The Heirloom

Capítulo 3

Heirloom

Todo ha transcurrido bastante bien después de lo sucedido con papa y Tabitha.

La vibración no volvió a pasar en estos 5 meses, al parecer si fue un agente externo lo que provoco, lo que Lucas y yo sentimos.

Lo que aún no logramos explicarnos es por qué solamente nosotros 2 lo sentimos, pero ya estamos dejando atrás eso.

Gracias a Tabitha el instituto ha pasado de ser horrible a algo un poco mejor que eso.

Podríamos decir que ya somos muy buenos amigos, hasta nos tenemos un nombre de equipo y todo.

Los Tablitos.

Muy original, y nada escandaloso.

—Hijos voy de salida, cuídense mucho y les dejo la cena en la cocina. — entra mama al cuarto.

—Está bien Mama. — hablamos en coro.

Últimamente mama no ha estado mucho en casa. Siempre sale por las mañanas muy muy temprano y siempre regresa solamente a prepararnos comida y luego se va.

No sabemos realmente donde va, pero estamos preocupados, ya que papa tampoco sea aparecido por la casa.

Esto lo entendemos un poco porque él está en la marina y creo que es muy exigente.

Además, está el tema que lo transfirieron por una misión especial, puede que tenga que ver con eso.

—¡LOGAN!! ¡LOGAN!! Despierta. — Lucas con una cara de desesperación y miedo me despierta. 

—¿Que pasa Lucas porque gritas? — me siento instintivamente en mi cama cuando pongo atención.

Entonces escucho, en la planta baja de la casa se escucha como si estuvieran 5 personas estuvieran luchando entre sí.

Decidí por instinto ir a ver y alertar a mama o papa si es que se encontraban en casa.

Pero no estaban en sus habitaciones ninguno de los 2, lo único que logre pensar es tomar un arma que papa siempre escondía en su escritorio.

No pregunten como me di cuenta.

Las escaleras están de frente a la entrada principal, y puedo identificar muchas manchas de sangre a lo lejos.

Esto encendió mis alertas, ¿será mama? ¿será papa?

Al bajar las escaleras, al lado derecho esta la cocina, todo ese ruido venia de la cocina.

Tengo mucho miedo de ver lo que esté pasando en este lugar, mis manos tiemblan de los nervios, estoy sudando tanto que podría hasta resbalar por ella.

Estoy contra la pared antes de entrar a la cocina.

Entonces escucho.

—Suéltame, por favor podemos arreglar esto como personas civilizadas no hay que seguir con la violencia.

Al escuchar esa voz me quede paralizado, era la voz de mi mama.

Mi mama podría ser la de toda esa sangre.

¿Qué está pasando aquí? Porque, porque le están haciendo esto a mi madre.

De pronto lo escucho.

un disparo, un único, sonoro y penetrante disparo.

Suelto el arma que llevo en mis manos y no sé qué hacer.

Escucho abrir la puerta trasera y luego silencio.

Veo a la puerta de la cocina y enfoco mi mirada a la sangre que está saliendo por la parte baja de ella.

Me pongo de pies instintivamente abro la puerta y la veo.

MAMA ESTA TIRADA EN EL PISO.

Un charco de sangre la rodea, su blusa ya no era blanca, estaba casi en su totalidad roja.

Con muchos golpes en su cara, rasgaduras en su cuello como que una cuerda hubiera estado atada a su alrededor.

Me invade el terror, el miedo, la tristeza.

Era mi madre la que se encontraba en el piso.

Me tiro hacia ella, tratando de que hable conmigo, que me diga algo, que me diga que todo va a estar bien.

Estoy llorando desesperadamente, mis manos tiemblan, mi mente está completamente en blanco. No sé qué hacer

Cuando escucho toser a mama, escupiendo sangre.

—Hijo toma esto por favor, tu eres elegido por mí para cargar con mi poder. — no entiendo lo que mama está diciéndome, no sé qué se refiere con eso de poder.

Mama tose y tose sangre.

—Mama por favor no hables, no hables, no quiero que mueras por favor. — Veo a mi madre, sacando la última lagrima de su sistema.

—Usa esto todo el tiempo hijo, pero escóndelo siempre. — Mama pone en mis manos un bulto pequeño, puedo sentir que esta enrollado entre un tipo de tela muy rara.

No consigo ponerle mucha atención.

Estoy llorando sin poder parar.

Y luego lo siento.

La poca fuerza que tenía mama al darme esa pequeña envoltura se ha ido, dejo de toser y al instante comienza a sentirse un poco más fría.




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