Te extraño... No, miento. Extraño lo que solíamos ser. Extraño lo que solía sentir. Extraño esas horas interminables de charlas sin sentido que me hacían sentir acompañada. Extraño esas llamadas de improvisto porque la otra estaba mal y necesitaba escuchar nuestra voz porque la tranquilizaba. Extraño que me dijeras que me amas y que soy tu cable a tierra, que perderías la cordura si no me tuvieras de este lado de la línea. Extraño sentir esas mariposas de emoción cuando llegaban tus mensajes. Extraño que me acompañaras mientras lloraba a estas horas de la madrugada porque sentía que no valía la pena seguir viva. Extraño saber que si una estaba mal, la otra estaba a solo un "click" y que, sin importar que tan poca importancia tenía lo que le estaba pasando, ambas nos sentíamos igual.
Extraño poder decirte que te amo y no sentirme mal por hacerlo. Extraño cuando era alguien importante para vos, y no era una más del montón que olvidaste con el tiempo...