—Oye, Cassie —Carmen se acerca a mí cuando estoy guardando todo para irme—. Luego que te fuiste estábamos hablando con las chicas y nos vamos a reunir en casa de Elize para mañana, arreglarnos y todo eso, ¿te nos unes?
Elize se acerca y entrelaza su brazo con el de Carmen.
—Ah, bueno, me gustaría pero…
Elize hace un puchero. — ¿Te enojaste por lo que pasó? —mira mi ropa, con las cejas juntas, justo como lo hizo cuando entró al salón y notó que me había cambiado.
Niego. —No, no estoy enojada pero no tengo auto y yo…
— ¿Pasamos por ti? —Pregunta Carmen—. Le diré a Marcia que vaya por ti o bueno, podríamos pedirte un auto para que te lleve a su casa.
Alex camina en dirección a Rodney, quien está guardando todo en su mochila. Él no me mira, incluso se mueve para colocarse en el espacio entre el escritorio de Rodney y el mío, dejan la espalda frente a mí.
—Está bien —acepto, aunque no sé si es lo mejor.
Elize estira su mano para tocar el brazo de Alex. — ¿Vas a llevar a alguien a la fiesta? ¿Ya invitaste a Elena?
Alex niega, mientras ríe. —No, soy un hombre libre —afirma, colocando el brazo sobre el hombro de Rodney—. No como mi chico aquí, ¿eh?
Rodney suspira. — ¿Ya te vas a llevar tu guitarra?
Alex chasquea la lengua. —Hoy no, sigue guardándola, ¿sí?
—La voy a vender —Rodney se mueve colocándose detrás de mi escritorio, yo cierro mi mochila—. ¿Lista?
Carmen bufa. — ¿A dónde van?
Elize murmura algo que no puedo escuchar.
Rodney exhala, luce cansado. —A un lugar —Rodney toma mi mochila del asiento y se la coloca en el hombro derecho—. Vamos, Cassandra. Ya no hay nada más que hacer aquí.
Alex se mueve, finalmente me mira y sonríe. — ¿No nos van a invitar?
Rodney suelta un quejido. —Solo voy a dejarla a su casa, no es tan importante.
Elize sonríe de lado. — ¿Así superas a Kelly?
Rodney la fulmina con la mirada y yo siento una presión en el pecho.
Un momento, Kelly es la chica que ha estado cerca de Rodney todo este tiempo, ¿eso significa que entre ellos hubo algo? ¿Y si Rodney me está usando para darle celos?
Alex, Carmen y Elize dan unas risitas y me miran, me siento mal ahora.
—Adiós —digo, fingiendo una sonrisa—. Nos vemos mañana.
Me muevo rápido esperando que Rodney me siga, cuando cruzo la puerta, ellas estallan en risas y mi respiración se acelera.
Rodney cruza el marco de la puerta, me giro hacia él y estiro la mano. — ¿Puedes darme mi mochila?
Él se encoje de hombros y me la entrega, yo me la coloco y aclaro mi garganta. —Rodney, hoy no iré contigo
—Está bien —dice—, te paso a dejar a tu casa entonces.
—No —aprieto mis puños—. Me voy sola, nos vemos.
—Cassandra, puedo ir a dejarte —ofrece—. No es problema para mí.
Por supuesto que me iba a utilizar, por supuesto que alguien como Rodney no tiene ni el más mínimo interés en ser mi amigo. Seguramente su plan era usarme frente a Kelly para obtener algo de ella.
Niego. —No, Rodney, puedo irme sola.
— ¡Rod!
Ahí está ella, Kelly.
Rodney aprieta los ojos, ella se acerca. —Ya me voy, Kelly, nos vemos.
Ella chasquea su lengua. —Oye, ¿me llevas a mi casa? Hoy no traje mi auto.
Doy un paso hacia atrás, parece que funcionó y ahora ella quiere estar con él. No importa, mejor me voy antes que siga luciendo como una tonta.
—No puedo —dice—, pero Carmen o Elize te pueden llevar, ve a preguntarles.
Ella entorna sus ojos, permanece unos segundos en silencio. —Sí, eso haré.
Rodney voltea a verme. —Entonces, ¿te llevo?
Pensé que quería estar con Kelly. — ¿No la llevarás? Puedes hacerlo, yo me iré sola de todas formas.
Rasca por debajo de su ojo derecho. —Prefiero llevarte a ti.
No tuve tiempo de analizar su respuesta pues veo que ellas van a salir del salón así que me muevo rápido, no quiero crear conflicto solo porque le hablo a Rodney.
Él avanza sin que le diga nada, bajamos las escaleras y para mi desgracia, Jason y los demás chicos nos miran desde el pasillo.
David se acerca a Matt y le susurra algo, todos los ojos están sobre nosotros.
Esto es tan raro, no soy nada relevante y esto no es algo fuera de lo común, ¿Por qué se comportan de esa manera?
Rodney y yo llegamos al final de las escaleras justo cuando ellos se acercan. Bajo la mirada, no tengo nada qué decir.
—Nos vemos —Rodney levanta la mano para despedirse de todos en general.
Jason habla: — ¿A dónde vamos ahora?
Rodney lo mira. — ¿Vamos?
Matt me señala. —Sí, suponemos que vamos a algún lado, ¿no? ¿Qué planes hicieron las chicas hoy?
Rodney se encoje de hombros. —No sé, ve a preguntarles.
David lo mira, luego a mí, regresa sus ojos a Rodney. —Estás jugando sucio, Rod.
¿De qué habla?
Rodney bufa. —No estoy jugando nada, nos vemos.
¿Jugando?
Él coloca su mano sobre mi espalda para que yo me mueva, camino una distancia prudente y luego me detengo. —Rodney —sé que algo está mal—. Ya no… prefiero que ya no…
Él mira a la izquierda, en dirección a donde ellos estaban. —Ya sé qué estás pensando pero te lo diré al salir de aquí, ¿sí?
Él y yo salimos de la escuela, caminamos hasta su auto pero antes de entrar, me detengo frente a la cajuela. —Ahora sí, dime qué es todo eso que dicen, ¿soy una apuesta o algo así? ¿Por eso me hablas?
No me considero una chica con muchas agallas para nada pero, ya no quiero volver a vivir todo lo que sucedió en mi escuela anterior. Prefiero detener esto antes que se agrande.
Rodney suspira. —No Cassandra, lo que pasa es que le gustas a David y piensa que tú me gustas y estoy quitándole su oportunidad contigo, eso es todo, por eso dijo eso.
Quiero creerle pero mis recuerdos regresan y me pregunto, ¿Cómo puedo confiar realmente en él si recién lo conozco?