Thimado!; Detrás del sentido

Capitulo 4: Síntesis de un después

⦗ Ya no da para más ⦘

Pensé. Mis propias palabras rebotando como pelotas en mi cabeza.

Intente abrazarme a mi mismo, pero ya no había nada que agarrar, ni siquiera algo que intentar.

¿Qué es esto? No veo nada... ¿Morir?

Hay un silencio más angustiante de lo que imagine. El dolor se esfumo a la par de alguien más...

⦗ Titi ⦘

Intente murmurar con vaga esperanza. Un eco en respuesta me recordaba ahora mi ''agradable'' soledad.

Igualmente, Titi nunca fue más que un dejo de mis propios problemas... Aunque, realmente lo necesito.

Un fragmento de mi propia alma rota.

Claro... Como un huevo.

Desearía haber podido hacer algo más pero... ¿Ahora tiene sentido cuando ya no existe nada?

De que... De que habrá servido... toda una vida.

Ahh... No soy capaz ni describir mis pensamientos.

Ya no existe ningún proceso mental, y sin embargo... Sigo consciente.

El tiempo avanzaba dentro del margen que yo mismo le daba.

1...2...3...4... No se, en un momento deje de contar.

Y una vez...

⦗ Ahh... ⦘ Balbuceé con un gruñido.

Una luz cegadora me bañaba. Sonido. Algo que una vez creí que no volvería a escuchar.

¿Algo tangible? Quien sabe.

Estoy cerca de llegar a mi limite.

La única esperanza de que mi propia conciencia deje de pensar es esta, un ultimo chance que me brinda el destino para reevaluar mis oportunidades.

Intente ¿Correr? No lo se, la mayor definición que significara avanzar con un cuerpo físico.

Aun quiero tener el privilegio de quedarme despierto solo un poco más y... Para eso no me importa saber que la existencia ahora se ha convertido en un circulo infinito del que nunca escaparé.

Unas manos parecían atraparme cuando llegue a cierto limite y finalmente una nueva figura hacia presencia en lo que ahora era un intento más.

Enormes sombras se posaban frente a mi, una más grande de lo habitual me sostenía, los oídos me zumbaban como si en un avión me encontrase.

La piel parecía desgarrarse y cada pequeño proceso parecía clavarse en mis neuronas como un código que necesitaba saber.

No necesitaba preguntármelo, era obvio. Había reencarnado.

Lejos de ser una emoción parecía ser una tortura. Mi visión distorsionada, mis palabras atrapadas, mi propio ser deseando volver a ese vacío que ahora parecía mas cómodo que admitir que el juego había cambiado.

Ahh...

Parpadeé y sentí como si me hubiera aplastado los ojos.

Me moví y sentí como si se me desgarraran los músculos.

Por puro reflejo llore, un sollozo silencioso, incluso las lagrimas parecían un mar en mis mejillas, era tanto que ni siquiera podía darle el esfuerzo a reaccionar, solo a adaptarme.

Y entonces, esa enorme figura sosteniéndome reanudo mi tiempo a uno agonizante.

¡PAFF! ¡PAFF!

Palmadas que estaban más cerca de matarme de nuevo que calmarme.

COFF ⦘ Tosí, la sensación era tan densa que era casi como si mis pequeños pulmones salieran saltando, aunque... ni siquiera había notado que esta parálisis me había hecho olvidar que ya no respiraba.

Un segundo luego me hiperventile, intentando atrapar todo el aire posible.

Volvía a tierra con mayor firmeza y las sombras finalmente tomaban color, un gran hombre me cargaba... Tal vez de unos 34 años... Era robusto, sus brazos eran tan gruesos como su cuerpo... Cicatrices lo parecían acompañar.

Lo más destacable era la gran sonrisa con la que parecía acosarme, era de esperar de quien para mi resulta ser ahora... Mi padre.

No me dio tiempo ni para recalibrar mi propia realidad y ya me dejaba recargado en los brazos de una niña... que aunque para mi era grande, no aparentaba una edad mayor a los 8 años.

Pero, mirándola mejor, sus ojos cristalinos me cautivaban, era como mirar un pequeño lago brillante y fugaz.

Su aspecto contrastaba con el lugar maltrecho en el que nos sosteníamos, paredes sucias y rasgadas se hacían de notar a la par que el shock inicial de mi propio nacimiento era interrumpido por mi adecuación al ambiente.

Un olor nauseabundo, pero a la vez reconfortante me inundaba, como la oveja que logra sumergirse en las fosas del lobo recordar por patología ese mismo sentimiento.

Ya era tarde para creer que escaparía de aquí. Un lamento vino a mi, pero también un reconocimiento, había algo más especial en esa chica... Si, Ashley, algo que realmente me hizo olvidarlo todo... ¿No?

Ya no importaba, menos cuando sentía que el cerebro me explotaría de lo denso en olor, mis ojos entrecerrados, llorosos e incomodos con claridad.

Las paredes a medio pintar y mal construidas parecían devolverme mi propia angustia sin pena, contrario a eso, la pequeña niña me puso cara a cara, me cargaba con sus manos dejando levitar en el aire.

Casi sentía vértigo, era una sensación distinta y nueva, aunque parecía una mejor vista frente a ella.

Ya no tenia nada que hacer más que reconocer mi nuevo terreno; La niña, cabello castaño, con ondas y una cara tierna y suave. El padre, fortachón, también de cabello castaño, ojos marrones, y..-

WAAAAHHH

Un grito ensordecedor me aturdió mientras divagaba, había dejado de lado algo... ¡Acababa de nacer! Lo que parecía ser los gritos guturales de una mujer postrada en cama y auxiliada por el hombre se mezclaron con los llantos exhaustivos de un bebe que había llegado al mundo de la misma forma que yo, con breves cambios.

Las personas en la sala intercambiaban palabras constantemente sin que yo pudiera entenderlos, no reconocía el acento, y su genética parecía corresponder a una apariencia ingles, aunque de los barrios bajos...

De igual forma me era frustrante, la pocilga en la que parecían vivir esta más cerca de basurero que techo solido y saludable.

Por donde miraba todo se ponía de un peor color; Moho, agujeros, paredes pudriéndose, insectos, una puerta era lo único que resaltaba y lo que ahora se había convertido en mi enigma, resquebrajante y tétrica.



#1750 en Fantasía
#797 en Thriller

En el texto hay: dualidad, existencial, instropeccion

Editado: 31.10.2025

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.