Salgo de la casa en ruinas y me encuentro con los chicos.
– Te demoraste un siglo_ Dice Ryan con voz cansina.
– ¿Estas bien?_ Pregunta Cárter
– Está vivo..._ Miro a Gabriela que esta en mis brazos – Creí que lo había eliminado y no volvería a molestar.
– ¿Quien?_ El moreno mira confundido en mi dirección.
– Andrés
– Alto..._ El blanco interrumpe – ¿Ese no fue el memo que matamos en Alemania?_ Me mira y asiento – Le quitamos el collar, se hizo cenizas ¿como es que sobrevivió?
– Una humana le dio de su sangre, o eso fue lo que me dijo.
– Eso es imposible, un humano no le pudo dar de su sangre, tenía unos noventa años, era muy joven, tuvo que ser un vampiro y uno poderoso.
– Lo era_ Se escucha la voz de Andrés pero no logro verlo – Se llamaba Dominic, la amaba, era mi todo, ella me devolvió "la vida" por así decirlo, hasta que... Se queda en silencio – ¡Nuestro padre la mato!_ De la nada sale frente a mi.
– Sabes que no fue intencional, ¡Fue un accidente!, además nadie sabía la aventura que tenías con ella.
– ¡Aventura!_ Sus ojos enrojecen – ¡No era una aventura! yo la amaba, me enseño que un vampiro tambien podia sentir_ Lo último lo susurra, sé que se siente, es justamente lo que Gabriela me produce, pero nunca admitiré eso, no en voz alta.
– Todos pensaban que ella era la que te había matado.
– Pero fuiste tu y no hiciste nada para detener su muerte_ Me mira con rabia – Ella pudo vivir, pero prefirió darme la poca sangre que le quedaba en su cuerpo, y ahora estoy dispuesto a vengarme_ Mira a Gabriela – Cuidala_ Es lo último que dice antes de esfumarce.
– Es mejor que nos vayamos ya_ Cárter mira a Laureen, está despertando, comienza a correr y nosotros tras de él. Entramos por la ventana del cuarto de Gabriela que está abierta, la dejo acostada en su cama, Ryan y Cárter dejan a las chicas en una colchoneta que estaba en el armario, una vez nos aseguramos que estan comodas y seguras bajamos, llegamos a la primera planta, se abalanza sobre mí un cuerpo y mi espalda choca contra la pared.
– ¡¿Donde estan?!_ Grita Nicolás con desespero.
– Hey tranquilo_ El moreno toma del hombro a Nicolas pero este se safa de su agarre, se voltea e impacta un puño en su mandíbula, agradezco que fue a Cárter a quien golpea, de ser a Ryan o a mi ya no estaría respirando, el afectado toca la parte golpeada, respira profundo y en un dos por tres lo alsa de la camiseta.
– Están bien si eso es lo que te importa y están en el cuarto de Gabriela_ Lo suelta, el otro vampiro aparte de mi se acerca a él, le toma la quijada y lo mira a los ojos, esto hace que se quede inmóvil.
– Ahora... Las chicas durmieron en tu auto, tu las trajiste aquí, a nosotros la ultima vez que nos viste fue en el parque y si ellas están asustadas tu solo les dirás que todo lo soñaron ¿entendido?_ Nicolas asiente atontado, Ryan se para, deja a Nicolas en el sofá, salimos de la casa lo más rápido y deliciosos que podemos.
P.O.V Gabriela
Despierto por la constante luz que entra por la ventana, me levanto, estoy en mi cuarto, salgo de él y bajó a la cocina hay estan las chicas, cada una con una taza de café en sus manos.
– ¿Como llegamos aquí?_ Pregunto tomando una donut del mesón central.
– Se durmieron en el auto y yo las traje_ Nicolás entra en la cocina tomándonos a todas por sorpresa.
– Estoy pensando ir a clases de boxeo.
– ¿Y eso?_ Lauren toma de su taza.
– Desahogarme.
– Ya ¿No afectará al bebé?
– No me enfrentaré contra nadie, solo será algo de ejercicio y propinarle golpes a un saco, cuando esté más grande tal vez lo deje.
– ¿Que pasa si hago esto?_ Nicolás se acerca sigilosamente a Laureen y le tira harina en el cabello
– Estas muerto_ Laureen toma un huevo y se lo tira al sujeto junto a nosotras, este se agacha haciendo que el artefacto caiga sobre mis pechos, llenandolos de clara, hago una perfecta "o" con mis labios, nos hacemos una mirada de complicidad con Laureen y Nicolás, nos acercamos sigilosamente a Samantha que no nos ha puesto atención en ningún momento, Laureen y yo tomamos un huevo cada una, Nicholas mete su mano en la bolsa de harina y toma una manotada, Samantha esta en su móvil por lo que aún no se ha percatado, los tres colocamos nuestras manos encima de su cabeza haciendo que la harina y los huevos se mezclen y quede cubierta de Viscosidad.
– ¡Se arrepentirán!_ Deja su móvil en el mesón central, salimos corriendo de la cocina y ella nos sigue. Al terminar la mañana estamos un desastre, por un momento he olvidado a Diago, de hecho creo que las tres dejamos a un lado a los chicos, pero por màs que lo intente no logro sacarlo del todo de mi mente.