Capítulo 8 - Sucesos confusos

- Anna, Anna, ¡Anna!
- Ahh! - Me he despertado exaltada y se me dificulta el poder respirar, estoy empapada en sudor. 
- ¿Estás bien? - Me pregunta Sara, mirándome directamente a los ojos mientras me toma firmemente de los brazos.
- ¿Qué me ha pasado? 
- Te has desmayado, te llevé hasta la cama y dormiste toda la noche. 
<<Ya recuerdo... aquel anciano... Harry, se llamaba, vi su nombre grabado en la etiqueta de su camisa>>
- ¿Qué hora es?
- Las 8:30 am
- Me duele la cabeza... ajjj

Trak Trak - Se ha escuchado un extraño sonido que proviene de detrás de la puerta.
- ¿Qué ha sido eso? - Le pregunto a Sara mientras me levanto rápidamente de la cama.
- Pues.. no lo sé, seguramente es el recepcionista, vayamos a ver. 
Sara abrió la puerta de la habitación y ambas salimos a la recepción.
- ¿Quién es....? - Una señora, ya mayor, estaba limpiando la decoración del lugar. <<¿Acaso es la mucama?>>
Sara se acerca a ella y apoya su mano en el hombro de la anciana intentando llamar su atención.
- Buenos días, señora. ¿Puede usded informar al recepcionista de nuestro retir....?
- Ahhhh! ¡¿Quienes sois vosotras?! - La señora ha pegado un grito en cuanto se dio cuenta de nuestra presencia.
- Siento asustarla, señora. Verá, es que mi hermana y yo nos hospedamos en este lugar la noche pasada, vengo a informarle de que ya nos marchamos, es todo. - Explica Sara a la viejecilla que nos mira con cara de espanto.
- ¡¿Pero de qué hablas?! ¡Yo no recuerdo haber recibido a nadie anoche!
Tomo aire y continúo. - No, usted no, sino el señor que también trabaja aquí.
- ¡¿A quién hos referís?! ¡Sólo yo vivo en este lugar!, ¡Sólo yo!
Comienzo a impacientarme <<Es una ancianita, tiene mala memoria, o está un poco loca>> Miro arriba y abajo, a un lado y al otro, algo estresada, y me he dado cuenta de algo, de la pared colgaba un cuadro con el retrato de un señor, lleva gorra, unos espejuelos y un gran bigote <<Me resulta familiar...>>
- ¡¡Es él!! ¡Mire allí, el del cuadro! ¡Harry! -  Le muestro a la señora aquel retrato del anciano que nos atendió la noche anterior, <<Definitivamente es él>>
- ¿Harry? - Dice con voz temblorosa y su cara se pone pálida. 
- Eso es imposible. -Agrega.
- ¡Le estamos diciendo la verdad!- Also la voz.
Sara no se mueve, ni siquiera se inmuta a hablar, sólo se queda ahí, observando con detalle lo que está sucediendo.
- Les digo que es imposible... él no pudo haber sido, no pudo. - Las manos comienzan a temblarle y se sienta en un gran sillón que se encuentra a su derecha. - Él no pudo haber sido porque él... porque él... ¡lleva muerto más de 30 años!
Sentí como si mi corazón hubiera dejado de latir por unos segundos, no sentía mi cuerpo. Estaba asustada. <<¿Qué acababa de decir..?>> <<¿Qué vimos un fantasma?>>
La señora se levanta ágilmente del sillón, como si aún fuera muy jóven. 
- ¡Será mejor que se larguen de aquí, ya! 
Sara reaccionó tan rápido como pudo, tomó nuestras cosas y me agarró del brazo haciéndome salir de aquel lugar.
<<¡¿Qué mierda está pasando?!>> <<¿Vimos a un fantasma o sólo era la anciana jugándonos una broma?...No lo creo >>
- ¡¿Qué es todo esto, Anna!? ¿Me estás tomando el pelo? ¿Me vas a decir que aquel señor, al que vimos, estaba muerto? ¡Si esto es una broma... ya no me gusta! - Me grita Sara al salir de aquella casa.
Me muerdo el labio para contener el llanto, estoy asustada y tampoco se que está pasando. Pero no es algo normal. ¿Ahora que hago?
Sara ve mi reacción y se da cuenta de que estoy tan perdida como ella, pensé que me golpearía en la cara, pero en vez de eso, me da un fuerte abrazo. 
- Lo siento, Anna. - Me dice entre sollozos.
Pasado un tiempo, Sara se separa de mi. 
- Debemos irnos. - Me dice
- ¿Hacia dónde?
- Ravenforst, ¿no? - Me sorprende su respuesta, después de todo lo que acaba de pasar. 
- Está bien. - Respondo y seguimos caminando.
Después de recorrer una larga distancia, comencé a sentir frío, la temperatura fué bajando rápidamente y una espesa niebla nos fue rodeando poco a poco. 
- Por las condiciones en que nos encontramos puedo asegurar que ya estamos en donde deberíamos. Hárrison Énderson.
Un silencio abrumador inunda las calles, sólo se escucha el sonido fantasmal del viendo azotando las hojas de los árboles. <<Como siempre...>>
- Ugg! - Me quejo.
- ¿Qué sucede?
- Intento enviarle un mensaje a Jake, indicándole donde estoy, siento que debería hacerlo. Pero hay un problema... No hay cobertura.
- No te preocupes, se enviará automáticamente cuando estemos paradas en un punto donde haya cobertura.
No le presté mucha atención a lo que sucedía a mi alrededor, me concentré en buscar cobertura, <<¡A ver si llegaba el maldito mensaje!>>
Trac! Aff! ¡Diablos!. - Estuve tan concentrada en la pantalla del teléfono que no me he dado cuenta hacia donde caminaba y terminé chocando contra un cartel metálico.
- Ajj! ¡Mi naríz está sangrando!
Al fijarme en el objeto con el cual había chocado pude notar que en el cartel ponía con letras grandes el nombre de "Ravenforst" y... a unos pocos pasos... se encontraba la entrada de lo que sería un lugar en ruinas, húmedo y olvidado en el pasado.