Thriller_dearhs

PARTY

CAPÍTULO 3: FIESTA.

Volvió a pasar, pero esta vez estoy totalmente segura de que no fue un sueño. Las cosas todavía no son cien por cien claras, pero estoy segura de que no fue solo una pesadilla de mal gusto.

​Mamá me interrogó ese día, cuando desperté nuevamente en mi cama.

​— "Xotch, ¿me podrías decir por qué no nos avisaste que llegarías tarde?" -- Me había empezado a interrogar apenas entre en la cocina.

​— "Sabes lo preocupados que estábamos tu padre y yo".

​— "Perdónenme, no fue mi intención preocuparlos de esa manera".

​— "Perdón. Eso no quita lo que nos hiciste sentir. Sé que eres mayor de edad, pero no puedes hacernos eso".

​— "Perdón, mamá. De veras que lo siento."

​— "¿A qué hora llegaste ayer?" — Todo el espacio se sumió en un incómodo silencio. No sabía cómo responderle. Ni siquiera terminaba de asimilar el hecho de haber sido empujada por las escaleras y luego despertar en mi habitación. Incluso para mí es una idea descabellada, no le puedo decir eso.

​— "No lo recuerdo."

​— "Estás castigada. Después de clases, vendrás directo a casa, hasta que tu padre y yo estemos completamente seguros de que aprendas la lección de avisar cuando vayas a llegar tarde."

​Pasé las últimas tres semanas encerrada en la monotonía de la casa a la universidad y de la universidad a la casa, pero al menos mi buen comportamiento hizo que me levantaran el castigo.

​Esas tres semanas traté de descubrir quién era el enmascarado que me aventó: una figura alta, diría que corpulenta, vestida toda de negro. No pude ver su rostro, ya que lo tapaba la pared.

​— "¡Ey! Tierra llamando a Marte." — Su voz y la mano que pasa por mi rostro hacen que salga de mis pensamientos.

​— "¿Qué? ¿Decías algo?"

​— ", te decía que como tus padres ya te levantaron el castigo, podríamos ir a la fiesta que Max hará en su casa, ¿qué dices?"

​— "Ummm, una fiesta... no estoy segura." -- Niego con la cabeza.

​— "¡Vamos, peque! Necesitas distraerte, estás muy malhumorada y apagada. Diría que el castigo te hizo daño, pero sé que estás así por las pesadillas, así que por favor, ¡vamos! ¡Distráete un poco!"

​Quedamos en silencio. Miro a mis amigas en busca de ayuda, pero todas esquivan mi mirada. Llego a Lara y esta me mira con una gran sonrisa, me levanta las cejas a forma de pregunta, pero no recibe respuesta de mi parte, por lo que me toma de los hombros y me empieza a sacudir. Oh, no. Esto solo puede significar que no me dejará en paz hasta que le diga lo que quiere escuchar.

​— "¡Vamos, peque, peque, peque, por favor di que sí, por favor, por favor, peque, peque!" — Esta sigue insistiendo. Puedo sentir las arcadas asomándose a mi garganta. No voy a aguantar más si me sigue batiendo de un lado a otro.

​— "Lara, Lara, sí voy a ir, pero para o juro que voy a tirar mi almuerzo sobre tu vestido favorito." — Esas palabras activan el interruptor de distanciamiento en ella. Cierro mis ojos y sobo mi estómago para que se vayan. Doy respiraciones lentas y cuando me siento mejor, abro los ojos.

​— "¿Ya estás bien?" — Puedo ver su preocupación en su rostro. Asiento para que se pueda tranquilizar. Da un suspiro de alivio y aplaude como una niña pequeña. — "¡Qué bueno! Perdón por sacudirte de más."

​— "No te preocupes." — Termino de decir y las alarmas de nuestros celulares suenan indicando que tenemos que volver a clases. Nos ponemos de pie y caminamos todas juntas hasta llegar a nuestras aulas.

​Luego de tres horas de anatomía y dos de Medicina básica por fin salimos de ese martirio. En estos momentos nos encontramos caminando por los pasillos Lara, Ana, Marian y yo. Estamos a nada de llegar a las escaleras. Admito que estuve muy sicoseada las últimas dos semanas. No podía ni ver las escaleras porque me paralizaba o me empezaba a doler la cabeza, pero las chicas han sido de mucha ayuda. Aún les tengo mucho pavor, pero al menos las puedo subir y bajar sin mayores problemas.

​Salimos de la universidad y caminamos hasta llegar a la calle. Ahí nos detenemos para despedirnos de Marian y Ana. Ellas van en sentido contrario al nuestro. Al perderlas de vista, empezamos a caminar hasta llegar a una intersección donde Lara y yo nos toca separarnos.

​— "Pasaré por ti a las siete, así que más te vale estar lista". — Me apunta con su dedo, como si me estuviera acusando de algún crimen.

​— "Está bien". — Nos abrazamos antes de que ella tome su camino. Por mi parte, ccamino por un extenso callejon asta llegar a mi hogar, dulce hogar. Al entrar me encuentro con mis padres en el sofá de la sala viendo una película. — "Ya llegué." — Apartan la vista del televisor para verme y sonreírme.

​— "Oh, buenas tardes, amor." — Me adentro en la sala y me siento junto a ellos. Les tengo que pedir permiso o podría recibir otro castigo por preocuparlos de más.

​— "Ma', pa', ¿me dan permiso de ir a una fiesta con Lara y las chicas?" — Mis padres me miran con sorpresa y luego se miran entre ellos. Pareciera que se pueden comunicar telepáticamente.



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En el texto hay: thriller, death's, greenblack4

Editado: 02.10.2025

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