P.O.V Diago
No quería que se fuera, quería pasar todo el día con ella y si era posible también toda la noche, pero el miedo que pudiera haber leído algo, se que ella no hubiera podido entender siquiera el título de la portada, pero me he salido de mis casillas, tomo mi móvil y busco el contacto de Ryan, doy a la opción llamar.
– Hermano!
– Necesito hablar contigo, no se que hacer.
– ¿Que paso? ¿todo anda bien?
– Si y no, recuerdas que anoche me traje a Gabriela a casa porque se había quedado dormida en mi auto? pues mi hermana la cambio y me entregó la ropa de ella, yo la guarde en un cajón cualquiera, no me di cuenta que en ese cajón estaba Vampire Gesetze y ella lo encontró me altere un poco por lo que allá leído y le dije que se fuera de una manera muy brusca y no se que hacer porque no puedo llegar de la noche a la mañana como si nada hubiera pasado.
– La has cagado, es obvio que ella no pudo haber leído nada y mucho menos entendido ESTÁ EN ALEMÁN.
– No me digas lo obvio, no quiero que ella sepa la clase de monstruo que soy, me altere, que pena!
– No es esa la razón, es porque crees que si se entera de algo pueda que se asuste y la pierdas, en otras palabras no es querer o no querer es miedo a perder y respecto al porqué de tu actitud brusca solo dile que es tu diario y por eso no querías que lo leyera y problema solucionado.
– Pueda que tengas razón pero déjame vivir en mi propia mentira ¿vale? y... ¿en serio un diario? no estoy para chistes ahora Ryan.
– No es un chiste, es una solución.
– Te voy a matar.
– No puedes soy inmortal.
– Conmigo te jodes.
Se que el muy gilipollas se debe estar partiendo de la risa, al imaginarme diciéndole a Gabriela que es mi diario, por otro lado debo hacer algo "lindo" como lo llamaría ella, para que me perdone se que no somos nada pero si quiero que ese "algo" empiece debo arreglar las cosas y no ponerme a la defensiva por todo.
P.O.V Gabriela
– ¿Te acuerdas de la fiesta del sábado?_ Pregunta Samantha algo nerviosa – Pues... Tu sabes...
– Desembucha ya!!_ Digo con desespero.
– MeacostéconKian_ Dice con rapidez y lleva sus manos a la boca..
– Pero que co... ¡sabía que te gustaba, ves, jamás me equivoco _ Hago un ademán de estar orgullosa de mi misma – Pero... Cuenta todo con pelos y señales.
– Claro que no! no te contaré todo meticulosamente _ Pone cara de asco y se aleja un poco de mí – Sólo te diré que hicimos varias poses...
– No me jodas y antes te ríes?_ Rio entre palabras
– Perdoname por dejarte sola el sábado es que ya sabes no me pude resistir.
– Tranquila se que con Kian al lado no piensas.
– Tarde o temprano te vas a enamorar y me entenderás.
– Lo que ustedes dos tienen no es "amor" como tal es más bien como una follamistad.
– ¿Porque lo dices? yo lo quiero mucho a él.
– ¿Pero el a ti?
– Si, me lo dijo cuando...
– ¿Follaron?_ Completo lo que iba a decir aunque no creo que allá querido decirlo tan específico. – Mira si el te quiere te lo demuestra y no está comiéndose con la mirada a todas las zorras que le pasan por el frente _ Miro a Kian que está intercambiando saliva con una rubia.
Samantha voltea a mirar y al ver la escena se le cristalizan los ojos, es en estos momentos donde no se si machacarle la cara, sacarle los ojos y hacérselos comer a ese tarado o quedarme para consolar a mi amiga. No soy agresiva pero optó por la primera opción, me dirijo hacia el, cojo del hombro a ricitos de oro y tiro hacia atrás haciendo que ella retroceda unos pasos, me coloco en medio de los dos.
– ¿Se puede saber a ti qué te pasa?
– Oye Gaby relajate ¿que pasa?
– ¿Que que pasa imbécil?_ Gracias a Dios acaban de timbrar para volver a clases y hay pocos estudiantes – Haber que es lo que quieres con Samantha? O mejor dicho para que la quieres?.
– Mira no estoy para reclamos, después hablo con ella.
– Te advierto, ella vuelve llorar por ti y firmas una sentencia de muerte ¿me oíste?_ Lo amenace, el solo me mira por encima del hombro derecho y se va como si nada, cinco segundos después llega Samantha con los ojos rojos.
– Tienes que hablar con el.
– No me quiere ¿verdad?
– No lo se, por eso necesitas hablar con el para aclarar las cosas y que tú no te hagas ilusiones.
Capítulo dedicado a mi mejor amiga y a todas las chicas con un corazón frágil o roto, por favor no lloren por un hombre porque no merece sus lágrimas y el que las merece no se las hará derramar ;*