Capítulo 16:
Suspiro
STEPHANIE
Todo es mucho más confuso de lo que me había imaginado. Ni siquiera me había percatado de la locura que habían tenido que pasar los Mikaelson. De cierto modo, empiezo a comprender las razones por las que ahora son como son. Es curioso saber que, en algún momento, ellos habrían pensado como yo. No obstante, todo ha cambiado en el mundo y en el tiempo.
—Los padres de los que hoy conocemos como los originales solo vieron una forma de mantener a sus hijos con vida —me explica.
Entiendo eso, no voy a discutirlo, aunque no me gustaría que alguien me salve de ese modo.
—¿Y por qué no se fueron? —Sale de mis labios sin haber pensado.
—Orgullo —suspira—. Su padre, Mikael, no quería seguir huyendo del mundo entero. Quería pelear y ser superior a los lobos. Ser alguien importante.
>>Donde ellos podían morder, los Mikaelson debían morder más fuerte. Donde ellos tenían velocidad, los Mikaelson debían ser más veloces —repite—. Agilidad, fuerza, sentidos. Todo debía ser superado.
Suelto un suspiro de mis adentros al escuchar lo que decía.
Siento un asco recorrer mi cuerpo.
—Pero si Ayana no lo hizo, entonces, ¿quién?
—Esther también era una bruja —me revela—. Ella es la bruja de la familia original… La bruja original, antes que Hope.
—Pero si Esther fue una bruja, ellos...
—Una bruja es una sirvienta de la naturaleza. Un vampiro es una abominación de la naturaleza. Puedes ser uno o el otro, pero nunca ambos —me explica—. Solo existe una trihíbrida y es Hope —dice Josie—. Fue una profesía y se cumplió.
>>Esther hizo esto por los Mikaelson, ella no se convirtió.
—¿Y como se convirtieron ellos? —pregunto.
—Mikael los hizo beber de unas copas de vino con sangre y después los obligó a beber sangre humana para completar con la transición.
—Y al convertirse, Klaus activó su gen de hombre lobo —digo, y Josie asiente—. Elijah me contó lo que pasó.
Ella asiente más de una vez.
—Esther trató de hacer lo correcto al poner la maldición sobre Klaus para mantenerlo oculto —murmura—. Pero la mayor debilidad de Mikael como ser humano fue su orgullo. Como vampiro, eso se amplificó.
>>Le dio un ataque de furia y mató a la mitad del pueblo. Entonces, fue a la casa y la mató.
Me sorprendo al escuchar lo que dice. No puedo creerlo. No esperaba eso.
—¿Mikael mató a Esther? —pregunto alzando ambas cejas.
¿Cómo pudo hacerlo? Era la madre de sus hijos.
—Dijo que ella le había rotó el corazón, entonces, él le rompería el suyo. —Puedo ver el dolor en las chicas—. Se lo arrancó del pecho mientras Klaus miraba. Después, su padre desapareció furioso y el resto de la familia Mikaelson se dispersó. Klaus se quedó para ayudar a Rebekah a enterrar a su madre.
>>Sabía que Rebekah tenía que decirle adiós a su madre.
Cierro mis ojos procesando lo que acaba de decirme. Una parte de mí entiende que Rebekah y Klaus sean personas tan desalmadas sin importarles si lastiman a los demás con tal de conseguir lo que quieren. Han sufrido mucho y por culpa de las personas que debieron cuidarlos. Pero otra parte de mí, no puede olvidar lo que hicieron. Klaus mató a Valentín.
—Desde entonces prometió nunca abandonarlo.
—¿Aunque la haya encerrado por más de noventa años?
—Son vampiros —contesta simple—. Sus emociones son mayores. Rebekah es terca, Elijah es moralista, Klaus no tiene tolerancia con aquellos que lo defraudan. Freya es… —Hace una mueca con sus labios y luego sonríe—. Ella nunca dejó a Hope. Finn es el sacrificador, un mártir. Kol un loco amante del caos, pero un romántico sin fin… —Se ríe—. Todos los Mikaelson sufrieron, por eso son así. Todos están rotos, Step.
>>En más de mil años como familia, todos han cometido ese error, al menos una vez.
—¿Y aún se aman? —pregunto confundida.
—Son hermanos, y son inmortales. —Me mira fijamente—. ¿Deberían pasar una eternidad solos?
Creo que ahora entiendo la necesidad de Kol de clavarse esa estaca antes que ver a sus hermanos bajo el hechizo del que él tuvo la cura.
—Ya has escuchado la historia de ellos, es hora de irte —me ordena Lizzie cambiando repentinamente de humor.
Quiero hacer más preguntas al respecto, pero parece que no podré hacerlas. Por alguna razón, mi amiga me está sacando de su casa.
Pasa a mi lado y sale de la habitación de Hope. La sigo hasta las escaleras y después a la puerta.
Siento un nuedo en mi pecho.
—No sé qué tramas, pero ya no voy a seguirte la corriente. No creo que no vayas a despertar a los Mikaelson ni que encuentres a Hope. ¿Crees que soy estúpida, Step? ¡Nunca vamos a encontrar a Hope y vas a tener que despedirte de ellos!
Mi ceño se frunce al escuchar todo lo que mi amiga me dice, la observo a los ojos y niego más de una vez.
No puedo creer que ella me esté diciendo esto después de tanto.