Capítulo 1601: ¿Para qué guardarlo?

Después de un tiempo desconocido, Nan Xiao abrió lentamente los ojos.

Su primer pensamiento fue: ¿no ha muerto?

Se sentó violentamente, y en este momento, todavía estaba en la cama.

¿Qué había pasado?

Nan Xiao estaba perdido.

Y no muy lejos, Xiao Ran todavía estaba decoccionando medicina para él, ella suavemente avivaba el fuego y soplaba sobre el aire caliente que salía del frasco de medicina de vez en cuando.

En este momento, Sang Mei entró en la casa de piedra, miró a Nan Xiao, "Levántate y camina".

Nan Xiao se quedó en silencio.

Sang Mei añadió: "Después de este paseo, si todavía quieres morir, déjalo estar".

Después de decir esto, miró a Xiao Ran y sonrió, "Xiao Ran, ven tú también".

Xiao Ran se apresuró a bajar su abanico, "¡Bien!".

Sang Mei guió a Xiao Ran hacia el exterior, y después de un momento de silencio, Nan Xiao también se levantó y la siguió.

Sang Mei guió a los dos a caminar por las calles, aunque este lugar es ahora una pulgada de oro, sin embargo, el ambiente aquí no ha cambiado, sigue siendo sucio, los que no han vendido sus tierras todavía, siguen viviendo una vida de pobreza.

Xiao Ran tiró de Sang Mei y la siguió de cerca.

Detrás de ellos, Nan Xiao también los seguía sin prisa, estaba en silencio, su corazón como muerto.

Sang Mei de repente giró la cabeza para mirar a una casa de piedra no muy lejos, en frente de la casa de piedra, se sentó un hombre, el hombre está en sus treinta años, vestido con un harapiento, es la celebración de un cuenco roto tragar.

Sang Mei miró al hombre y dijo: "¿Sabes cómo se llama?".

Xiao Ran dijo rápidamente: "Se llama Er Dog ....... Oí decir a mi padre que cuando tenía seis años, sus padres habían muerto y él iba por ahí recogiendo cosas para comer ...... Cuando creció, se casó con una hermana que tenía problemas intelectuales, pero más tarde, esa hermana tuvo un parto difícil y murió junto con el niño ......."

Al decir esto, su semblante se volvió sombrío.

Sang Mei miró a Nan Xiao: "Estás amargado, ¿lo estás tanto como él?".

Nan Xiao guardó silencio.

Sang Mei frotó suavemente la cabecita de Xiao Ran, "La madre de Xiao Ran murió pronto ...... ¿Sabes cómo murió su madre? Murió de hambre ......"

El corazón de Xiao Ran estaba dolorido, y las lágrimas brotaron de inmediato.

Sang Mei miró a su alrededor: "Te sientes amargado, pero cada una de estas personas aquí está más amargada que tú".

Nan Xiao permaneció en silencio.

La mirada de Sang Mei se volvió gradualmente fría, "¿Quién dijo que el ciclo de la fortuna celestial no tiene espesor? El camino del cielo es la mayor injusticia en este mundo, ¿por qué algunas personas deben nacer en una familia de príncipes y señores, mientras que otros son plebeyos? ¿Por qué algunas personas nacen con cualidades físicas especiales y se cultivan a pasos agigantados en un solo día, mientras que otras no están dotadas de raíces y huesos y no pueden cultivarse durante toda su vida?".

Diciendo esto, miró a Nan Xiao: "¿Puedes responderme?".

Nan Xiao se quedó en silencio.

Sang Mei retiró la mirada, "¿Conoces el origen de la palabra 'divino'?".

Nan Xiao miró a Sang Mei, Sang Mei dijo: "Los dioses no son autoproclamados, sino que son honrados por todos los seres vivos, los que están en el poder, si son realmente sinceros para el pueblo, te respetarán como un dios, sin embargo, los llamados dioses en el Templo de los Dioses de hoy, ¿cuántos de ellos prestarán atención a todos los seres vivos? Viven en lo alto del templo de los dioses, nombrados como el servicio de todos los seres vivos, pero en realidad son los amos de todos los seres vivos ......"

Diciendo esto, miró hacia Nan Xiao, las palabras como flechas afiladas, "¿Por qué hay barrios bajos? El sufrimiento de estos seres, la mitad es celestial, la otra mitad es causado por el hombre, tú Nanxiao como Dios Superior del Templo de los Dioses, ¿conoces el sufrimiento de los seres? ¿Alguna vez has hecho algo al respecto? ¡No! No sólo tú, sino todo el Templo de los Dioses está lleno de gente que trabaja por su propio futuro. ...... No eres el único, todo el Templo de los Dioses está lleno de gente que, por el bien de su propio futuro, todos ellos malinterpretan las políticas de Dios, transgreden los deseos de sus superiores, y por el bien de obtener más poder para sí mismos, adulan a sus superiores, y oprimen a sus subordinados, y cuanto más poderosos son, más los intimidan ......"

La cara de Nan Xiao se volvió ligeramente blanca ......

Xiao Ran nunca había visto a Sang Mei tan severa, y estaba un poco asustada en ese momento, tirando fuertemente de la manga de Sang Mei.

Sang Mei miró a su alrededor y dijo suavemente, "Todo el Salón de los Dioses no es tan bueno como un blasfemo ...... Un blasfemo extranjero a los ojos de la Sala de los Dioses, pero dispuesto a defender a estas personas que no tienen nada que ver con él, sacrificó su propio tesoro supremo pequeña torre, sin nombre, sin fines de lucro ...... Y ahora, sino también por el llamado Dios del Templo de los Dioses para cazar y matar ...... Este tipo de Templo de los Dioses, ¿de qué sirve conservarlo?"

Hubo un temblor en el corazón de Nan Xiao, incrédulo mirando a Sang Mei, estas palabras ....... eran realmente un poco traicioneras.

Sang Mei miró a Er Dog que estaba sentado en la puerta en la distancia, y dijo en voz baja, "Nan Xiao, mira a esta gente aquí, tenían un momento difícil tener algo que esperar a causa de un "blasfemo" que fue considerado por el Templo de los Dioses, pero ahora, el Templo de los Dioses ha cambiado repentinamente su política, y han comenzado a comprar la propiedad de estas personas ordinarias aquí a un precio bajo. ...... ¿Cómo viven los seres?"

Diciendo esto, sacudió ligeramente la cabeza: "Con ira y sumisión".

Las manos de Nan Xiao temblaban ligeramente.