo…

Un tirón en mi mano me saca un jadeo asustado, y aunque dura poco porque Ismael me aleja, no dejo de verlos horrorizada. ¡Son unas bestias!

—¡Abigail! ¡Solo serán unas preguntas!

Niego, y trato de caminar, pero ellos no dejan de gritar al aire como si desearan que más personas se enteraran de todo. Por primera vez me siento asfixiada por el público y no ayuda que mi ansiedad este temblando.

—¡Abigail! ¡¿Cuál es su relación con Broken?! ¡¿Es cercana?!

—¡¿Estaba usted enterada de la identidad de Broken?!

Escuchar eso me hace tensarme. ¿Qué?

—¡Martins, ¿usted sabía que Cristina Bowen es Broken?!

¿Cómo saben ellos eso?

—¿Qué relación tiene con las empresas CyS el que no firmara Broken? ¿Acaso la van a patrocinar?

No entiendo sus preguntas y solo sigo pidiendo paso. Hay más, cien de ellas y cada una más venenosa. Incluyen mi relación, la de Cristina, a su familia, de pronto siento nauseas por tantas personas y solo cuando logro entrar a la instalación me doy cuenta que mis manos tiemblan.

—¿Qué demonios ha pasado? —pregunto directamente a Ismael, él se remueve incómodo y me pide que suba a la oficina.  

Al entrar veo a todos caminando de lado a lado pareciendo alterados y cuando entro a la oficina veo a Cooper conversando por teléfono.

—Alan ¿qué…?

Él se acerca y deja un beso en mis labios antes de señalar la tableta en el escritorio. La tomo mientras escucho como continúa la llamada y mis ojos se abren ante el anunciado.

Lo roto al parecer siempre estuvo roto” (hace referencia al nombre de Broken, que en español sería roto)

Mis labios se aprietan conforme empiezo a leer más el artículo donde narran la identidad de Broken, su familia y reviven viejas heridas polémicas. Lo que más me enoja es la jactancia que tienen para referirse a ella, desde el título hasta el final la irónica y el sarcasmo es base de toda la información.



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En el texto hay: secuela, secretos, reconquistar

Editado: 10.05.2022

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