Titulares Del Corazón

Capítulo 18

Chloe

El pánico me había forzado a una puntualidad que no había tenido en meses. Eran las seis y treinta de la mañana del día lunes, y el campus del Highland High estaba envuelto en la bruma fría de un lunes. Quería desaparecer. Quería refugiarme en el único lugar donde sentía que podía tener el control: en el fin del mundo. Porque vamos a estar claros, nadie en su sano juicio después de ese escandalo quería volver al colegio.

Al deslizar la puerta del periódico, me detuve en seco. La luz estaba encendida y el aire vibraba con una energía nerviosa. La oficina, que a esa hora debía estar desierta, parecía un centro de operaciones de crisis. Maya, Hana y todos los miembros del equipo estaban sentados frente a los monitores, rodeados de vasos de café vacío, maquetando con una urgencia que no era normal.

Mi llegada fue recibida con un silencio abrupto. Todos evitaron mi mirada, excepto Vale.

Vale fue la primera en levantarse. Se acercó a mí con el rostro marcado por la falta de sueño y, para mi sorpresa, con una expresión de genuino arrepentimiento.

—Chloe. Gracias a Dios que estás aquí. Lo siento. De verdad, lo siento —murmuró, sujetando mi brazo. Su aliento olía a café—. No debí haberte empujado tanto a beber. Fue una idiotez.

Acepté su disculpa con una inclinación de cabeza. El arrepentimiento de Vale era real. El mismo que tenía hace días cuando la puerta de la trastienda si, esa la que daba al callejón lateral, la que siempre estaba bajo llave se abrió lentamente, haciendo un sonido de bisagra chirriante que resonó en el lugar, detrás de la puerta estaba Vale. Recuerdo que entro como pedro por su casa, entonces Ethan y yo pensábamos que era una conspiración para matarnos o algo así… la mujer era Vale

La razón la entendimos después.

El motivo era claro: La noche anterior, el Profesor Harrison le había encargado a Vale recuperar de la trastienda unas cajas de papel especial para la impresión de emergencia del periódico para hoy lunes.

Miré a Vale, quien inmediatamente retiró la mirada de mis ojos. Ella no era la mujer fatal que creía ser; era solo una adolescente asustada que se había pasado de la raya y de tragos y había olvidado el pedido del profesor por lo que robó sus llaves e hizo todo mientras los demás estaban en el patio con el anuncio de Winston.

—Mira, sé que estás molesta —continuó Vale, rápidamente, queriendo pasar página—. El Profesor Harrison nos pidió que estuviéramos aquí súper temprano para la edición y no queremos desautorizarte, pero por alguna razón a todos nos llegó el correo menos a ti. — dijo esto último arrastrando las palabras como si necesitara mi confirmación —Hemos estado aquí desde las cinco de la mañana haciendo los cambios de último minuto, pero aun cuando el correo vino del profesor Harrison, no está aquí. Y bueno… nosotros solo estamos cumpliendo.

Me acerqué a la mesa de edición, sintiendo el murmullo de mi madre en mi cabeza: “Ignóralos. En unos días pasará.” Mi corazón temblaba esperando ver la fotografía ampliada de mi cara de borracha en el micrófono.

Pero mi pulso se detuvo.

Lo que vi en la pantalla principal no era mi rostro. Era un titular gigantesco, en negrita y a tres columnas, que lo eclipsaba todo.

EXCLUSIVA. DESPIDO INJUSTIFICADO DEL PROFESOR DAVIES: ¿CHANTAGE, ACOSO Y SILENCIO EN HIGHLAND HIGH?

Me quedé helada. Leí la cabecera una y otra vez. El caso del Profesor Davies, la investigación que yo había jurado no tocar por la cláusula de confidencialidad, el mismo caso que Ethan estaba como loco investigando, estaba ahora aquí, publicado en mi periódico.

—¿Qué demonios es esto? —mi voz salió ronca.

Maya intervino, su rostro pálido pero excitado.

—Estábamos listos para mandar a imprimir la edición normal, Chloe. Pero recibimos una llamada del profesor Harrison que haría unos cambios ligeros a los titulares de hoy y luego a las 6:30 en punto, el servidor recibió un archivo que cambiaba todo... con correos electrónicos, capturas de chat y un resumen legal detallado sobre el caso Davies. Es explosivo. Tuvimos que cambiar la portada en treinta minutos. Este titular va a explotar internet, y...

Se interrumpió, pero la implicación era clara y golpeo en mi cabeza.

—¿El archivo venia del profesor Harrison?

Maya no supo que responder, y eso me confirmaba la sospecha.

... Y nadie va a hablar de una 'Y' morada o de una chica borracha y enloquecida con un micrófono.

Comprendí. Era un golpe maestro. Ethan. Él había utilizado su jugada más arriesgada, revelando su propio conflicto, para crear una cortina de humo y protegerme, o al menos, para proteger lo que quedaba de mí. Era un movimiento de ajedrez maquiavélico y, sin quererlo, me había salvado. O ¿lo hizo a propósito?

Mi respiración se aceleró. Tenía que verlo. Tenía que enfrentarlo por haber puesto mi periódico en una posición legal tan peligrosa, y por haberme salvado de mi propia estupidez.

—¿Quién envió esto? —pregunté, tratando de sonar profesional, pero mi voz me temblaba.

—No lo sabemos, Chloe. Era un correo encriptado. Solo sabemos que la información era demasiado buena para ignorarla —dijo Hana, señalando el monitor.



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En el texto hay: humor amor, egocéntrico, química explosiva

Editado: 04.11.2025

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