Capítulo 114.

Capítulo 114.

Zahyir y Jasper tomaron a Zif quien lloraba desconsolada y la llevaron cargada hasta donde estaban Manfred y Nevado.

M.- Santo cielos, ya casi lo tenías Zif.

Z.- Te equivocas, no lo tenía, se tiene que tener un vínculo más fuerte que el de nosotros dos para hacerlo entrar en razón, un vínculo donde todo siempre hubiera sido diversión y aventura y no amor-odio…

Z.- Yo creo que se quienes pueden hacerlo entrar en razón.

J.- Yo también sospecho de alguien que puede ayudar.

N.- Bueno Zif, ya sabes lo que tienes que hacer, solo que ahora no es un Gurab sino tres, tú te las arreglas para satisfacerlo.

M.- Eso dolerá de seguro.

Z.- Par de idiotas, dejen de hablar de manera pervertida y dejen de hacerse los desentendidos que son ustedes Los Elegidos para esta misión.

N.- JAJAJA… coño, que risa me das, escuchaste Manfred que tú y yo iremos a convencer a esos tres idiotas de ahí…

M.- Escuché fuerte y claro.

N.- jajaja… no puedo creer que piensen que yo me arriesgaré a freír mi trasero por salvarlos a todos, en primer lugar nunca pedí venir, me trajeron a la fuerza.

M.- Segundo, no iremos a ese lugar a perder la vida, hice una apuesta que quiero cumplir.

N.- Tercero, tengo un reino que gobernar.

Z.- Mejor no sigan y apúrense.

N Y M.- Es un rotundo NO.

J.- ¿Saben algo?, mejor irán o se verán conmigo…

N.- Ya decía yo que me traerían para ser una ofrenda de sacrificio… SOY MUY JOVEN PARA MORIR…

Manfred y Nevado fueron acercándose a donde estaban las tres personalidades de Gurab para disponerse a convencer a las tres y no a una sola.

M.- Persuadiremos a las tres.

N.- Ya lo dijo jefe, hágale…

Pues…

M.- ¿ A dónde crees que vas?, tú y yo estamos en esto juntos.

N.- Gurab compadrito, amigo, brother del alma ¿qué crees que haces?, baja de ese lugar y vamos a casa.

La personalidad del ciego contestó:

G.- Nevado…¿eres tu amigo?

N.- Soy yo hermano y Manfred está conmigo.

La personalidad del guerrero Mentalista contestó:

G.- Manfred, ¿acaso esto es un sueño?, ¿Nevado no estaba muerto?

M.- No Gurab, él estaba de parranda, lo conoces bien, siempre le gusta molestarnos con cosas como estas.

La personalidad del diablo contestó:

G.- Entonces, ¿qué demandan ustedes qué haga? ¿qué los lleve directo al infierno en primera clase o qué regrese como antes como un idiota al cual todos le vieron la cara de estúpido?

N.- No sería mala idea.

M.- Nevado, cierra esa boca un momento.

La personalidad del ciego contestó:

G.- Al contrario, déjalo hablar, al fin de cuentas ustedes siempre estarán del lado del bando que les conviene.

Las tres personalidades comenzaron a atacar al dúo dinámico quienes comenzaron a correr por el lugar y comenzaron a lanzarles todo lo que encontraban en el camino a Gurab para detenerlo, ya que no se podían acercar, pero tampoco se podían alejar, y cada paso que daban los llevaba sin darse cuenta un paso más cerca del borde del abismo donde dormía MLG.

Sin darse cuenta resbalaron y cayeron frente al temerario y poderoso guerrero hermafrodita quien estaba luchando internamente contra Hipnos y Morfeo para escapar del mundo de los sueños.

N.- Manfred, esto es un muerto.

M.- Cálmate Nevado, no es la primera vez que vemos un muerto.

N.- Pero no uno que se mueva, es un ZOMBIE, CORREEEE…

M.- Nevado, los zombies aparecerán es en el Armagedón, esto de seguro es el progenitor de Gurab.

N.- Chanfles…¿ y ahora que hacemos?

M.- No despertarlo, ¿ no ves que está dormido?

El dúo dinámico intentó regresar y Manfred lo logró, pero Nevado sin darse cuenta dejo atrapada su cola en una de las manos de MLG, que apretaba con fuerza la cola, y al Nevado sentir como no lo dejarían ir se resignó a decirle a Manfred:

N.- Ve amigo mío, porque a mi ya me llegó la pelona y de esta no salgo ni vivito ni coleando.

Manfred se arriesgó y bajó a ayudar a Nevado, lo soltó y lo lanzó por los aires sin darse cuenta que estaba pasando por enzima de las tres personalidades de Gurab.

N.- Ahora soy el perro volador.

Zahyir, Jasper y Zif evadían los ataques de las personalidades de Gurab aunque era difícil de hacerlo, ya que sin ninguna de las personalidades estar mirándolos siempre terminaban siendo un blanco fácil para sus ataques.

Manfred subió de inmediato para darse cuenta de que estaba siendo acorralado por las tres personalidades de Gurab y ya los tenía muy cerca.