Prologo.
Una presentación sutil.
Hoy es un gran día para reflexionar sobre tantas cosas del ayer.
El ayer…
Fue divertido y debo recalcar con todo el ímpetu del mundo, que realmente fue divertida la vida junto a ti. Fue interesante, fue estresante, fue y seguirá siendo tiempo pasado. Un momento de mi vida que ya no volverá, que voy a extrañar, que voy a intentar olvidar y después me detendré de nuevo e intentaré evocar pequeños momentos felices y tristes de ese pasado divertido, interesante y estresante.
Nadie me dijo que contar memorias fuese tan difícil, pero al menos debo intentarlo. Quisiera ser como esas personas, que con sus letras te llevan a lugares y momentos de la vida, en otros cuerpos, en otras mentes o en otros mundos. Hacerte sentir la brisa, los sonidos, la alegría o el dolor que vive una persona con solo unas pocas palabras.
Pero como debes haber notado, yo no soy ese tipo de ser majestuoso.
Yo solo soy otra persona normal. Intentaré organizar palabras que puedan detallar lo más breve posible, lo que fue de ti y lo que quedó de mí.
A ti te dedico las palabras aferradas a mí y que hasta hoy me había negado a confesar. Si pudiera hacer llegar mis palabras hacia ti, resumiría todo mi mundo en las únicas dos palabras que nunca te di.
Nuestra historia terminará pronto, espero no quedarme sola de nuevo y esta vez me lleves contigo.
Tristeza, locura, agonía, felicidad, amor,
Para mí todo es lo mismo,
En el verso final,
Solo hay soledad.
Editado: 28.02.2022