Mirada acerba, a seis grado de tu boca.
Se estremece el vacío en el silencio angosto.
Cúmulo de nubes grises y centellas de tronadas.
El cuerpo palpita, mi corazón late;
pero mis labios nunca tocan tu boca.
En el acervo cultural del museo sin colores.
Vivaz el vestido, coqueta tu falda.
Lindo follaje, dulce el aroma en las flores.
Vinca major, la hierba doncella florece,
en un cuadro pintado de planta perenne
y citronela como hoja de limón con perfume Melissa.
Roce su falda roja ocre al verde limón,
a centímetro del cielo de su boca.
Mirada infinita, desabrida mi boca
y mi alma tan efímera te toca.
Leve la lluvia y se apagan las luces,
y el viento de sus manos casi me rasga la boca.
Géiser de sangre, parpadea mi pecho,
tambalea mi boca.
Arropo su cuerpo, grita molesta y se marcha.