Capítulo IV

Nota 4. 11 de septiembre, viernes.

- ¡Mary, cálmate! - Le grito a mi compañera de cuarto antes de que alguien la oiga y se la lleve. - ¡Ellos podrían oirte! 
De repente ha comenzado a respirar forzosamente y a temblarle las manos exageradamente, no entiendo que le pasa. 
- ¡Ahhhhhhhh! - Grita espantada y lanza al suelo todo lo que encuentre a su paso: La almohada, una silla y el vaso de agua que yo había dejado sobre la mesita. Los pedazos de vidrio se expanden por el suelo provocando un fuerte ruido que posiblemente haya despertado a medio reformatorio. 
Agito los hombros de Mary y le grito que se calme, la siento en la cama y por fin se queda tranquila.
Rápidamente levanto la silla colocándola en su lugar, algunos de los pedazos de vidrio los escondo debajo de la cama cortándome un poco la mano por el filo de estos y recojo la almohada de Mary del suelo para ponerla en su cama pero noto algo extraño. Pesa un poco. La palpo lentamente y noto algo duro en su interior. 
De pronto siento el sonido de una llave entrando en la cerradura de la puerta de la habitación, en un pis pás dejo la almohada en su sitio y me lanzo a la cama cerrando los ojos y fingiendo estar dormida.
Puedo oir pasos acercarse a la cama de Mary.
Dos personas tienen una conversación pero no puedo entender lo que dicen ya que hablan muy bajo casi en un susurro. 
No puedo ver nada pero se que alguien me ha echado un vistazo. 
Unos minutos después oigo la puerta cerrarse, abro los ojos y miro alrededor. Mary no está, se la han llevado. Lo he intentado pero ha sido inevitable, seguramente ahora mismo la entán llevando a la enfermería para inyectarle alguna sustancia extraña.
Me levanto y voy hacia la cama de mi compañera. Coloco la almohada de ella sobre mis piernas y la reviso más profundamente. Definitivamente hay algo dentro, sólo no se qué. Necesito abrirla.
Pasa por mi mente el recuerdo de la escena de el vaso cayendo y el vidrio en el suelo. 
Tomo uno de ellos y rasgo la almohada por uno de los bordes, meto mi mano lentamente atravesando un montón de algodón que he dejado manchado por pequeñas gotas de sangre y por fin siento algo concreto, lo tomo y lo saco fácilmente.
- ¿Un libro? - Me pregunto a mi misma y abro la primera página.

     * Susan Wayne *

- Día 1

Susan Wayne. Susan Wayne
Susan Wayne. Susan Wayne
Susan Wayne. Susan Wayne
Susan Wayne. Susan Wayne
Susan Wayne. Susan Wayne

<<Parece un tipo de diario o block de notas. Está el nombre de Susan Wayne escrito por lo menos unas 50 veces. ¿Quién es Susan?>>

Susan Wayne. Susan Wayne
Susan Wayne. Susan Wayne
Susan Wayne. Susan Wayne
Susan Wayne. Susan Wayne
Susan Wayne. Susan Wayne

No debo olvidar mi nombre.
Ellas intentan hacerme olvidar, lo sé. No quieren que lo cuente, por eso me tienen retenida aquí. No me dejan salir, quiero salir, quiero salir, quiero salir, quiero salir, quiero salir, quiero salir, quiero salir, quiero salir, quiero salir.

Deduzco que Susan y Mary son la misma persona. Pero, ¿Cómo recordaba su nombre? Yo no recuerdo el mío...
En estas notas ella se refiere a un lugar, un lugar donde la tienen retenida. Pienso que habla del Reformatorio. 
Mary nunca habla cosas coherentes y estoy segura que no siempre ha sido así. 
¿Ellas? ¿A quiénes se refiere? ¿A las mismas personas responsables de su estado? 
Claramente se ve que ella estaba bien en el momento en que escribió esto, algo le hicieron. Lo mismo que han hecho conmigo y con todas las de este reformatorio. Pero ¿por qué? Tengo que investigar, y creo... creo que ya sé por donde empezar...