The Original Crown

⁵ Señor Fibrald

LEO

El dúo habían aparecido en uno de los portales Olagirk, la pequeña ciudad sobrenatural que se ocultaba debajo de la ciudad de Boston. Los portales no eran material de ciencia ficción, los primeros usaron runas para facilitar la entrada el vasto lugar además de que solo los no humanos podían activarla. Leo comenzaba a dejar atrás los dolores que atacaban sus órganos. Estaba enfermo, de eso no había duda. Pero no era tiempo de lamentos, eso solo servía como más leña para su propósito por el cual se integró en la policía y el por qué se encontraba junto a un humano aficionado con medio cerebro en una de las colonias de los primeros.

—No te separes de mí, si lo haces te captarán como un humano y serás un ingrediente más de caldo —amenazo el pelirrojo con el pelo amarañado—. Los sobrenaturales y los humanos no tienen historial que los etiquete de sociables y no agresivos entre ellos.

—¿Caldo? —pregunto más que escéptico el chico haciendo una mueca de asquerosidad al imaginarse a sí mismo rebanado en pequeñas partes para formar parte de dicha receta, una escena demasiado traumatizante.

«Eso al menos lo mantendrá callado y dócil por un tiempo. Ya comenzaba a irritarme», pensó Leoandryel.

La ciudad había sido alzada por colonos no humanos provenientes de Inglaterra y otros países. No hace más de dos siglos se crearon los cargos de los 5 grandes, quienes eran la ley en el país en que residían. Olagirk era vasta, el comercio abundaba, el trabajo igual; las calles adoquinadas a excepción de las más bajas donde el barro era común; las casas y edificios no llegaban a superar los dos pisos y en raras ocasiones los 3; y como en toda ciudad de mundo, tenían sus barrios tribales, como los Lycans, elfos, razas bajas (Trolls, Ogros, hadas, Puffs y cambiapieles) y demás.

—¿Y a donde nos dirigimos?

—Demonios —murmuro irritado debido a que su amenaza no funcionase—. Una manada de lobos te ataca junto a tus compañeros y justo cuando estábamos por atravesar el puente de runas nos ataca un sobrenatural oscuro, es obvio que no sabemos algo sobre nosotros pero quién nos quiere lastimar si.

—Eso no contesta mi pregunta —replico Marcus de manera insistente.

——¿En verdad eres así de terco siempre? —pregunto incrédulo el detective dirigiéndose brevemente una mirada fruncida.

—Me gusta saber cosas, descubrirlas... No importa si llegan a ser sencillas o más que aterradoras —le respondió mirando con admiración un grupo de mercaderes del medio oriente—, el exeptisistmo es con lo que nacemos y crecemos pero nos lo es arrebatado por el sistema educativo.

Leo dejo que hablase sin frenos, era su segundo plan, ignorándolo en el acto. Si no podía callarlo al menos fingiría que lo escuchaba.

El barrio en el que se encontraban era el centro de la ciudad, el origen; punto de mayor apogeo de comercio donde se intercambiaban, compraban y vendían objetos, comidas y demás relacionados con el mundo no humano. Eran 14 zonas en total, y ellos se dirigían a una conjunta en la que se encontraban, Escala Púrpura, el más lujoso. El ambiente no era sucio; el techo lejano era tierra, rocas y metales; y no hacía falta decir que no había ni un solo humano en kilómetros a la redonda, a excepción de Marcus.

Ya habían avanzado 4 cuadras llegando a detenerse abruptamente en una esquina al captar una patrulla de guardias pasar por en frente del lugar al que planeaban entrar; un edificio de dos plantas, la residencia de la única mujer de los 5 grandes, a quien Cassander venía a visitar.

—¿Por que nos detenemos? —pregunta el chico al oído de su compañero mirando enseguida el grupo de oficiales no humanos pasear por ancha calle— ¿Tienes problemas con ellos?

—No exactamente con esos tipos, sino con uno de los 5... Más bien con dos de ello, me gane su enemistad hace dos días apenas —le acalló la interrogante al castaño ladeando la cabeza de lado a lado con duda sobre sus recuerdos.

—Ah, okay... ¿Les robaste o algo por el estilo?

—Mejor si cierras el hocico y entramos sin que nos vean. Un humano y alguien con quien tienen rivalidades no es una muy buena combinación.

Marcus sonrió con satisfacción reprimiendo una risa leve. Se sentía a gusto fastidiándolo. Leo, por otra parte no podía evitar imaginar nuevas formas de deshacerse de él. «Si no tuviese a este idiota conmigo habría entrado con facilidad —maldijo aceptando que Marcus era tanto un retraso como igual de necesario traerlo consigo—. Tendremos que usar la vieja puerta», pensó el detective tomando de una de las muñecas al muchacho arrastrándolo con el por el mismo camino que recién había transitado.

—O-oye, ¿Por que nos desviamos del camino? La puerta queda en esa dirección —le recordó señalando con la mano libre la entrada al edificio.

—¿Quién dijo que era la única? —interrogo con clara superioridad sin mirar a su compañero y acto seguido llegar a la parte trasera del edificio.

No era un callejón, era demasiado estrecha para serlo; era un pasadizo oscuro, sucio y repugnante, nadie optaría por pasar por ese lugar en su sano juicio. Leo se adentro, Marcus no tuvo mas opción que seguirle teniendo en cuenta que estaba rodeado de sobrenaturales. El largo del sombrío pasaje tenia poco mas de 10 metros de largo y apenas 3 pies pies de ancho. Cassander se detiene exactamente en la mitad de la longitud mirando la pared húmeda con musgo que tenia 90 grados a su derecha, alza la mano y con la palma de esta hace contacto con la superficie desagradable ejerciendo presión sobre ella.

Nada paso.

El novato se echa a reír burlándose de el— Por dios santo, ¿Qué esperabas de eso? Esto no es Harry Potter, ni esta la entrada al callejón Diagon ni nada de eso —le recordó fijándose en no tocar ninguna de las dos paredes que tenia a ambos lados suyos.

Ambos logran oír un traqueteo seguido del sonido de múltiples piedras haciendo fricción entre si. Estaba sucediendo lo mismo que con la pared de cemento en el túnel del metro a excepción de que ciertas, pero pocas, partes de la roca no se hacían polvo sino que caían al suelo en pedazos grandes.



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En el texto hay: monstruos, suspenso, sobrenarutal

Editado: 13.09.2022

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