The Game

8 . Barajas.

Ethan.

Todo el mundo estalla en carcajadas mientras Shawn repite la historia de un Jacob desnudo frente a todo el gimnasio. Amaría haber estado allí. 

La semana ha sido... intensa, a falta de mejores palabras. Este tira y afloja entre Katherine y Jake ha sido un teatro digno de admirar, sobretodo entre la tensión de los últimos días antes del receso de primavera. Afortunadamente, ya es viernes, lo que significa que estamos libres de preocupaciones hasta la próxima semana y, cómo no, hoy hay fiesta. Para la tranquilidad de nuestra mamá gallina Jake, varios miembros del equipo de hockey se ofrecieron a hacerla en la casa de la fraternidad del capitán, lo que resultó muy, muy conveniente porque: 

A) Este montón de gente no hubiese cabido en el apartamento ni a patadas. 

B) Es un desastre que no quería limpiar. 

Y ya que todo el equipo está tan feliz como niño en dulcería por haber cerrado recientemente una de las mejores temporadas que hemos tenido, y tenemos un par de meses antes de regresar al hielo a los entrenamientos formales para la siguiente, ¿Por qué no aprovechar su felicidad tan generosa?

—Ya, en serio —. Jackson, el capitán del equipo, dirige su mirada incrédulo desde su lugar en el suelo, hacia Kate. La mitad del equípo está sentado en los muebles  que acomodaron en una esquina del salón y ocupando el suelo frente a éstos. La mesa de centro está llena de botellas vacías de licor, vasos plásticos y botellines de cerveza. Regresando a la conversación, — ¿Cómo hiciste para que evacuaran el edificio completo? 

Katherine se encoge de hombros. 

—Hablé con el administrador. 

—Lo sobornó con café—. La acusa Jessica y se ríe. Tiene a Evan aferrado a su cintura tras ella. 

—Si eso se logra con café, imagina lo que lograrías con dinero— Replica Christian, antes de tomar un trago de su botella. 

—O con otra cosa —Suelta Jackson. Jake le pega en la parte de atrás de la cabeza. 

—Ehh—Se queja. 

—Honestamente, no creo que haya sido solo el café— Dice Shawn y Kate lo mira con los ojos muy abiertos. 

—Shawn...

—Tenía que decirse, lo siento —Levanta las manos con falsa inocencia.

— Estoy de acuerdo con Reese. Si me lo hubiese pedido alguen tan encantador como tú, no me hubiese negado— los demás se muestran de acuerdo. Kate se limita a rodar los ojos. Ignoro la leve sensación en el centro del pecho  cuando me percato de que se le encienden las mejillas y baja la mirada. 

Me río para mis adentros y me largo a buscar mas cervezas. Cuando regreso, las pongo sobre la mesa y me percato de que ahora las chicas están en la improvisada pista en el centro del salón bailando con Evan. Miro a Katherine, que ahora cierra los ojos. Hay cabellos enmarcando su rostro y las luces se reflejan en su piel debido a la tela brillante de la blusa que lleva puesta. Se ve increíble. 

Ja, como si en algún momento se viera algo menos que increíble. Podría ponerse una bolsa de basura encima y para mi seguiría viéndose genial.

Maldito corazón inoportuno. 

Verla es como un golpe en el estómago porque solo es un recordatorio de que está fuera de mi alcance. 

No puedo decir exactamente cuándo o cómo empecé a sentir algo por Kate, solo se que ahora lo siento y no se que hacer con eso. A ver, conozco a la chica desde hace años y admito que apenas la vi se me hizo endiabladamente atractiva, mucho mas que el resto de las chicas que conocía y que conozco, pero nunca la vi como algo mas que no fuese una amiga. Y no se qué cosa vudú me habrá hecho con sus ojos, o su sonrisa, o su aroma, o toda ella... el punto es que se me ha metido debajo de la piel como nadie. Lo más gracioso del asunto es que nunca deja de burlarse de mi, diciendo que algún dia me enamoraré y no sabré que hacer con "esa chica". 

Si tan solo supieras, Kate. 

Lo peor es que le prometí a Jacob voluntariamente que no me metería con ella, y eso me deja en un dilema aún mas grande. No dejo de sentirme como la mierda por caer a los pies de una chica que tiene todo con mi mejor amigo. 

—Deberías decírselo, ¿sabes? —Shawn me pilla mirándola como idiota y me saca de mi ensimismamiento. Se sienta junto a mi en el sofá, cerveza en mano. Decido hacerme el tonto. 

—¿Decirle qué? 

—Muy gracioso —El sarcasmo le tiñe la voz, que poco después vuelve a ser seria, —Hablo en serio, deberías decirle la verdad. 

—Pero le prometí...

—Olvida esa estupidez por un momento Ethan, porque sabes que Jake no es así. Por primera vez te gusta una chica, por Dios. Creímos que eso no pasaría nunca así que tiene el mismo impacto que si nos dijeras que eres gay. ¿O si lo eres? 

Ruedo los ojos

—Mira, para este punto, nada me sorprende. Y sabes que te queremos sin importar lo que quieras meterte por...

—Para —Se ríe. —No, no soy gay. 

—Bueno, igual el punto no es ese, el punto es que te gusta la mejor amiga de tu mejor amigo y deberías hacer algo al respecto—Señala. 

—Oh wow, no había notado eso Shawn, de verdad. Eres un genio.—Me mira con cara de pocos amigos. Continúo —Kate no siente lo mismo y aunque lo hiciese, es demasiado para mi. 

—Deberías dejar de chillar y que lo decida ella. Y si le dices, no tendrás la espina por saber qué habría pasado. A lo mejor hasta te llevas una sorpresa.—Lo miro y se me escapa una sonrisa. Asiento.

—Tienes razón

Ah pero ¿significa eso que la situación es fácil? 

Por supuesto que no.

—Siempre la tengo. 

—Imbécil

Me pongo de pie, voy hacia ellos y tomo la mano de Kate para darle la vuelta. Me mira y me sonríe pasándome sus brazos por los hombros y moviéndose conmigo. Obviamente nadie opone resistencia, así Evan y Jessica son libres de restregarse el uno contra el otro sin nadie en la mitad.

Okey, eso sonó horrible. 



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Editado: 21.09.2021

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