Durante las vacaciones Mitch,Mindy,Clarissa y yo pasamos mucho tiempo juntos. Ellos iban a mis partidos importantes,eramos inseparables. Mitch se había acercado cada vez más a mi y no me importaba su presencia era lo que necesitaba. De Josh trate de ocultar cada sentimiento.... pero se me era difícil porque en cada fiesta se besaba con una chica nueva.
Me encontraba en mi habiatación de nuevo escuchando a mis padres discutir,hasta que escuche golpes. Lo cual me puso alerta, baje rápidamiente la escalera y me encontré con algo desagradable, ellos dos gritandosé, tirandosé cosas. Mi madre agarró un jarrón dispuesta a tirarlo al rostro de mi padre. Hasta que...-Ya basta!. Ustedes son unos idiotas, no saben cuanto los odio por hacerme escuchar cada día sus discusiones, estoy harta, y si pudiera elegir otra familia, eligiría mil veces a una donde sus dos padres se amen. Y me amen!.-Mi vista se nublo, mis lágrimas impedían observar a mis progenitores con el verdadero odio.
-Hija...-Escuche a mi padre hablando detrás, acercandosé, hasta que mi madre pronunció las palabras que hicieron de mi vida un desastre.
-Yo te odio a ti.-Quité las lágrimas de mis mejillas y desvíe mi mirada hacia ella. La mujer que siempre había sido mi ejemplo a seguir confesaba odiarme. Sus ojos color miel me miraban con certeza y enojo, estaba claro que ella era sincera.-¡Nunca quise tenerte! ¡Te Hubiera abortado de no ser por tu padre!.- No me iba a quedar a escucharla. Dispuesta a irme decidí alejarme de la escena.Tal vez esta borracha. Tal vez no quería decirlo. En un acto desprevenido mi madre arrojo el jarrón directo a mi. Fuí rápida y me retiré pero los vidrios salpicaron y uno acabo cortandome la mejilla. Comencé a respirar entrecortado pero no iba a esperar a que me tirara otro más. Camine hacia ella enojada, escuchando la voz de mi padre tratando de calmarme.-Eres una bastarda.-.Mi mano acabó en su mejilla, hacinendo ruido sordo en la sala. Ella se me quedo viendo pero no me importaba, esta mujer ya no era mi madre.
-Tú eres un horrible ser humano y agradezco el hecho de que me odies, porque tú no mereces mi amor y mucho menos que te diga madre. Así que odiame pero recuerda que yo salí de ti y estuve dentro de ti durante 9 meses.-Caminé hacia la puerta, salí dando un puertazo. Toque mi mejillas, la cual estaba sangrando pero no le preste mucha atención.Corrí hacia el parque Swith, corrí durante horas esuchando mi corazón latir, mis mejillas arder. Corrí durante horas buscando una explicación a lo que mi propia madre había confesadó, pero no encontraba una razón de ser. Sentía mis piernas arder, doblarse con cada zancada, pero no me importaba el dolor en mi pecho cada vez aumentaba. Mi respiración era cada vez más pesada,hasta que esuché el claxon de un auto y luego nada...solo oscuridad y voces, sollozos. Luego luces y luego...nada.