No sé cómo llegaste hasta aquí. Tal vez fue por curiosidad, por accidente… o por ese misterioso algoritmo que todo lo ve.
Pero ya estás aquí, y gracias por quedarte.
Has presenciado los primeros latidos de esta historia, y eso —créeme— ya es motivo suficiente para agradecerte. Gracias por leer, por acompañarnos, por seguir las primeras hebras de este tejido multiversal.
Este mundo apenas comienza a desplegar sus capas: sus misterios, sus fragmentos, sus personajes. Cada lectura tuya es una cuerda más que sostiene este proyecto, un hilo que le da forma.
A ti, navegante de realidades improbables, quiero decirte algo: el camino se volverá más extraño… pero nada que nuestro protagonista no pueda enfrentar.
Y antes de que lo olvide, siéntete libre de comentar. Nos encantaría conocer tu punto de vista. Puedes encontrar algo de material visual en la cuenta de Instagram @Grandlordecco, y pronto —con un poco de suerte y caos— también en una página de Facebook.
Nos vemos en el siguiente fragmento.