La gema kurbusum.
El guardián no presto atención a eso y volvió a mirar todo, dentro de la misma tierra había vida y eso le parecía maravilloso.
Dos escalas de tiempo le tomó a Terra restaurar su plasma y ectoplasma se levantó de la tina y observó al guardián.
—Ellos no les gusta que lo toquen y ese esta preparado para atacarte—. Dijo mirando al pequeño animalito con púas.
—Como es que hay vida en el centro de tu planeta y esto es muy colorido—. Pregunto mirando las flores que habían por todo el centro del planeta.
—Tierra y yo les cremamos este ambiente ya que en la superficie eran capturados y eran llevados a estudiarlo, luego ellos morían por estar alejados de su habitad—.
—Tu creación es muy destructiva—.
—Y supongo que la tuya no es así—.
—Lo era pero los castigue por un tiempo—.
—No tengo ese sentir con los míos no todos son destructivos—. Miro al pequeño animal. —Ven aquí Ario necesitas descansar vamos a tu nido—. Movió su mano y un túnel cubierto de nieve apareció.
—A donde vas—.
—A la capa fría de tierra—. Respondió ella.
—Te puedo acompañar—. Ella se encogió de hombros.
Abrió el pasadizo que conectaba el centro de tierra con la capa fría un túnel apareció delante de ellos así sorprendiendo al guardián.
—Ve con tu madre—. Le dijo al pequeño. —Nos vemos luego—. Depósito al pequeño en el hielo y este corrió junto a su madre.
—Esto es hermoso como puedes estar aquí y haya—. Pregunto el guardián.
—Uso los portales o me materializó para poder abarcar todo en mi planeta—. Dijo tocando la nieve y haciendo que salieran escarchas de esta, todo el suelo fue cubierto como si fuese un manto.
—No debe ser tan fácil cuidar de todo esto sola—.
—No lo hago sola, también me ayudan las hadas y las ninfas—.
—Como no las he visto—.
—Por que ellas viven en los bosques por eso no las ves, tal vez conozcas alguna—.
—Me gustaría—.
—Daré los últimos retoques a este lugar es mucho más cálido con la escarcha de nieve que con el hielo—. Extendió sus brazos y con el elemento de agua cubrió los árboles estos quedaron cubiertos de escarcha.
—Y esos que hay de esas cosas—. Dijo él guardián señalando algunas plantas.
—Eso se llama plantas y sirve de alimento para los animales que viven en esta área—.
—Ya—. Asintio el guardián, regresaron al núcleo de tierra cerrando así el pasadizo que los llevaba de un lugar a otro.
Al llegar al núcleo subieron a la superficie ya que ella se encargaría de dar su recorrido.
Y así lo hizo le tomó algo de tiempo ya que había tardado doce escalas de tiempo regenerando su plasma.
Y así lo había sido durante una semana, al parecer todo iba bien entre el guardián y Terra, la cual aun no se había dado cuenta de lo que acontecía en el núcleo de tierra, este cada vez se tornaba más oscuro, los árboles empezaron a llenarse de hongos y los animales enfermaban, Terra no daba con el problema, estaba tan ocupada trabajando en ayudar los árboles y los animales.
—Tierra háblame dime qué pasa contigo—. Tocaba el suelo para comunicarse con ella. —No se que hacer es la primera vez que mis métodos no funcionan es exasperante esto tierra dime qué más puedo hacer lo he intentado todo—. Así ella lo había hecho curaba los ríos pero cada vez estos más tenían sus aguas turbias los árboles se ponían negros y se pudrían desde la raíz, todo estaba muriendo. —¿Qué te pasa háblame? —. Un olor putrefacto salía desde tierra.
—Tal vez está muriendo—. Dijo el guardián.
—Si lo estuviera yo también estuviera muriendo—. Él guardián la miro su cuerpo de humana también se ponía negro.
—Segura mírate estas negra como los árboles y los animales—. Las aves empezaron a caer, los animales terrestres también lo hacían.
—¿Que les sucede a todos?, levántense los acaba de curar—. Trato de levantarse más no pudo, miro sus manos las veía doble.
—Guardiana que te sucede por que tu cuerpo se está tornando negro—. Ella no le contesto y no lo miro.
Su vista era borrosa se levantó y se suspendió en el aire, se condujo hasta dentro de la cabaña, toco el tronco este abrió el portal y ella entró en él.
El guardián la siguió se sentía preocupado por esa chica que a simple vista parecía una niña muy asustada y no era para menos su planeta estaba muriendo.
—Déjame ayudarte—. La tomó en brazos. —¿Dime a donde quieres que te lleve?—. Pregunto.
—Llévame al núcleo ahí me daré cuenta que sucede con tierra—. Camino hasta él núcleo.
—Se supone que la gema ayudaría a la guardiana si esto sigue así mi estadía aquí sera mas larga y no podré estar con Ambilic—. Pensó para si.
Terra mira la esfera donde estaba el núcleo de tierra, este estaba totalmente negro, estaba consumiendo a tierra lentamente.
—Bájame—. Pidió.
—Estas débil—.
—¿Que me bajes? —.
—Esta bien—. El guardián la depósito en el suelo.
Ella se acercó al núcleo como pudo.
—¿Tierra quien te hizo esto?—. Dijo al borde del llanto. —¿Cómo no me di cuenta antes? —. Metió su mano en el núcleo y empezó a buscar, dentro del núcleo palpo algo puntiagudo y lo tomo.
Lo observó, era una gema en forma de rombo este desprendía una energía oscura.
—Que hace una gema kurbusum en ti—. Él guardián miro hacia ella.