Titanes-La destrucción de un Imperio.

Capítulo 41- Planes

Cala alzó una indestructible barrera invisible de sombras, recubierta por los dones de Noah.

-¿Realmente es necesario todo esto?-Le preguntó Coraly a la joven.

- Te aseguró que sí. 

Habían pasado algunos días de los hechos ocurridos y la noticia alcanzó más allá de las fronteras, dioses, ninfas y demás seres conocieron el desafío ocurrido en el Olimpo, la osadía que Horiamy llevó acabó poniendo a prueba la seguridad del Padre y dejárle una cicatriz que aún no desaparecia de su mejilla, la presentación de la nueva Reina del Mar sumado a la muerte de la Gran Palas a manos del propio Zeus, las acusaciones corriendo sobre él y lo más importante el conocimiento de una nueva mata dioses. No existía un ser que no lo conociera y el temor más grande era las represalias que el altivo pudiera tomar, esta vez no había declarado luto sólo permanecío confinado en el interior de su Palacio y según muchos planeando el contra ataque.

Nehuem trajo el equipo de combate invitando a Noah con una mirada volver a enfrentarse, su amigo no lo dudó apesar de los dias oscuros había logrado recuperase un poco en el contacto con sus hermanas y el querido Nehuem.

Ambos se posicionaron dispuestos a enfrentarse, Cala pasó entre los dos viendo su semblante sereno y algo alegre, poniéndose contenta por ellos.

-Disfrutenlo muchachos, iré a dentro con ellas. La joven cruzó palmeando con amabilidad el hombro del cruzado llamándo la atención de Noah.

-Vaya, parece que el "cachorro" quedó atrás. Se rió, pero Nehuem sólo curvo las cejas con gracia.

-Hemos mejorado bastante, pero no tanto, igualmente ya me he acostumbrado.

- Si tú lo dices. Ambos iniciaron practicando nuevamente ese maravilloso arte desconectandose de los problemas aunque fuese un instante.

Liria entró en el cuarto viéndola acostada con la vista clavada en el techo, después de tantos días había logrado dejar de llorar y recuperar un poco de su temple habitual, se subió a su cama y se acostó junto a ella apoyando la barbilla sobre su hombro sin decir una sola palabra. Trayendola de vuelta a la realidad, Horiamy enredó los dedos al collar anhelando sus recuerdos. 

Cala llegó viéndola a las dos juntas ofuscandose de no haber sido invitada.

-Claro, yo soy la última verdad. De dos pasos rodeó la cama y se acurruco al otro lado de Horiamy mostrándose cálida como nunca antes, sus ojos rodaron al adorno quedándose en silencio. Liria vio con dulzura aquel símbolo compartido entre ambos preguntándole:

-Era muy bonito su amor ¿Verdad?-Cala la observó con regaño pero aquella pregunta logró darle una sonrisa después de tanto a su amiga.

- Sí. Liria puso mirada de niña diciendo con alegría.

-Pudiste ver su historia ¿Cómo era? 

-¡Liria! 

-¿Qué? Apesar de todo Horiamy tuvo la posibilidad de ver su historia...a mi me hubiera encantado poder ver la historia de mis padres, sólo tengo lo que mi padre me contó. Cala se cubrió la cara con la mano intentando esconder su fastidió pero su hermana respondió tranquilamente.

-Fue muy bonita Liria, ambos se querían mucho, mi madre estaba dispuesta a todo por él, lo veía de una forma tan única e incomparable como sino existiera nada más en el mundo. La muchacha suspiró dejando su mejilla pegada a ella.

-¡Qué romántico! Debe ser hermoso sentirse así por una persona. 

La Diosa oscura rememoró el mar de recuerdos en su interior.

-Hermoso y muy doloroso.

-¿Por qué amar implica dolor?-Le preguntó algo dudosa Liria a ambas.

- Es como una parte que no puedes dividir, el amor nace con una parte de dolor que un día terminar exigiendo a la otra, ya sea por diversos motivos, siempre logra aparecer. Ella se rió.

- Pero aún así el mundo sigue apostando por él, ya que no existe sensación más maravillosa en todo el universo.

Horiamy acento sus palabras imaginando la alegría que ambos tendrían al reencontrarse, iluminando su mirada de aquella maravillosa sensación.

La heredera del Mar alzó la vista a Horiamy viéndola con complicidad.

-Sabes una cosa Cala trajo Mamon, le convido a Nehuem antes que a mí y él ¡casi se lo come todo! 

-¡Ambos se comieron todo! ¡Serán dos sapos gordos de tanto comer! Noah y yo apenas pudimos comer uno cada uno. La joven entre ambos se rió viendo aquella discusión.

-¡Yo no fui! ¡Fue Nehuem!¡Él tiene el estómago más grande se comió tres!

-¡También de comiste tres! tenías la cara sucia de tanto comer. Liria se rió entre dientes ruborizando aquel detalle que se negaba a aceptar. 

-¿Cómo estás tan segura que fueron tres? ¿Ni yo siquiera podría confirmar que fueron tres?-Cala abrió la boca con sorpresa, indignada.

- ¡Yo te vi! ¡Pequeña tragona a mi no me vas a engañar! ¡Qué no te engañe con esa cara Horiamy! ¡Por su culpa y la de Nehuem no quedó!- Sus voces aún discutiendo eran lo más bello que podía haber, logrando sacarla de sus propios pesares.

-¡Ya las dos! ¿Qué tal si Liria me compensa acompañandome a la cascada a bañarme? Y Cala estoy segura que un día en la cascada  te vendría fabuloso.

-Bueno si lo dices así.

-Si, si ¡Por favor! Hace mucho no salimos a ningún lugar, nos debemos un momento de respiró. 

-Bien, entonces creo que deberíamos preparar ropa limpia.

En el jardín la batalla por fín había terminado, Nehuem quedó agotado sobre el borde de la fuente viendo con gran gozó al joven a su lado, respirando igualmente agitado.

-Sabes una cosa, si no tuvieras esa barba espinada, juró que te basaría. Noah se rió respondiendo alegremente:

-Vaya, no te conocía esos gustos amigo mío.

-Realmente extrañé entrenar contigo.

- Lo mismo digo Nehuem. La figura esbelta de Cala salió aireosa de adentró con una gran sonrisa dibujada entre sus labios. Rodó la vista hasta verlos tirados a un lado luchando por respirar.

-Grandes guerreros sólo surgen una vez cada milenio ¿No es verdad? - Noah alzó la vista notando la clara ironía.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.