Tras semanas de 08 llevar el tratamiento, su mente estaba en blanco, su cuerpo lleno de moretones, parecía que estuviera en un purgatorio en donde no sabía si moriría o sería más fuerte, sus ojos estaban muy hinchados y su piel pálida, los científicos la apartaron de los demás ya que no tenía fuerzas para seguir actuando con normalidad, ni siquiera tenía fuerza para controlar sus poderes. La falta de apetito y el dolor era algo que 08 comenzó a llevar en la última semana.
La extraña desaparición fue algo que preocupó a 22, el chico con poder de leer y controlar la mente. Él había estado observando durante mucho tiempo a 08 hasta que aquel miércoles tuvo el valor de comunicarse con ella.
22 sabía que 08 era demasiado fuerte, sus poderes eran los únicos que no se repetían en otras personas, pero al mismo tiempo 08 era la más vulnerable, pues, algo que ella no sabía, es que todos se comunicaban mentalmente, ella era la única que estaba aislada y atormentada por sus pensamientos. En las últimas semanas 22 vio algo diferente en la mente de 08 que fue lo que le dio el valor de hablarle. Recuerdos, en la mente de 08 comenzaron a crearse recuerdos y eran extraños y confusos, 22 supo inmediatamente, que esto sería una clave para escapar.
Desde que 22 dejó de tomar las medicinas de la cena, comenzó a tener control sobre sí mismo y sus emociones, y es algo que ninguno podía hacer, ni siquiera 08, ella era casi como un robot.
Con el tiempo, 22 empezó a fingir ser como los demás, pero observaba los comportamientos de los otros, los cuales él llamaba líderes o controladores, supo entonces que ellos los observaban en todos lados, incluso en el baño, sólo había un lugar donde no usaban cámaras, y era en el área donde ellos peleaban. En el área de entrenamiento.
22 controló la mente de algunos de sus "compañeros" como les empezó a decir, y poco a poco comenzó a guiarlos en la verdad.
Estaban 17, una chica color azul casi morado por alguna causa desconocida, ojos amarillentos y cara alargada, cabello rosa y cejas gruesas. 15, una chica castaña con ojos oscuros y piel rosada. 10, una rubia de labios gruesos y rosa, siempre llevaba un rostro de pocos amigos, sus cejas eran oscuras y sus ojos verdes y 19, un chico de cejas gruesas, blanco, cabello ondulado y oscuro.
—¿Cómo se supone que iremos a un lugar que no conocemos, a salvar una chica que sólo podría ser un estorbo? —dijo 17.
—Es cierto, además de que estamos siendo observados en todo momento. —Espetó 15.
—No, ella tiene la clave para poder salir, vi todo en sus ojos, puede recordar lo que era, nosotros a penas sabemos lo que estamos formando, la necesitamos en verdad. —Dijo 22 con algo de esperanza en su hablar.
—¿Y cómo se supone que haremos después? Ellos nos notarán y no hay manera de huir. —Preguntó 19.
—Tal vez la salida, la encontremos en su mente.
08 estaba hambrienta, no había querido comer durante los últimos tres días y los científicos se estaban preguntando qué hacer con ella.
La doctora Eliana convenció a Pereira de que no la matase, a pesar de que estaba muy débil era muy importante para ese eslabón.
—Ella es fácil de controlar y al mismo tiempo muy fuerte, eso es lo que los militares quieren, buenas armas. —dijo ella acariciando al mismo tiempo, el hombro de Pereira. La oficina de ellos dos se encontraba en lo más alto y seguro de aquel lugar, no iban a arriesgarse por si un día habría una rebelión por parte de los pacientes, a pesar de que era casi un 100% seguro que no podrían hacerlo.
Frente a ellos había una pantalla que presentaba a 08 en el cuarto blanco.
—Sí, pero ahora no está tan fuerte cómo necesitaba. ¡Rayos estaba a punto de lograrlo! —Dijo Pereira golpeando la mesa de oficina que se encontraba frente a él con el puño de sus brazos, Eliana tuvo un pequeño susto, pero no permitió que eso la alterara, ella sabía lo que ese hombre era capaz de hacer. — No sé cómo sus pulmones comenzaron a fallar de esa manera, ella es la única a la que no hay que darle dosis siempre, cuando su capacidad cerebral subió en un 85, nunca más volvió a disminuir, no como el resto, y ahora está demasiado débil.
—Tal vez debes darle lo que queda del A25L —él se volteó a mirarla exasperado.
—¿¡Cómo rayos piensas que le daré la ultima dosis de esa fórmula!?, sabes muy bien que en cuanto vengan los militares a llevarse a los pacientes, se llevaran también el A25L y me darán mucho dinero por ello.
—Es mejor que ellos tengan al menos un paciente fuerte para llevar, que un par que son igualados a los humanos. —Pereira se quedó pensativo un instante, y observó a 08 frente a él.
—Supongo que tienes razón, — todo sería más fácil si pudiera hacer esa fórmula, pensó — mañana a las 05 le dan la fórmula.
—Sí Señor —dijo ella molesta, saliendo de la oficina.
Eliana y Pereira llevaban una relación de aproximadamente 3 años, pero Pereira no estaba interesado en ella realmente, sólo no quería estar solo, ella, por el contrario, sí sentía algo por él a pesar de tener ese duro corazón.