Parte I

14 años después del incendio. 

En la mitad de la primavera, en donde empezaban a brotar de nuevo las flores, los arboles le crecían las hojas muy rápido de lo costumbre. Para la naturaleza era como nacer de nuevo en ese momento. Pero en una ciudad de Estados Unidos, las cosas no pintaban bien. 

Desde el incendio de hace años, mucha gente empezaba a morir, varios cuerpos ahí mutilados inundaba las calles de un modo muy perturbador. La policía no sabia lo que estaba pasando, no había muchas pistas sobre el caso y tampoco indicios, no había absolutamente nada, solo encontraban un especie de símbolo dibujado en las paredes con sangre de las víctimas. Era el mismo símbolo en los reportes que tenían sobre el caso de hace años, no había mucha información sobre ese símbolo, así que era difícil saber de que se trataba y que es lo que significaba. 

En total de muertes sobre pasaba a los 45 personas cada semana, cada 5 días seguidos. Los cuerpos siempre están en modos muy aterradoras, unos estaban con las tripas al aire, otros que tienen el pecho abierto y otros sin cabeza. 

Nadie sabia lo que estaba pasando con esta genta, incluso los que estaban cerca del crimen asesinados, no hubo nadie que pudiera salir vivo de ahí, ya no era seguro las calles, ya se acabo las salidas nocturnas. 

●●● 

En una noche, en una parte de la ciudad. Había un barrio, estaba caminando alguien por ahí, llevaba puesto un chaleco azul marino, pantalones negros, estaban un poco rotos pero igual lo estaba usando. Tenia el pelo castaño y tenia varias canas en la cabeza, tiene igual una cicatriz en el ojo, tenia puestos los guantes para el crudo frio que estaba llegando con una gran rapidez, eran tiempos gélidos comparando a lo que estaba pasando ahora. 

Se estaba dirigiendo hacia un bar que estaba cerca, tenia que tomarse un refresco para pasar un buen rato. Aunque ahí mismo, lo esperaba alguien que necesita algo de el, algo muy importante que mostrarle. 

Cuando llegaba al lugar en donde lo esperaba, recordaba que por aquí, encontraría personas estando aborrachados, con el alcohol en la punta de sus narices, tambaleándose en varias partes del lugar. Ahora esas personas ya no vienen para embriagarse mas, ya casi nadie sale ya, hasta que encuentren al responsable, no habrá ningún lugar para vivir. 

Cuando llego a la puerta, la abrió y entro al bar. Al entrar no había mucha gente por ahí, solo habían mas de 4 o 5 personas, antes este lugar había mas de 16 personas, incluso mas que eso. Ahora esos tiempos quedaron en el pasado. 

Se fue al tomar un asiento y pedir un vaso de vino para calmar un poco la sed, había recorrido mas de 6 cuadras para llegar hasta'ca, era lo justo para pasar la noche ya que las cosas no pintaban bien. 

Se sentía un poco cansado, estaba muy ocupado cuando lo llamaron, era un hombre demasiado ocupado. Al lado suyo, estaba alguien que igual estaba tomando un poco para calmar el miedo. Era una mujer, llevaba un chaleco polar, pantalones marrón, llevaba con ella una caja de cigarrillos, ahora mismo estaba fumando uno. 

Al darse cuenta sobre ella, la otra le empezó a hablar. 

¿?: pensaba que estarías echándote una larga siesta, (pufff) ¿porque te demoraste mucho Lee? 

Les respondió al tiro, ya que ella era que lo estaba esperando a estas horas. 

Lee: pues veras que siempre estoy ocupado con las cosas que hago. Sabes que siempre estoy ocupado. 

¿?: -eso ya lo se... pero sabes que cuando te llamo, es por algo. 

Lee: -Rachel, sabes que ahora no es permitido salir en las noches. 

Rachel: ya lo se... pero ya me conoces... no hay tiempo para en el descanso. 

Lee: (...) 

Rachel: sabes que ahora (tomando un trago de vino) estamos nadando en el mismo infierno. 

Lee: (...) yo creía que ya lo estábamos. 

Rachel: (je) siempre encuentras las respuestas en estas situaciones de la gente. 

Lee: es lo mío... siempre hay una respuesta para esto, incluso si es para los peores momentos. 

Rachel: (je) 

Lee conocía como era Rachel, la conoce hace mucho tiempo. Era un policía, siempre se le encontraban por aquí, le ayudaba a que no tomara mucho. Siempre le ayudaba en los casos, aunque sea un vago Lee, tenia una gran perspectiva con lo que ella traía, cuando traía algo de las escenas del caso, sabia quien era el responsable y lo que sucedió con solo ver un pedazo de ropa o un cuchillo manchado. 

Lee: y entonces, ¿para que me llamaste a estas horas? Sabes que ahora es peligroso salir. 

Rachel: lo se... pero necesito tu ayuda en esta situación. 

Lee: ¿de que se trata ahora? 

Rachel: ten, (le paso una carpeta con información) esto tal vez te suene raro. 

Cuando le paso la carpeta. Lee vio la información que contenía, eran sobre los casos que transcurrieron hace la semana pasada. 

Rachel: ¿te suena familiar ese símbolo? 

Lee: (...) 

Lo vio mas de cerca, no dejo ninguna palabra por leer, vio mas profundo el símbolo que mostraba. 

Rachel: y, ¿sabes sobre ese símbolo? 

Lee: (...) no se que decir... esto... 

Rachel: -que intentas decir? 

Lee: este símbolo lo había visto en una parte, pero no lo recuerdo. 

Rachel: pero, ¿que clase símbolo es? Es de una pandilla ¿cierto? 

Lee: no... es algo mas que eso...mucho mas. 

Rachel se dio cuenta como se puso Lee al ver ese símbolo, se notaba en su rostro, se puso mi serio al ver ese símbolo. Y cuando termino de leer toda la información, se paro de la mesa y dijo: 

Lee: me tengo que ir ahora. 

Rachel: pero, ¿porque? ¿que sucedió? 

Lee: es algo muy importante que tengo que ver yo mismo. 

Rachel: ¿te puedo acompañar? 

Lee: -tienes que irte a tu casa ahora. 

Rachel: ¿porque? ¿que es lo que esta pasando? 

De repente salió corriendo hacia la puerta, salió del lugar corriendo a una dirección que el solo conocía, igual salió Rachel del bar, estaba preocupada como es que salió de esa manera. 

Cuando los dos salieron del lugar, Rachel justo corrió hacia Lee, intentado pararlo, al tenerlo ahí, le dijo: 

Rachel: ¿que lo que esta pasando por tu mente? ¿que encontraste en ese símbolo? 

Estaba muy preocupada por el, empezó a transpirar al ver mas de a fondo a ese símbolo, había recordado a alguien que llevaba ese símbolo, alguien que había causado mucho sufrimiento este mundo. 

Lee: me recordó a la pesadilla que dejo la cicatriz en el mundo. 

Rachel: ¿pesadilla?... ¿cicatriz?... ¿y eso que significa? 

Lee: (suspiro) enserio que tengo que irme ahora mismo. 

Ella no sabia lo que le paso, pero se notaba en su cara que algo le aterraba, algo que solo el sabia. Entonces lo dejo que se fuera, al verlo irse corriendo, igualmente tenia que irse a su casa, ya era demasiado tarde, entonces fue directo a su casa a pensar lo que había visto en esta noche. 

Cuando los se fueron, Lee tomo la ruta en donde lo llevaba a una iglesia no tan lejos de aquí. Era una iglesia pequeña pero era el lugar que siempre el iba a dar plegarias a dios, llegaba muy aterrado de lo que había visto, ese símbolo, lo recuerda perfectamente. Al llegar a la iglesia, entro rápidamente y cerro con seguro la puerta para que entrara nadie. Cuando estaba adentro, se caía rápidamente y al final se quedo ahí tirado con el miedo hasta el cuello, diciéndose esto: 

Lee: porque... porque el... si debería ya estar muerto hace mucho... ¿como mierda pudo a ver vuelto? 

Y estuvo así por toda la noche preguntándose y sufriendo por eso. Algo sabia sobre ese símbolo que no quería saber Rachel, pero sabia algo mas de eso: "que a vuelto". 

●●● 

Al siguiente día, en la parte de la ciudad, en el Este. Había una población que estaba una familia que estaba apunto de partir en un viaje familiar. 

En una casa de por ahí, estaba ahí la familia partiendo a un viaje para despejar las mentes. Ahí estaba Lee, con su hermano mayor Hernán, tenia 34 años, 11 años mas que el. Sus hijos iban a partir con su madrina al pueblo donde nacieron los hermanos, aun no se iban, aun era temprano para que se fueran. Ahí estaban hablando lo hermanos por mientras para que no se aburran. 

Hernán: entonces, ¿te sientes mejor? 

Lee: ¿porque lo preguntas? 

Hernán: por la razón que ayer llegaste muy serio y un poco aterrado. 

Lee: ah si... bueno, un poco aun 

Hernán: (...) creo que esta vez estuviste bebiendo mucho, no crees. 

Lee: no es por eso... solo... 

Hernán: se que aun crees que tu sabes quien, volvió, ¿es algo de eso? 

Lee: (si) 

Hernán: pero eso solo era un mito. Como alguien como el podría hacer todo eso. 

Lee: creo que solo exagere un poco. 

Hernán: vamos Lee. Esa cosa no existe, deja de pensar en eso. 

Lee: de acuerdo, solo necesito distraerme por un rato. 

Hernán: así se dice. Solo piensa en otra cosa, olvídate de ese mito tan absurdo. 

Lee: (de acuerdo) 

Con eso, pudo tranquilizarse un poco. Siempre entre los hermanos se ayudan, incluso en los peores casos de la vida. 

Cuando se tranquilizó Lee. La madrina empezó a echar las cosas, vio a los dos ahí conversando por un rato, les dijo: 

Madrina: ¡Oigan! Ya vamos a partir. 

Hernán: bien. 

Ya casi iban a salir, le faltaba poco para arreglar las cosas. Lee estaba aun preocupado, ya sabia que esa cosa del símbolo es un mito, pero algo le perturbada, no es lo que estaba pasando en las calles, es sobre ese símbolo que le mostro Rachel. No sabe como decirlo pero nadie no puede volver desde ese punto que nadie puede volver, nadie puede volver. 

Cuando estaban a punto de partir, los niños salieron de la casa, estaban preparados para el viaje. Hernán veía a sus hijos listos para pasar una gran experiencia en el lugar donde nacieron los hermanos. Aunque Lee vio a la niña de Hernán por ahí, era de 14 años, cabello café corto, ojos de color del cielo celeste, tenia un medallón con forma de un corazón, se llama Emely. Era muy cariñosa y pacifica con todas las personas que conocía. Ahí estaba ella, esperando a alguien por ahí. 

Lee no sabia quien estaba esperando, estaban todos aquí, no había otra razón de a quien mas había que esperar. Así que fue a donde ella a ver lo estaba haciendo ahí parada, ya estaban a punto de partir pero ella era la única que faltaba por venir. 

Al llegar hacia ella, le dijo: 

Lee: ¿que haces aquí? Creía que estarías ya lista. 

Emily: es que yo... 

Lee: esperas a alguien, ¿cierto? 

Emily: (si) 

Lee: creo no va tardar... y una pregunta. 

Emily: ¿si? 

Lee: ¿donde esta tu peluche? Siempre esta contigo. 

Emily: es que... decidió quedarse aquí... para hacerte compañía. 

Lee: te preocupas por mi, ¿cierto? 

Emily: (si) 

Ella sabia que todo el tiempo, Lee estaba muy solo, tubo la idea de que su peluche lo acompañara mientras iba al viaje. Aunque Lee tenia curiosidad sobre del peluche, siempre esta con ella en todas partes, creo que esta vez quiso quedarse y dejar que ella lo disfrutara. 

Lee: oye, no debes preocuparte mucho por mi. Se que me meto en varios líos, pero me se cuidar, ¿vale? 

Emily: vale. 

Lee: buena niña. 

Cuando ya iban a partir. Ahí en ese mismo momento llego la persona que ella estaba esperando. Emily se dio cuenta de su llegada y fue rápidamente hacia el para saludarlo. Lee igual se dio cuenta de su llegada, vio muy feliz a Emily al ver a su amigo llegar. 

El chico que venia por ahí, llevaba puesto un chaleco celeste, pantalones negros y una bufanda puesta alrededor de su cuello, también llevaba un medallón en su cuello, era igual que de Emily pero un poco mas antiguo como de hace años atrás. Era de piel blanco, un poco oscuro. Pelo negro, con una cola de caballo pequeño. Ojos de color negro, y un poco cafés. 

Se veía muy agradable, tranquilo y divertido. Lee lo vio como un buen sujeto aunque de pronto le dio un escalofrío que recorrió todo su cuerpo, sentía algo sobre ese chico que era un poco malo. 

Ahí venia ella con su amigo, se lo presento a Lee. 

Emily: tío Lee, te presento a mi amigo, se llama Rafael. 

Rafael: es un gusto conocerlo. 

Lee: el gusto es mío, gracias. 

Se estrecharon sus manos y se saludaron tranquilamente. Lee vio que el chico tenia fuerza, se veía que no tenia músculos, pero apretaba como uno. Cuando se estaban conociendo, Hernán llamo a Emily por alguna razón, fue rápidamente hacia el y dejo a esos dos que se conocieran. 

Lee: así que, ¿eres el amigo o novio de ella? 

Rafael: si me quiere confundir con uno de esos idiotas, no lo soy. 

Lee: vaya... 

Rafael: lo siento, es que a veces las personas me ven como esas personas. 

Lee: no te juzgo. A veces igual me ven así. 

Rafael: ¿vago? 

Lee: algo así. Pero ya me costumbre. 

Rafael: (...) 

Lee: ¿y que haces aquí? Igual vas a ir. 

Rafael: nah, pasaba por aquí a verla, me conto que estaría fuera de la ciudad por unos días. Entonces me quise despedir de ella. 

Lee: ¿la quieres? 

Rafael: solo es mi amiga. Y me preocupo por ella. 

Lee: vaya, yo creí que de clase no le importaba los sentimientos. 

Rafael: le dije que no soy ellos. 

Lee: solo te estoy molestando, como te ves ahora, te pareces a mi. 

Rafael: al menos tengo trabajo. 

Lee: oye, eso sonó fuerte. 

Rafael: usted comenzó. 

Lee: (je, je) okay dejemos eso ahora, hablemos de otro tema. 

Rafael: esta bien, ¿y de que hablamos ahora? 

Lee: ¿como cuanto años tienes? 

Rafael: ¿que? 

Lee: solo para saber si no eres tan mayor para ser de la misma altura. 

Rafael: eso me ofendió. 

Lee: no es por molestarte pero es que eres como casi de mi estatura. 

Rafael: tengo 18 años. 

Lee: vaya. Tan grande que eres. 

Rafael: bueno, es que nací mas atrás. 

Lee: eso es verdad, por eso que eres mas grande que ella. 

Rafael: no sea tan malo con ella. 

Lee: solo estoy bromeando con la hija de mi hermano. 

Rafael: (je, je, je) entonces le salió bien. 

Lee: gracias. 

Con ese rato que los dejo, ya se llevaban muy bien. Alguien que tenia el mismo sentido del humor de Lee, aunque aun sentía ese escalofrío sobre el. Era como que todo su cuerpo no estaba en contra de el, había algo que lo perturbada mucho sobre el. Era como su algo de el se sobre saltaba y no era tan amigable que se podía decir. Lee siempre veía a gente como era su comportamiento, pero Rafael, no era esa clase de persona, había algo extraño en su ser, algo que Lee sabia, pero le aterraba saber de eso. 

●●● 

Cuando llego la tarde, los niños partieron con su madrina en el viaje. Lee y Hernán se quedaron aquí para dejar a sus hijos tener una gran experiencia en el pueblo. Aunque Lee aun tenia esa sensación mala del chico que vino, algo raro le pasaba, como si tuviera tanto odio. 

Cuando se fueron los niños. Rafael se había ido cuando se despidió de ella, fue caminando hasta una plaza, esa era especial, ya que en el centro de esa plaza había un árbol de pétalos, le gustaba estar ahí, en ese lugar era lo mas preciado de su vida, pasaba el rato para saber de la vida. Recordaba que aquí con su familia permanecía ahí mismo como si fuera, un hogar. 

Al llegar a la plaza, el lugar donde permanecía, estaba en la cima de la colina, en lo mas alto de la colina, permanecía ese árbol. 

Rafael: (recuerdo la primera vez) 

Camino y camino hasta llegar a la cima. Al llegar, fue a hacia el y con su mano, lo toco. Sentía tranquilidad hacia al árbol. Pero a Rafael sentía odio, dolor, ira. Eso sentía todo el tiempo. 

¿?: (je, je, je) 

De repente, se escuchaba alguien riéndose, alguien que solo el sabia. 

Rafael: se que estas ahí. 

¿?: el Rafael de siempre. Preocupándose de una niña, vaya gasto de nuestro tiempo. 

Entre las sombras, se reunía todos los males de varias partes, tomando forma de un ser, ese ser era un demonio que era el. 

¿?: se suponía que ya estarías listo, Rafael. 

Rafael: crees que te voy a escuchar, Hyde... no importa lo que puedes hacerme. 

Hyde: sabes que nuestro objetivo es acabar con el. Y tu solo piensas en ella. 

Rafael: tu sabes que eh perdido todo. No siento nada de ella. 

Hyde: eso lo vamos a ver... veo dentro de tu mente... y se que aun sigues pensándolo. 

Rafael: se que una de nosotros... pero... 

Hyde: ella va estar bien. Lo que nos preocupa es los fragmentos.  

Rafael: ¿estas seguro que funcionara? 

Hyde: si, solo es cuestión de tiempo para que obtengamos lo que queremos. 

Rafael: ¿crees que.... ellos vuelvan? 

Hyde: con nuestro poder. Haremos que vuelvan. Vamos hacer que este mundo nos obedezca. 

Rafael: (...) 

El sabia que esto, tenia un propósito. Este mundo solo nos dio el sufrimiento, casi su gente iba ser borrado de la existencia. Y el, solo quiere recuperar lo que es nuestro. 

Hyde: ya se esta oscureciendo. 

Rafael: Hm... 

Hyde: que comience la noche. 

Rafael: (...) esta bien. 

Hyde: hay que terminar con lo que empezamos. (Je, je, ja) 

Faltaban 4 horas para que oscureciera. La gente no sabia a lo que se enfrentaban. 

●●● 

Al pasar las horas, y el largo camino que recorrían. Estaban llegando al pueblo que nació su padre. En ese lugar era tranquilo y pasivo. En el centro del pueblo, había una catedral enorme que toda la gente venia a rezar todos los días. Tenia de edad 200 años de antigüedad, no sabían como aun seguía en pie después de dos siglos así de que los construyeron, tenia varios secretos escondidos ahí, secretos que nadie debe saber que existieron. 

No le costaron llegar hasta aquí, ya que en el camino no había nadie que hagara trafico. Aunque la verdad, la carretera estaba vacío y no se veía que por aquí no habría pasado nadie. 

La madrina que era Amanda, tenia un mal presentimiento sobre el lugar. Hasta ahora deberían estar alguien por aquí trabajando en la ganadería, agricultura y otras cosas mas, pero nada. 

Igual Emely se dio cuenta, veía en cada pastizal que aparecía, pero estaban muertas, no había pasto ni flores brotando, todo estaba como quemado y seco, y ni ninguna persona o animal por ahí. 

Estaban teniendo miedo de lo que pasaba por ahí. El hermano mayor de Emely, que se llama Rodrigo. Tenia un presentimiento que no era bueno. 

Rodrigo: no crees que este lugar. No es este abandonado. 

Emely: no lo se... 

Rodrigo: es bastante raro todo esto. 

Amanda: estén tranquilos. De seguro que encontremos alguien por aquí. 

Nadie del auto, sabia lo que estaba sucediendo, todas partes estaba muertas y quemadas por alguien. Antes no era así, y además nadie habitaba, ni un solo animal. 

Emely: Amanda, ¿me puedes decir en donde están todos? 

Amanda: deberían estar en sus casa, no se sabe. 

Emely: (...) 

No tenia nada de que preguntarle, ya que sabia que es lo que iba decir. 

Rodrigo aun sentía esa presencia extraña sobre este lugar, era como si todos se habían ido, pero uno se quedo aun aquí. Era como si lo sintiera muy cerca. 

Al llegar al pueblo, todos se bajaron del auto y cuando llegaron al pueblo, creían que habría alguien por aquí. No había absolutamente nadie, ni siquiera ningún perro o gato o vagabundo por ahí. No había nadie en el pueblo. 

Emely y Rodrigo estaban asustados, Amanda igual lo estaba, nunca habían visto un pueblo abandonado.  

Tomaron sus cosas y fueron a ver en algunas casas si habría alguien adentro el que les puede ayudar. Pero en el camino, nadie permanecía en sus casas, además se estaba oscureciendo, el viaje le gasto mucho tiempo. Amanda tenia la llave de Hernán, la llave era de su casa en donde vivía antes. Fueron a la casa rápidamente, era peligroso estar afuera a estas horas. 

Al llegar a la casa, no le costaron abrirla y entrar con todas las cosas. Vieron que el lugar estaba un poco polvoriento pero aun seguía de buen estado, estaba todo para poder descansar y dormir por un buen tiempo. 

Ya eran las 9:35 pm, los debían ir a dormir. Amanda vio a los niños muy cansados por el viaje. Los dejo en sus camas, ordeno todo sus cosas y ahí estuvieron. Los niños se acostaron y durmieron y Amanda igual, estaba muy cansada y quedo dormida poco tiempo después. 

●●● 

6 horas después 

En las 4:35 de la mañana, se escucho un tremendo ruido por fuera. Era tan fuerte que hizo que Emely se despertara, aun seguía un poco dormida pero al ver a su alrededor, despertó al tiro y vio que su hermano no estaba en la cama, su hermano nunca salía de noche. 

Se levanto de su cama, se puso un chaleco y sus zapatos, y salió de la habitación. Fue directo a la puerta de la casa. Al llegar vio que el comedor estaba un poco desordenado, era como si alguien había entrado a la casa. Fue a la habitación de Amanda y estaba todo revuelto, las sabanas estaban desgarradas, habían partes de la habitación con marcas de rasguños. 

Se estaba asustando, no sabia en donde estaba su madrina y hermano, y además no se que paso aquí cuando estaba dormida.  

Fue a ver por la ventana de afuera de la habitación si había alguien afuera. Camino hasta la ventana y vio otra vez de ello, lo que estaba afuera. 

Cuando veía por ahí, estaba muy oscuro y solo se veía mas o menos las formas de las casas. No había mucho afuera pero de repente vio algo moverse por ahí, había alguien por ahí corriendo, no se veía mucho pero se veía al menos como era. 

Al acercarse mas a la ventana, y de repente apareció una persona al frente de su cara. Se asusto mucho cuando apareció de repente, aunque vio que esa persona tenia mas miedo aun. 

¿?: por favor. Debes ayudarme. 

Emely: -¿que es lo que pasa? 

¿?: por favor. Ya no queda mucho tiempo. 

Ella vio que estaba un poco herido, estaba perdiendo sangre, estaba masacrado, muy golpeado, y con varios rasguños muy profundos en cada parte de la cara. 

Emely: vale. Iré abrir la puerta. 

Entonces corrió hasta la puerta, la abrió rápidamente. Pero cuando la estaba abriendo, veía sangre en el piso, otra vez de la puerta salía, sentía que la persona estaba al otro lado, pero no escuchaba los suspiros, como lo veía suspiraba mucho. 

Abrió la puerta y encontró a la persona ahí pero ya no respiraba. Se cayo rápidamente al suelo, dejando mucha sangre de el tirado en el suelo. Emely tenia mucho miedo de lo que veía. Aunque no estaba solo, vio lo que estaba detrás de el, era el que le atravesó con su mano el pecho del desconocido. Era un monstruo que estaba al frente, ojos como demonio, garras como navajas, mandíbula como una Piraña con grandes dientes filosos. Todo su cuerpo estaba en vuelta en sangre, no tenia piel y se veía todo su carne y sus huesos. 

Al tenerlo al frente, con el miedo hasta el cuello. Esa bestia empezó a atacar, muy rápidamente se lanzo hacia Emely. Pudo evadirlo pero se paro otra vez y con sus garras ataco, varias veces ataco y con uno, le causo a Emely una herida muy grande en el brazo derecho. 

No tenia otra opción que huir de el. Entonces huyo lo mas que podía hacia la puerta de atrás. Corrió y corrió pero esa cosa era mas rápido que ella, destruía todo en su paso para poder matarla, evadía cada ataque que hacia, pero cada vez eran mas rápidos y marcas le hacia. 

Al llegar hacia la puerta. La abrió y salió rápidamente de la casa, al estar afuera, cerro con seguro la puerta dejando a ese monstruo adentro. Creía que lo mantendría por unos minutos ahí adentro. Pero con las garras atravesó la puerta como si fuera papel. 

Empezó a correr otra vez de el. Salió del patio y fue a las otras casas si pudiera buscar ayuda. Pero cuando salió del patio del vecino e ir directo a la puerta y abrirla. Entro y cerro con seguro rápidamente para estar segura dentro. 

Estaba muy cansada y el brazo le dolía mucho. Tenia que encontrar algo para atender la herida. 

Fue a buscar algunas cosas para atenderlo, pero tenia que ver por la ventana si estaba aun rondando esa cosa. Entonces se dirigió a la ventana, miro fijamente por ella y vio algo mas peor que ver a esa cosa. 

Las calles estaban repletas de esas bestias. Había muchos por ahí y no paraban de aparecer. Vio que aun habían gente afuera, pero empezaban a morir rápidamente. Esas cosas empezaron a devorárselas, cada tragaban cada parte del cuerpo incluyendo los huesos. No dejaban nada de ellos, solo algunas gotas de sangre cayendo. 

Al ver todo eso. Emely se sintió muy mal, le empezaba a dolerle la cabeza de pronto, las manos se empezaban a temblar, le llegaba el olor de sangre desde aquí. Había algo de ella que se estaba revelando cuando olía la sangre, le costaba mucho controlar eso, le tomaba como 2 minutos dejar de pensar en eso. 

Al pasar esos minutos. Desde la puerta del frente, empezaron a romperla. No tenia tiempo para volver a escapar, en todas partes estaban ellos, no había salida para ella, en segundos acabaran con ella. 

Tenia bastante miedo y lo peor no le costarán entrar aquí. Empezó a buscar por todas partes pero nada, no había otra salida. En unos segundos esas cosas entraran y terminaran con ella. 

Cuando ya la muerte estaba a punto de entrar por esa puerta. Por fin encontró una salida, encontró una puerta debajo de la mesa. Fue rápidamente hacia ella, aunque al intentar abrirla, estaba atorado y costara mucho sacarlo. 

Intento con todas sus fuerzas en abrir la puerta, pero no se abría. Ya se escuchaba como esa cosas destruían la puerta. Entonces con toda la fuerza que tenia, pudo abrir la puerta y entrar, justo cuando esas cosas entraron. 

Al estar ahí debajo de ellos. Se encontraba como un pasadizo que lo llevaba a una parte del pueblo. Emely no podía quedarse aquí todo el tiempo, esas cosas nunca se irían de aquí. Así que fue por este camino para estar mas alejado de ellos, tal vez encuentre a Amanda y también a su hermano y volver a casa. 

●●● 

Pero desde lo mas lejos del pueblo, en la ciudad, permanecía una persona en el edificio mas grande de la ciudad. Era alto y grande, tenia puesto un chaleco rojo como la sangre. Estaba ahí sonriendo de una manera rara, como de un psicópata. 

¿?: veremos cuando dura ese pueblo. 

Había alguien al lado suyo, era una mujer, era igual que el pero el chaleco de color rosado. 

¿?2: Hyde, ya solo nos quedan dos mas y la llave será nuestra. 

Hyde: -eso esperemos. 

¿?2: señor que sugieres que haga ahora. 

Hyde: divierte por ahí. Has lo que quieras, aun es una bonita noche. 

¿?2: claro mi maestro. 

Entonces fue sin dejar nada, solo su maestro. 

Hyde: sabes. Creíste que nosotros solo somos escoria, nadie nos va aceptar y en poco tiempo será el fin para todos. Y también (mirando al cielo) será tu fin (ja, ja, ja, ja).