CAPITULO__2 ESCALERAS.
Ya pasó un mes desde que tuve un extraño sueño en el que morí masacrada por un tren. Quizás esté loca, pero juro que la sensación de ser aplastada y arrollada por un tren en movimiento sigue muy palpable en mi cuerpo.
Es extraño; podría jurar que sí morí, pero es algo que no puedo explicar; es tan estresante. Me veo en la necesidad de dejar a un lado mis cavilaciones al escuchar mi nombre.
- "Señorita Xochitl".
- "Sí".
- "Le recomiendo que si esta vez quiere pasar mi componente, ponga atención".
- "Sí, estaba prestando atención".
- "Ah, sí. Entonces sería tan amable de explicarle a la clase lo que entendió del pensamiento de Aristóteles".
- "¿Aristóteles?"
- "Sí, Aristóteles." -- Dice remarcando cada letra del nombre, del pensador del que hablaba ase rato.
- "Bueno, él... él era un gran pensador de Roma."
- "¿Roma?"
- "Sí "- me muerdo los labios con nervios.
- "Bueno, y qué fue lo que entendió del romano".
- "Ah... bueno, es que la filosofía no es algo que me interese". -- Termino de decir y le sonrio con nerviosismo, pero parecer que mi comentario no fue de su agrado.
- "Ja, debería prestar más atención. Quizás esto la ayude a buscar algo de interés o un propósito claro para su despreocupada vida". - Se dirige a su escritorio, toma un pequeño control antes de elevar la mirada y mirarme con dureza. - "Puede sentarse".
Me siento despacio en mi lugar, con la vista de todos mis compañeros sobre mí. El señor Roth presiona el control y le da 'play' al documental que se proyecta en la pizarra, deja el aparato en el escritorio y camina al fondo del aula. Estando ahí y al percatarse de que las miradas aún están sobre mí, él habla.
- "Todos con la vista al frente. Al final les haré preguntas y espero que me responda cosas coherentes".
Eso es suficiente para hacer que todos dirijan sus miradas al documental. No entiendo por qué en la carrera de Medicina tienen que poner el componente de Filosofía. ¿Eso en qué nos ayuda? De haber querido saber de Aristóteles y su tonta filosofía, habría estudiado Filosofía directamente. Esto es una porquería.
Pasé las siguientes horas del componente pensando en el sueño que había tenido. Aún tenía pesadillas constantes del tren aplastando cada parte de mi cuerpo, hasta quedar en totals oscuridad. Es extraño. Papá dice que ese día le envié un mensaje diciéndole que iría a una pijamada con Lara, pero cuando le pregunté a Lara sobre eso, me dijo que le envié un mensaje diciéndole que me dormiría temprano, que no quería salir. Y al día siguiente desperté en mi cama. Mis padres no sabían nada, mis amigas no sabían nada, nadie sabía nada. Me quise plantear la idea de que solo había sido una muy mala pesadilla, pero mi cuerpo no me lo permite. Es como si la evidencia de que sí fue real aún siguiera fresca en él.
- "Oye, ¿me estás escuchando?"
- "¿Qué?"
- "Oye, ¿sigues teniendo esas pesadillas?"
- "Mmm. Perdóname, Lara, no era mi intención."
- "No, tranquila, está bien. Solo te decía que me quedaré con Max, así que puedes irte sola".
- "Ah, sí, está bien."
- "Bueno, ve con cuidado y me avisas cuando llegues a casa."
- "Está bien, no soy una niña."
- "Sabes que no hablo de eso".
- "Está bien, yo te aviso."
- "Okey, deséame suerte, peque". - Me toma de los hombros y me sacude antes de salir corriendo por el pasillo; es un extraño hábito de despedida de ella.
- "¡Mucha suerte, peque!" - Grito con fuerza para que sea capaz de oírme. Esta se detiene y se gira a verme, levanto mi mano derecha en señal de guerra y ella hace lo mismo antes de seguir su camino. Me giro y sigo con el mío.
Son más de las cinco, por lo que el lugar está completamente vacío; no hay nadie en los pasillos. Llego a las escaleras y las empiezo a bajar con calma. Me detengo en el tercer escalón cuando siento mi teléfono vibrar. Lo saco de mi bolsillo.
{ Xotch, ¿dónde estás? }
Veo el mensaje, es de mamá. Está preocupada porque no le avisé que llegaría tarde. Entro a la conversación para responderle, pero inesperadamente mi celular sale volando, y al segundo siguiente me encontraba cayendo por las escaleras.
Lo último que recuerdo haber visto fue alguien encapuchado desapareciendo por el pasillo.
Mi cabeza golpeó en algo. El dolor fue intenso, de pronto se me revolvió el estómago, cuando intente levantar todo a mi alrededor se empezó mover, lucho por no cerrar mis ojos pero el dolor en mi cabeza y mi cuerpo entero me lo complican todo. En un momento deje de sentir dolor, ya nada se movía, entonces todo se volvió oscuro, como la última vez.
Esa fué la segunda vez que morí.