Capítulo 112.
Y de cierto modo era verdad, pues no habían notado que Gurab pasó frente a sus ojos en dirección al abismo estelar y ellos no se dieron cuenta, pero Nevado reconocería ese olor a kilómetros de distancia, ya que de algo si estaba seguro y era que ambos compartían la atracción por el oro y las piedras preciosas, por lo cual, comenzó a indicar que siguieran la ruta al abismo estelar.
N.- Es por allá…
Z.- ¿Estás seguro?, porque nadie nunca ha explorado el abismo estelar.
N.- Estoy más seguro que nunca.
M.- Entonces vamos.
Zahyir y Jasper continuaron su camino al abismo estelar, pero Nevado se paró en la entrada, pues al ver tal oscuridad se le salió lo cobarde…
N.- Creo que yo los espero aquí, pueden continuar sin mi.
J.- Oh no mi hermano, tú si irás porque fue tu idea venir al abismo estelar.
Z.- ¿Por qué nadie habita esta zona?
Zif.- ¿Estás loca qué no lo sabes?, pensé que Jasper te lo había mencionado.
Z.- No sé de que hablan Jasper.
J.- Esta zona hace mucho tiempo estaba habitada, pero su estrella murió y explotó cuándo MLG entro a este lugar a dar a luz; desde entonces nada ha sobrevivido a este lugar, y no me mires de esa forma, pues lo se porque me tocaba venir a buscar los restos de la estrella que habitaba este lugar y como buen samaritano que soy cumplo con mi deber cuando se me demanda.
Z.- De cuando acá eras tan misericordioso con tu antigua profesión…
J.- Todos tenemos que cumplir un ciclo en esta vida y el mío me encanta.
Z.- Dirás que te encantaba porque no lo sigues haciendo.
J.- Es cierto, lo olvidaba, ahora solo estoy atado a Zabramova día y noche, es un completo tormento.
N.- Bueno, éntrenle, pues ahí dentro los espera el Gurab, vayan por él.
Manfred entró con Zif al abismo estelar; Nevado no se percató de la presencia de Jasper, pues vio entrar a Zahyir y él solo se dio la vuelta y se encontró con Jasper de frente.
N.- Awww, Santa Ramona, no sabes lo horrible que te ves de este ángulo.
Jasper no contestó y cargó a Nevado como saco de papas en su hombro mientras Nevado se quejaba y rogaba porque lo dejara salir de ese lugar, pues todo dentro del abismo estelar era tétrico, como si el tiempo se hubiera congelado y el mal reinara en este lugar.
J.- Si te sigues quejando me aseguraré de que este lugar sea tu nuevo hogar Nevado, ahora no me sorprende la paciencia que tienen Gurab y Manfred al soportarte.
N.- AUXILIO QUIERO REGRESAR…NO ME VOY, ME LLEVAN… ALGUIEN QUE AYUDE A ESTE POBRE PERRO QUE VAN A SACRIFICAR AUXILIOOO…
Z.- Por Dios Santo…que alguien le calle la boca.
M.- El 100% de lo que encuentre es mío Nevado y te quedas con el 0.003% de las sobras.
N.- TA wueno pues… ya decía yo que me gustaba el silencio.
Z.- Eso es magia, se calló al fin.
M.- Tengo mis trucos.
J.- Me tienes que dar una clase entonces.
El grupo de guerreros transitaba por el abismo estelar, el cual daba más miedo que el mismísimo infierno, pues tal parece que todavía podías escuchar los lamentos de lo que alguna vez habitó esta zona prohibida del universo, pero no eran lamentos, sino los sollozos de un Gurab que estaba descargando su ira con todo aquello que se le atravesara, lo cual estaba de cierto modo despertando al MLG de su coma de sueño otorgado por Hipnos y Morfeo, para que de este modo hubiera paz en el universo sin tener que asesinarlo y ser castigados por los Ancestros, pues si no tienes el permiso de los Ancestros para matar a un ser malvado, eres castigado por la acción de Guíank, él tiene rienda suelta para decidir si vive o muere por conocer el rostro de los Ancestros, lo cual le dio cierto tipo de privilegios en especial .
La destrucción que ocasionaba Gurab era increíble, jamás nadie se habría imaginado que el Último Mentalista en realidad sería el único Descendiente de MLG y que ahora era juzgado por venir de un linaje malvado, pero nosotros no decidimos con quién nacer; eso es algo que el Creador lo decide antes de crearnos y mandarnos a algún mundo a vivir… todos tenemos un destino que cumplir, un origen que ocultar y un viaje a lo desconocido que transitar, por lo que de un momento a otro una radiación de flamas verdes comenzó a dar iluminación al lugar .
N.- Ay, Santa Ramona, bájame, yo no quiero ser la ofrenda de sacrificio de nadie.
J.- ¿En serio?, ¿no te puedes quedar un segundo quieto?
Z.- Yo conozco esa luz en la nave, la vi cuando Gurab estaba congelando el camino del infinito y comenzó a explotar en flamas verdes.
M.- Es cierto.
Z.- De seguro está por ese lugar.
Y era cierto, pero Gurab no estaba en su mejor momento, pues de sus ojos brotaban lagrimas de ira, gritaba sin control alguno y logró hacer que los poderes de quiénes entraron en ese lugar no funcionaran, ya que al estar su padre biológico medio consciente, no despierto del todo sino sintiendo su ADN cerca, sintiendo a su única descendencia furioso, hacía que él fuera despertando poco a poco de los encantos de Hipnos y Morfeo y dejara el mundo de los sueños .