—¿Quienes es la cosita mas hermosa y destructiva del mundo?— Pregunto Celendis, como si esa rata pudiera responder —¡¡¡Tuuu!!!— Se respondió a si misma con su emoción tocando las nubes mientras meneaba su nariz en la panza de ese animal.
El amanecer había transcurrido con normalidad y un poco mas rapido de lo que me hubiera gustado. Con el sol a treinta grados del este, el bosque lucia un tono verde claro muy llamativo, la temperatura estaba un poco baja y el cantar de las aves anunciaban una tormenta desde el oeste, donde una cadena de nubes grises y blancas se mezclaban.
La tranquilidad del ambiente fue pertubada por los pasos apresurados de Arthas, tenia las manos ocupadas con dos huevos del mítico salamander; una especie de pavo real con tres cabezas y plumas doradas.
—¡Ahora!— Grito el caballero de la muerte y Kratos dejo su invisibilidad a un lado, extendió una mano y un portal apareció a las espaldas de Arthas, la criatura cayo en su trampa, siendo transportado a su nido mientras nos quedábamos con sus hijos.
—¿Que sigue en la lista Yas?— Pregunto Kratos, acercándose al gran caldero que hervía agua y algunas verduras.
—Genial, ahora solo falta el veneno de una nebula para darle un sabor picante.— Respondió Yaslady, que llevaba un delantal blanco y un cuchillo corto.
—Bien, ya escuchaste matador, vamos por una lagartija.— Ordeno el sub capitán mientras su compañero lo seguia arregañadiente.
—Lady Yas...— Hablo Drago, que llegaba junto Dumtruck con un montón de llena en sus espaldas —Ya Trajimos lo que nos pidió.—
—Gracias chicos, con eso sera suficiente.— Señalo hacia un lado y los muchachos descargaron todo donde apuntaba.
—Bio Forget.— Invoque con las manos en frente de las armaduras, y una luz dorada brillo en cada una de ellas. Segundos después, el metal negro desprendio chispas y relámpagos por tanto poder mágico que recorría en su interior —Con eso bastara.— Di media vuelta y mire hacia el cielo. —¿Como van los preparativos?— Pregunte a Falcon que flotaba en la típica pose que suelen usar para meditar.
—¡Ya casi terminamos mi lord!—
Respondió Viper que se encontraba al lado de Falcon, ni bien paso un segundo y un enorme domo color verde encerró a la ciudad, de inmediato un viento huracanado cubrió el ambiente; indicando que el señor de los vientos estaba haciendo su trabajo.
Cuando la débil tormenta desapareció, el domo verde se volvió transparente, y ambos guerreros descendieron lentamente hacia el suelo.
—Todos ¡Reúnance!— Apenas di la orden y todos me rodearon
—Hazlo Viper.— El gran mago asintió y extendió ambas manos hacia los lados, soltando un brillo verde que se transformaba en un holograma, replicando el mapa de la ciudad que seria nuestro objetivo.
—Empecemos.— Todos se acercaron un paco mas para estudiar bien el mapa.
—La ciudad esta rodeada por una muralla de unos diecisiete metros de alto y cuarto kilometro de ancho, no sera un problema atravesarlo. El problema sera mantenerse en posición una vez adentro.— Explico Viper.
—Nos caerán como en feria.— Añadió Kratos, frotándose la barbilla.
—Exacto, lo que yo sugiero es tomar las cuatro torres principales. Tomar por la fuerza la torre de mando ubicado en sur, sellar el escape subterráneo del norte, golpear su ejercito ubicado en la salida oeste y darle con todo desde la entrada este.— Señalo los objetivos Viper, invitando a los demás.
—Yo y Arthas cojeremos la torre sur, estoy seguro que con mi fuerza fruta y los juguetes de este cabronazo ¡ja! Caerán a hostias. — Dijo Dumtruck, llevando su enorme hacha al hombro.
—Nosotras nos encargaremos de los tubos de escape, ya que mmm... es mas que obvio que la guardia real escoltara a sus lideres por esos lugares.— Participo Celendis mientras la otra estaba tratando de quitarse de encima aquella rata que tenían como mascota.
—Bien, eso me deja a mi en la salida oeste lo cual, sera un problema invocar y a la vez pelear contra todo su ejercito...—
Se quejo Viper pero antes de que siga, la mano de Falcon se poso sobre su hombro.
—Tu no preocuparte por ello, camarada.— Intervino el anciano —Mi espada y los del negro te cubrirán la espalda.— Concluyo al señalar a Drago.
—Eh... okey pero ¿y ese tono alemán?— Señalo el elfo.
—Ah, son los efectos del cruce de hechizos, no le prestes mucha atención.— Explico, mirando hacia los demás.
—Bien señoritas, yo me encargaré de la entrada y Kratos...— El guerrero se puso firme tras la mención —Tu te divertirás en el centro. Recuerden, si están en desventaja o necesitan ayuda no duden en pedirmelo, permaneceré oculto hasta que el o los campeones de este reino aparezcan.— El holograma se dividió en cuatro tras marchar hacia adelante.
—Recuerden ¡Sin rehenes!— Empezo nuestro grito de guerra.
—¡SIN PIEDAD!— Rujieron en coro.
—¡No se contengan!—
—¡HASTA VOLVERLOS CENIZAS!—
—¡Si cae uno!—
—¡CAEMOS TODOS!—
—¡Si hoy vencemos!—
—¡INMORTALES SEREMOS!—
—¡Hoy venceremos!—
—¡LEYENDAS SEREMOS!—
—¿¡Quienes somos!?—
—¡INFERNALES ETERNOS!—
—¡Tengo hambre!— Siguió Viper.
—¡JUSTIFIQUE SU ALMUERZO!— Respondieron todos.
—¡Me pica un huevo!— Protesto Arthas.
—¡RASQUESE LUEGO!— Todo quedo entre risas y burlas, después de todo, aun era muy temprano como para dar paso a nuestro gran asalto.
Editado: 15.12.2021