Pov's Megan:
– Se que no quieren malas noticias ahora que saben lo de Mia pero tengo que decirles algo –la atención de todos se encuentra sobre mi– En la caja venía está nota –se las entrego– Junto con esto –saco el collar de Valery y se lo entrego a Derek. Su rostro cambia en segundos de uno preocupado a uno furioso.
– Tiene a mi hermana –observa la pequeña cadena con atención.
– Las personas en el equipo son cada vez menos a si que necesitamos actuar desde ahora –suspiro– Erika, Sebastián, Mía y Aarón se quedarán aquí, no puedo exponerlos ahora. Los demás tendremos que irnos a Chicago lo antes posible –asienten– Aeryn y Sam sus papeles están listos, pueden irse sin problemas –sonrien apenados.
– Lo sentimos por dejarte en estos momentos pero no podemos seguir así –dice Sam.
– No hay problema, pueden irse –les entrego una carpeta con todo lo que necesitan y se van– Matt, Denisse y mi padre se quedarán con ustedes –señalo a mis hermanos, Erika y Mia– Los demás empiecen a preparan todo, terminemos con esto de una vez –todos empiezan a repartirse las tareas pendientes.
Tomo a Derek de la mano y lo saco del galpón para hablar con el. Cuando llegamos a un lugar apartado lo único que hago es abrazarlo, pasa sus brazos por mi cintura y esconde su rostro en mi cuello.
– Prométeme que pase lo que pase estarás conmigo siempre –murmura sin despegarse de mi.
– Aunque tú no me lo hubieses pedido lo haría todos los días de mi vida –tomo su rostro entre mis manos para que sus ojos me vean– No voy a dejarte y si tengo que dar mi vida para que la tuya este en orden lo voy a hacer sin dudarlo –sonrio un poco. Sus manos hacen más firme su agarre en mi cintura y veo como sus ojos se cristalizan levemente.
– Si tú das tu vida por la mía no valdrá la pena porque estaré muerto de todas formas –junta su frente con la mía sin dejar de mirarme– Rick ya tiene a mi hermana no voy a dejar que te tenga a ti también –deja un beso en mi frente y vuelve a abrazarme.
Sin duda el lugar más seguro que encontraré para refugiarme es en sus brazos.
(...)
Chicago, Estados Unidos.
Aeropuerto Internacional Midway.
Dos días después, 5:27 am.
Los chicos bajan del Yet privado de mi padre para ayudar a bajar las escasas maletas que traemos. Me levanto de mi asiento y empiezo a despertar a las chicas para que suban a los autos.
En el primero se suben Derek de copiloto, Dean, Jess en la parte de atrás y yo de piloto.
En el segundo están Alex de piloto, Rose copiloto y Alice e Ian de pasajeros.
En el tercero Sara de piloto, Jack copiloto y Liam y Vane de pasajeros.
En el último Jake de piloto y Cam de copiloto junto con algunas maletas.
– Pueden dormir, aún nos faltan unas horas –les digo distante. Volver no a sido fácil y más cuando tendremos que quedarnos en la antigua mansión Miller donde quede marcada por muchas cicatrices.
– Tu también deberías dormir –reclama Jess. Cruzamos miradas a través del espejo retrovisor y sé que para ella tampoco es fácil volver.
– No tengo sueño –desvio la mirada a la autopista arrancando el auto. Salimos del aeropuerto en completo silencio, cosa que agradezco, con los autos de los chicos detrás de nosotros.
A los lados del camino se alzan los árboles sin dejar de mover sus hojas a causa del fuerte viento que corre. Por el retrovisor veo a mi hermano durmiendo con su cabeza apoyada en las piernas de Jess y ella solo mantiene sus ojos en el paisaje. Derek se quedó dormido con la cabeza apoyada en la ventana.
– Siempre que las cosas mejoran algo nos hace retroceder –murmura pensativa.
– El destino le pone obstáculos a sus mejores soldados –le digo para animarla aunque no resulta ni para mí.
– Te admiro sabes, siempre encuentras la forma de salir adelante protegiendo a los que te importan poniendo tu vida en riesgo y aún así eres fuerte –pasa sus dedos por el cabello de mi hermano con una sonrisa nostálgica.
– Nunca te han dicho que las apariencias engañan? –la miró unos segundos y vuelvo la vista a la autopista– Puedo aparentar ser fuerte Jess pero eso no significa que de verdad lo sea. Lo que me mantiene en pie es saber que tengo una familia que me apoya tome las decisiones que tome. Cada persona en un pilar, si llego a perder uno empezaré a derrumbarme de a poco hasta que no quede nada –suspiro y continuo– Volver a Chicago hace que recuerdos que había enterrado vuelvan a salir, vivo con el temor de perder a los que amo por alguien de mi pasado –las calles conocidas empiezan a aparecer en mi campo de visión.
Agarro en volante con fuerza dejando mis nudillos blancos. Avanzamos unas calles más y al frente se ve una mansión alejada del resto con diseño propio. Una mano se coloca en mi muslo dando pequeñas caricias para relajarme y lo consigue solo un poco.
Miró de reojo a Derek quien se encontraba mirándome fijamente esperando alguna reacción negativa. Le sonrió un poco forzada para tranquilizarlo y mis ojos se concentran en la mansión frente a nosotros. Freno el auto y bajo para abrir el portón que hace tiempo no se movía de su lugar.
Editado: 21.12.2018