La Invitacion

Todo comienzo con Alex, quien estaba en casa revisando su correo electrónico, cuando descubre un mensaje inesperado. Era una invitación para él y sus amigos a regresar a la Casa de la Colina. La invitación no tenía remitente, pero estaba dirigida a todos ellos por sus nombres y apellidos. Alex quedó confundido y asustado por la invitación, pero no pudo resistir la tentación de saber quién estaba detrás de ella.

Inmediatamente, Alex contacta a sus amigos y les cuenta sobre la invitación. Todos reaccionaron con incredulidad al principio, pero al final acuerdan reunirse para discutirlo en persona. La mayoría de ellos estaban todavía afectados por lo que les había pasado en su última visita a la casa, pero algunos estaban emocionados ante la perspectiva de descubrir más sobre los misterios que rodean la casa.

Después de que todos llegan a la casa de Alex, se sientan en el salón y empiezan a hablar sobre la invitación. Uno de ellos, llamado Sara, recuerda que cuando visitaron la Casa de la Colina por última vez, todos hicieron un pacto para nunca volver. Pero ahora, la invitación parecía desafiar ese pacto y ellos no podrían evitar sentirse intrigados por saber quién los había invitado.

Después de mucho debate, deciden aceptar la invitación y regresar a la casa. La mayoría de ellos piensa que puede ser una oportunidad para enfrentar sus miedos y superarlos. Pero, también hay una pequeña parte de ellos que cree que esto podría ser peligroso, y que están jugando con fuego al aceptar la invitación. A pesar de todo, su curiosidad y sed de aventura son más fuertes que sus miedos.

Los amigos comienzan a planificar su viaje de regreso a la Casa de la Colina. Establecen una fecha y deciden hacer una lista de las cosas que necesitarán para su estadía en la casa. También discuten sobre cómo preparar para la posible presencia del hombre pálido con el cuchillo. Decida llevar linternas, armas de defensa y comunicarse por walkie-talkies en caso de emergencia.

Mientras se preparan para el viaje, los amigos comienzan a recordar sus experiencias pasadas en la casa y lo aterradores que fueron. Aun así, están emocionados por la posibilidad de descubrir más sobre los misterios que rodean la casa. A medida que se acercan a la fecha de su viaje, el miedo y la incertidumbre comienza a intensificarse. Pero ya es demasiado tarde para dar marcha atrás.

Finalmente, llega el día del viaje. Los amigos cargan todo lo que necesitan en sus mochilas y se preparan para el camino. Se suben a sus vehículos y se dirigen hacia la Casa de la Colina, sin saber lo que les espera. Mientras avanzan por la carretera hacia la casa, la tensión y el miedo se sienten palpables en el aire.