Capítulo 15 Final Parte 1
-La montaña ha ensombrecido estos bosques durante demasiado tiempo. Nos han cazado, controlado, convertido en monstruos. Eso termina hoy- Lexa
Límites entre Boudalan y Trikru
Shaony y Ydna están ocultos en una de las chozas, fuera Elmo está reunido con Fefa, Edward, Héctor y 5 hombres más. La médica se mantenía escuchando atenta por unos orificios para no perderse de nada de lo que dicen, mientras el joven sin recuerdos está mirando algunos instrumentos de tratamientos quirúrgicos.
-Esos del bosque al parecer huyeron despavoridos sin su líder- Fefa contaba.
-Mal, no me trajiste un par de cabezas…- Elmo niega.
Agustina sale de otra de las chozas vestida con una falda terrestre de pieles, haciéndole ver las piernas descubiertas, mantenía su ropa superior de gente del cielo. Elmo quedo en silencio un rato, por lo que uno de los terrestres habla.
-Edward logro colocar las bombas, creí que se volaría a sí mismo- ríe.
-Edward saber lo que hace, Edward no ser tomado a la ligera- responde el aludido virando los ojos, sin ningún motivo por el cual hacerlo.
-No creo que de parte de Boudalan tengamos problemas, ¿qué tal esa nave que surte agua?- Pregunta Héctor.
-La verdad, esperaremos que mueran todos, para saquearla- Elmo camina hasta agustina y la intimida sujetando su mejilla. –Es un buen paso, Agus del cielo.
-¿así que me intentas coquetear?- agustina le hace una mirada seductora.
-no me tientes, podría llegar a hacerlo- dice Elmo sonriente de satisfacción. –No dejen de vigilar el puente…- dice dirigiéndose al resto expectante, cuando de pronto, suena una explosión…
-El puente…- Héctor se alarma.
-ustedes cinco vayan, Héctor ve a la reserva de suministros busca las armas del cielo Edward, vigila a los invitados, Fefa mmm mantente cerca- dichas ordenes son acatadas de inmediato.
-¿que fue ese ruido?- Agustina mira en dirección al suceso.
-problemas menores…- se encoje de hombros Elmo. –mira, para ganar una guerra en desventaja, a veces debes hacerte el perdedor… nos valemos de trampas dado que somos minoría abismal, hasta el clan más extinto podría con nosotros- le revela como si nada. –Tal vez no, si no son guerreros mejor dicho, cada uno de nosotros estamos adiestrados en artes de combate, muy bien diría yo- señala hacia los troncos en el suelo para ofrecerle sentarse. –sin querer sonar engreído ni nada, las habilidades hacen al guerrero.
-no me quiero sentar, ¿y si me enseñas puntería?- dice de pronto, sorprendiéndolo.
-eso es nuevo… pero tendría que sujetarte la cintura para mostrarte la postura correcta, ¿dejarías tal acercamiento?- dice con tono a susurro, y más grueso, esperando una reacción de ella.
-no me importa, tampoco es que fueses a pasar de eso, ¿o sí?- jugando su mismo juego, a lo que este ríe un poco.
-eres buena, tienes un don para liderar- satisfecho, saca unas hojas del tamaño de una navaja. –Mis armas arrojadizas, practicaremos con aquella puerta- le indica señalándola.
Mientras esto, unos minutos antes…
el grupo de Joel, Finn, Anya y Dino, lograron llegar a más de la mitad del puente, con total calma.
-mejor que uno de nosotros vaya delante- dice uno de los terrestres, dado que Anya daba la cara al frente. Ella afirma, dejando que dos de estos, culminaran el trabajo de quitar las púas.
-esto me está aburriendo como nunca, porque te pusieron Dino…- interrumpe Joel el silencio.
-Dino es mi nombre de guerrero- responde a secas.
-olvide que todos son cara de culos, me vale- suspira, la verdad es que le estaba matando la impaciencia por dentro, pero no podría hacer nada.
-dígnense a apuntar cualquier cosa que se mueva desde el bosque- regaña Anya.
-a todo esto, si existía este camino para venir hasta aquí, ¿porque nosotros llegamos hasta otra parte de ese cañón?- recuerda Finn, a lo que Joel agradece por preguntar.
-Para llegar a este camino es algo difícil, la entrada principal es por el cañón que usaron, en estas partes del bosque viven los Tajuar- revela Anya.
-¿Qué es un Tajuar?- Joel pregunta antes que Finn.
-un felino mutante- zanja la conversación Dino, señalando al frente, habían extrañas capas de césped movidas por el terreno como si cubriesen algo redondo.
-podrían ser minas- supone Finn al darse cuenta.
-Que tontos, dejar trampas a la vista- dice uno de los terrestres terminando de quitar las púas del puente y pisando una parte donde no estaban estos césped improvisados, explotando en pedazos, sorprendiéndolos, el puente se resquebraja por la cercanía de la explosión, en su base con la tierra.
-mierda… era algo evidente o no- bufa Joel, frustrado, por el sonido que debió de llamar la atención.
-si… igual no dio tiempo para avisarle- dice fríamente Anya.
-estarán por venir- Dino advierte, el resto de terrestres preparan sus arcos.
-no, no, salgamos de este puente primero, joder- Joel, insiste, se había dado cuenta de las grietas.
Todos salen con cuidado pisando los montículos más cercanos de hierba improvisada, ninguno exploto. Pero no sabrían si más adelante, estos fuesen reales o no.
-no podemos quedarnos aquí como blancos fáciles…- se queja Anya. –es imposible que tuvieran acceso a tantas explosivas.
-minas- corrige Finn. –hay una forma de averiguarlo… cúbranse.
-no para…- Joel intenta detenerlo, pero Finn lo hace de todas formas, disparando hacia una línea recta hacia el bosque, y regresando con una separación de medio metro, en dos ocasiones explota el trayecto.
-listo, por aquí ya es seguro- anuncia Finn, sin embargo, unas flechas, salen desde el bosque.
-mierda, no tenemos cobertura acá- Joel, dispara a lo que cree ver moverse, pero unas dos veces nada más, para chequear.
Los terrestres restantes cubrieron a Anya, y a Dino, disparando de igual manera hacia el bosque.
-Aprovechemos entre asedios, no pueden disparar tantas a la vez- Anya ordena, yendo primera por el camino que había limpiado Finn, cubriéndose al llegar a los inicios del bosque contra un árbol.
En ese momento escuchan el rugido de un felino.
-los disparos y las detonaciones le atrajeron- vocifera Dino, yendo por el camino en la brecha entre disparos, llegando también hacia un árbol a la derecha de Anya. Finn aprovechó el momento para recargar su arma, y escucharon como un grito provenía del bosque muy cercano.
-hacen nuestro trabajo- concluye Joel, corriendo el primero ante el cese de flechazos, seguido de Finn y el resto, nada más el ultimo es alcanzado por una flecha en el torso, sin morir.
El felino parecía estar arrancando las extremidades de alguien, que seguía gritando de dolor.
-no sabemos si hay más trampas en el bosque…- dice Anya a todos, con voz audible.
-Habla traidora- un terrestre de Qovuldukru, sale de detrás de su árbol, enterrando un cuchillo en donde estuvo la cabeza de Anya, que se había quitado a penas, dada la fuerza; se ve obligado a soltarlo o tardaría en sacarlo. Anya limpiamente hace un movimiento de su cuchilla desde la boca del estómago hacia la garganta del terrestre, cortándole levemente, por lo que la línea de corte, se torna roja por el sangrado. –Perra-
-Dilo cuando me ganes, basura- Anya, esquiva un derechazo lanzado a puño limpio, y le entierra la cuchilla en el muslo izquierdo. El agresor aguanta el dolor, intentando, juntar sus manos para darle un golpe martillo dada la inclinación de ella. Pero Anya saca la cuchilla, la gira en su mano hacia arriba y la entierra en lo que el baja las manos, en todo el mentón hacia arriba. La fuerza de los puños apenas es la de un peso muerto dándole en la parte superior de la espalda.
El mismo tiempo, Finn y Joel, habían abierto fuego hacia el bosque, matando a uno de estos terrestres.
Un Tajuar aparece del lado izquierdo de todos, mordiendo a uno de los ayudantes de Dino y balanceándolo por los aires, desprendiéndole la pierna mordida del cuerpo, el cual se va volando hacia la fisura y cae.
El siguiente a este, es el mismo Dino. El cual sin perder tiempo, trepa en el árbol con agilidad, dado que son escaladores de Boudalan, trepar es una de sus virtudes. Anya se deja caer el cuerpo del terrestre de Qovuldukru encima para aparentar estar muerta.
El Tajuar observa a los dos jóvenes que dejaron de disparar al bosque al notar la presencia del felino mutante, que ruge hacia ellos.
-¡Dispara!- grita Joel, y Finn abre fuego, el felino corre hacia estos, escupiendo la pierna a un lado. Los disparos le dan en parte del cuerpo, al ladearse para evadir la agresión, Joel se une a las descargas, aunque los salva que en mitad del camino hacia estos una mina le hace explotar, elevando el cuerpo del mismo por los aires.
-mierda… no se supone que solo íbamos a robar bombas- bufa Finn, agitado, cuando un terrestre de Qovuldukru aparece desde el bosque, y le sujeta el cuello, levantándolo por los aires. Joel a sus espaldas, no tiene balas en la recamara, por lo que trastabilla sus manos al buscar las cargas para hacerlo con rapidez, sin embargo, una flecha desde un árbol cercano se entierra desde atrás de la cabeza, saliendo por el ojo del terrestre. Que suelta a Finn y cae desplomado.
Dino le hace señas, e indica que hagan silencio.
Joel se le cae el cartucho de recarga, sonando levemente una de las balas al rodar por el suelo… un rugido cubre el sector.
Anya se estaba levantando, cuando escucha eso, vuelve a suspirar y quedarse quieta.
Oyen como la maleza está moviéndose, en dirección a ellos, dado que el sonido se hace cada vez más cercano.
Finn se sujetaba el cuello, sobándose, y hace una mirada a Joel de como rayos iban a hacer, Joel le indica que cambien de cobertura de inmediato, por lo que Finn y este se mueven con precaución hacia el árbol donde estuvo Dino, que es grueso y ofrece una mejor defensa para dos.
El Tajuar sale justo donde está el cartucho caído de Joel, y lo empuja con sus patas, haciendo que rueden. Empieza a oler por el aire.
La tensión crece, no saben si está ciego o qué, pero evidentemente se veían los dos jóvenes, el Tajuar se acercó al cuerpo del terrestre sobre Anya, y le mordió la cabeza arrastrándolo por sobre ella hacia sí mismo, para comenzar a devorarlo.
Al cabo de unos instantes, que parecieron eternos para Joel y Finn, Dino dispara una flecha certera en medio de la cabeza del Tajuar, que cae desplomado en el acto. Luego de ello, baja del árbol tirándose.
-no hay más por la zona- informa.
-¿cómo sabes?- exclama Finn, revisando su arma.
-en el área de la montaña roja no hay mucho que cazar, y enviamos algunos exploradores a estas partes de los limites, siempre informando a Trikru de ello…- responde ayudando a levantarse a Anya.
-bien hecho, creí que morirían de primeros- Anya le dice a los dos. –tal vez sean un poco como Clarke.
-a mí no me compares con esa- Joel bufa.
-si no eres como ella, seguro terminas muerto- le reprende Anya.
-bueno, te cuento que soy mucho mejor que ella- le responde de vuelta.
-podríamos probar- Anya eleva la cuchilla hacia la garganta de Joel que apenas retrocede un poco por el temor de que fuese a cortarle enserio.
-¡venga!- Finn apunta el arma a Anya.
-no lo iba a hacer enserio, solo quería ver si se iba a orinar- Anya se gira.
-te equivocaste de persona…- Joel recobra la compostura, aunque había tenido algo de miedo, no es que fuese la primera vez que sentía algo así… -si quieres ver a alguien orinar, hazlo con Graham.
Finn niega la cabeza, bajando el arma.
-eliminamos la primera tanda de estos terrestres, vendrán un par más, preparados…- Anya dice, tomando el arma del terrestre que asesino del árbol.