Capitulo 1

Durante la existencia del ser humano se han contado todo tipo de historias míticas que a través de los años nos ayudaron a crear nuestra propia historia y aun que muchas de esas historias se perdieron con el tiempo hay otras de las que aún se hablan, que aún se cuentan a la luz de la luna, esos que cuestionan la realidad que se esconde cuando estamos en tinieblas.  
Nací en una familia de estrato medio con una madre capaz de hacer cualquier cosa por los suyos y mi padre era un hombre gentil y adorable, soy VICTORIA CONNOR y crecí en BROKLYN MISISIPI cerca del bosque nacional de SOTO, tal vez por eso me gustaba mucho ver por la ventana como llegaba la noche ver la luna brillando en la penumbra era la cosa más  hermosa del mundo me podía quedar horas mirándola ver el contraste que hacía con los arboles sumado con la armonía y ese mágico silencio. Crecí escuchando relatos de ese maravilloso lugar algunos hablaban de fantasmas que se habían quedado atrapados por la historia, tesoros escondidos por los antiguos nativos pero de todos ellos había uno que lograba llamar mi atención que lograba hacerme dudar y cuestionarme sobre la realidad que creemos conocer.  
Los más ancianos hablaban de que en lo más profundo habitaba una misteriosa gente a la que llamaban LYCANTROPOS o HOMBRE LOBO  seres que con la luna cambiaban su físico a lobos de tamaño descomunal decían que con el tiempo habían desaparecido pero había quienes aseguraban verlos en las noches y en algunas ocasiones a plena luz del día, el relato sonaba muy loco pero algo debía de tener de cierto y no estaba muy lejos de comprobarlo. 
Cuando llego mi cumpleaños número catorce mis padres lo quisieron celebrar con una caminata a lo profundo del bosque SOTO según el plan de mi madre era acampar y disfrutar del día en familia, para ser sincera no tenía muchos amigos ellos sabían eso por lo que en nuestras fiestas éramos solo nosotros tres, acampamos cerca de uno de los ríos que nacían en el interior del bosque, mama me regalo un collar con una hermosa luna ella sabía cuánto me fascinaba ese astro sobre las cinco empezamos nuestro viaje de regreso, el sendero era un poco estrecho y rocoso en el trayecto logre escuchar a lo lejos lo que para mí era un aullido fue tan agudo que hizo que la piel se me erizara, detuve mi caminar pero mi padre apresuro el paso mi madre lo seguía yo apenas podía seguirlos y como si eso no fuera suficiente empezó a llover lo que hacía que la marcha se hiciera más difícil. 
Habíamos avanzado muy poco el sendero estaba muy resbaloso, en ese justo momento mi torpeza hizo lo suyo pise en falso haciéndome rodar sendero abajo mis padre comenzaron a gritar desesperados pero cuando pensé que la situación no podía empeorar caí al rio, mi agonía era aún más alta mi frustración y mi temor se fusionaron, no era  muy buena nadadora así que mis intentos por mantenerme a flote eran inútiles, mientras me alejaba veía como mis padres intentaban seguirme por la orilla del rio pero su avanzar era lento por las rocas, caí por una pequeña cascada al llegar a lo profundo del rio quede suspendida en sus aguas más profundas, abrazada por el agua inerte sin poder moverme en un silencio muy profundo, no escuchaba más que mi propio latido a punto de apagarse, veía la luz en la superficie pero no tenía la fuerza suficiente para llegar a ella y en ese momento cuando el aire se me estaba acabando escuche el splash de alguien o algo entrando al agua por un momento pensé en mi padre pero cuando vi su silueta saliendo de la oscuridad el aire se me escapo más rápido de lo esperado, se asomó un osco de lobo y unos ojos que me observaban fijamente, una mirada penetrante que de alguna manera no me hicieron temer y como mi cuerpo ya no tenía más aire recuerdo muy poco lo que paso después solo pequeños pedazos de una película donde ese enorme cuerpo me empujaba hacia la superficie, donde volvía a sentir el aire golpear mi cara y entraba nuevamente en mi cuerpo, caí boca arriba sobre el suelo cansada abrumada angustiada sobre lo que acababa de pasar pensé que era una alucinación causada por los golpes y la falta de oxígeno pero pronto esa teoría de vino abajo, sentí junto a mí su enorme presencia con mi agotada mirada observe a quien de alguna manera me acababa de salvar, aun así no sabía si estaba a punto de convertirme en si nueva presa, en su víctima, note que aún me observaba detenidamente, con cierto interés era una mirada calculadora muy intensa, levante mi mano para intentar tocarlo, me di cuenta que me había cortado la mano, un corte que atravesaba la palma de la mano de lado a lado, la criatura también había notado eso me detuve un momento a revisar mi mano escuche a lo lejos a mis padres llamarme con desespero  
• VICTORIA  
• VICTORIA hija  
Mis padres habían logrado llegar hasta ese lugar, mientras los buscaba con mi mirada, la criatura puso su pata sobre una roca afilada haciéndose un  corte parecido al mío, con voz baja empecé a llamarlos baje la mano para intentar girar y lograr levantarme pero de un solo golpe puso su pata herida sobre mi mano, sentí como su sangre caliente corría por mi herida y al mismo tiempo acerco su asico como tomando mi aroma, escuche sus voces más cerca la criatura echo un vistazo del mismo modo como entro al agua para sacarme así mismo salió corriendo. Al ver que ya estaba sola con las pocas fuerzas que tenía levante mi mano y empecé a llamarlos de golpe ya estaban sobre mí 
• ¿Hija están bien?- decía mi padre- ¿Te duele algo? 
• Si estoy bien- mi voz se entrecorto un poco- solo llévame a casa 
• Estas herida- pero de mi boca no salía ninguna palabra 
Mi madre afanada me revisaba tocado mis brazos y piernas tratando de encontrar algún rasguño no tardó mucho en encontrar la que me había hecho en mi mano, mi padre me cargo en su espalda hasta llegar a casa donde nuestro médico de cabecera me reviso y vendo mi mano. 
Tarde unas semanas en volver a tomar el rumbo habitual de mi vida, en cuanto a ese hecho no le encontraba lógica, una parte de mi sentía que había sido causada por el trauma pero por otro lado pensaba en que haba sido real, recordaba su cuerpo sacándome a la superficie, su mirada intensa y su pata sobre mi mano, termine por convérseme que ese hecho no debía ser contado que era mejor omitir esa parte de la historia. Si era real o ficticia el tiempo y la vida misma se encargarían de demostrármelo. 
Nuestra vida continúo en MISISIPI pero pasados cuatro meses mis padres decidieron que nos mudaríamos a NEBRASKA alejarme de lo que consideraba mi hogar de la tranquilidad el misterio que poseía el bosque, a partir de ese momento mi tranquila vida dejaría de serlo. 
Los primeros meses en este nuevo ambiente fueron muy difíciles pero como todo, el tiempo se encargó de hacernos encajar, lamentablemente me gustaría decir que todo volvía a ser como antes pero no fue así, dos años más tarde mi madre fue diagnosticada con leucemia que apago su hermosa sonrisa un año y medio más tarde justo después de mi graduación. Tenía mis dudas sobre si iniciar la universidad o quedarme en casa con mi padre quien aún sentía la ausencia de mi madre y quien se había refugiado en el alcohol para pasar su duelo. 
Mi vida no era la misma sentía que se había destruido después de ese accidente mi madre ya no estaba y mi padre también se estaba apagando, evitando ver mi realidad inicie mis estudios universitarios en WESLEGAN NEBRASKA pero mi carácter y mi forma de pensar no eran los mismos, era fría , calculadora y en algunas ocasiones muy hiriente para muchas personas era poco agradable algunos me decían que era como una roca, a eso había que sumarle que a mi parecer era muy poco agraciada  era una chica de uno 1.67 cabellera castaña que me llegaba hasta la mitad de espalda aunque siempre lo mantenía sujetado con coletas altas había heredado los ojos cafés de mi madre, mis pestañas eran largas y abundantes todo eso hacia juego con mi piel blanca tenia buen busto y piernas pero nada de eso lo dejaba ver mucho siempre usaba jeans y camisas holgadas ser femenina no era mi prioridad y aún más en una carrera como la ciencia forense no era muy común ver a una mujer en este ambiente evitaba al máximo que mi figura llamara la atención no me gustaba ser el centro de aten por lo que fueron muy pocos los amigos que me acompañaron durante mi carrera, pocos que supieron valorar mi esfuerzo. 
Me gradué a los veinticuatro años pero mi padre no me pudo acompañar, falleció 1 año antes de que yo recibiera mi título, gracias a mi esfuerzo y buenas calificaciones estuve 1 año más trabajando con la policía de NEBRASKA, mi jefe ARON me acompañaba él  era mi guía para pulir mis técnicas, me daba la moral suficiente para seguir en medio de tantas lobos, lo que me recordaba que mi cicatriz seguía hay nunca se borró. 
• VICTORIA- grito ARON.
• Si jefe- caminaba por uno de los pasillos de estación de policía. 
• Te tengo una propuesta que te va a encantar.
• Si habrá que escucharla- escuche una carcajada.
• Te necesitan en MISISIPI  has trabajado aquí por mucho tiempo es hora e salgas de este lugar  y te pongas a prueba, tu impecable trabajo te ha hecho acreedora de que te envíe haya- esa si era una buena propuesta.  
• ¿Pero qué pasa?-me causaba mucha intriga el por qué me enviaba a mí-  si soy una novata.
• Yo diría que no, hace meses que trabajas sola no deberías desaprovechar esta oportunidad, vamos te invito a almorzar, de paso te platico de que se trata- huy comida.
Ya en el almuerzo ARON me conto que el personal de policía tenía una serie de asesinatos que no lograban explicar. 
• Están entre un animal y una secta las víctimas son encontradas con el cuello totalmente desgarrado  los forenses locales no han podido identificar al animal o en el peor de los casos a los responsables- lo último lo dijo levantando la mano y tratando de imitar a una especie de zombi de bajo presupuesto  no pude contener la risa.
• ¿El cuello?- eso me llamaba la atención era normal que un animal atacara esa parte pero si no habían podido concluir con la investigación era porque tal vez había algo más de fondo. 
• Si, la policía no logra identificar lo que es en realidad, me pidieron que les enviara a alguien que los pudiera ayudar y pensé en ti, ¿qué dices?-tenia mis dudas era algo muy extraño pero un algo dentro de mí me incito a aceptar no tenía nada que perder, estas colaboraciones ampliarían mi experiencia y mis créditos.  
• Si la verdad me intriga saber qué es lo que está pasando.
• ¿Genial partes en dos días te perece?- eso me tomo por sorpresa.
• Si, para mi está bien. 
Terminamos de almorzar y me dirigí a mi trabajo, antes de finalizar el día ya había iniciado los preparativos del viaje, tenía una lista de lo que tenía que dejar antes de marcharme y lo que tenía que arreglar al llegar, donde vivía no era muy grande desde la muerte de mis padres había empezado a reducir el espacio en la casa y tenía solo lo necesario para mi existencia, empecé empacando lo que llevaría conmigo y lo que no era necesario lo donaría o vendería, entrada la noche deje caer mi cuerpo sobre el sofá mientras bebía una copa de vino y empecé a recordar lo que ARON me había dicho sobre los asesinatos y me parecía muy extraño. 
Empecé investigando sobre si se habían presentado estos casos antes, si había registro de ataques de animales en la zona o si algún animal había escapado de algún zoológico cercano pero no encontré nada lo que me causo más intriga sobre el caso, cerca de las diez estaba por irme a dormir cuando tocaron la puerta, abrí y era EMMA una de mis pocas amistades ella en pocos días viajaría a NEW YORK  a diferencia mía ella era titulada en administración de empresas, su padre el señor ROBERT MILLEMI le había ofrecido un puesto en una de sus empresas como auxiliar, EMMA venia de una familia adinerada pero aun así no le gustaba utilizar su apellido a ella le gustaba ganarse las cosas con su propio esfuerzo  su padre también me había expresado que quería que viaja a esa gran ciudad con su hija a pesar de no ser de su familia me trataba como si fuera su hija aun no sabía si viajaría con ella o si tomaría otro rumbo este viaje también me para tomar una decisión sobre mi futo 
• ¿Así que te vas?- me lo dijo mientras asa pucheros como si fuera una niña pequeña.
• Si es una oportunidad de poner en práctica todo lo que he aprendido- me hice a un lado para dejarla pasar.
• Si como sea me vas a abandonar.
Solté una sonora carcajada, mientras ella pavoneaba su pequeño tarsero por el pasillo de mi departamento, ella tenía un cabello largo hasta la cintura rubio y ondulado, era más bajita que yo media 1,54 lo que no le impedía ponerse estiletos para verse más esbelta tenía los ojos verdes y a diferencia de mi era la mujer más delicada fémina que conocía siempre vestía de faldas de tubo con blusas a juego con bléiser o con vestidos ajustados.  
• No exageres tómalo como unas pequeñas vacaciones si me llegas a extrañas mucho puedes ir a visitarme- eso sería suficiente para que olvidara su berrinche.   
• Viéndolo por ese lado si es buena excusa 
Levanto la mano en señal de aprobación y yo levante la mía para seguir su juego, pero ella no pudo evitar ver mi palma de la mano de repente caí en cuenta que era en la que tenía la cicatriz he inmediatamente la cerré y la baje. 
• Nunca te había visto esa marca- esa historia nunca se la había contado.  
• No es nada solo un recuerdo de mi niñez y de cuando solía ser torpe- deje salir una sonrisa para evitar que EMMA se diera cuenta.
• Tu torpe eso no me lo habías contado- eso era algo que a pesar del tiempo no había podido mejorar. 
• ¿No?- ella más que nadie había sido testigo de las múltiples veces en la que esa habilidad innata para meterme en aprietos cono el día cuanto hicimos parte de la competencia de relevos en la escuela, me tropecé con la mascota del grupo de futbol para luego aterrizar sobre la capitana de las porristas, la podre estuvo fuera de las exhibiciones por unas semanas -pues no hay mucho que contar caí por un sendero y luego al rio con una de las rocas me lastime, nunca sano como debía – ella me miro algo incrédula.
• Mmm ok- por eso era mi mejor amiga entendía cuando no me gustaba hablar de algo.  
Se quedó ayudándome con la mudanza recordé lo mucho que me agradaba su compañía y como ella siendo tan alegre y divertida tenía una amiga como yo éramos polos opuestos. Al siguiente día me dedique a dejar todo en orden en  la estación, a poner a ARON al tanto de los pendientes a enviar mis cosas, vender y obsequiar las otras, a despedirme de mis pocos amigos. 
Por alguna extraña razón sentía que debía ir, volver, sentía como si tuviera algo pendiente en aquel lugar como si algo o alguien me llamara tenía un presentimiento de que las cosa son volverían a ser igual.