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— ¿Qué? —pregunto.

¿Escuché mal?

—Sí —responde Michael—. El año pasado, fue su culpa y por eso me odian. No solo a mí, también a Janne.

Tengo la boca media abierta, los ojos entornados y la mente dándome muchas vueltas. No entiendo nada, esto no debe ser verdad. —Espera —pido—, ¿De qué hablas? ¿Es cierto? ¿Por qué? ¿Cómo?

Tengo demasiadas preguntas en mi interior. Este día se ha sentido como subirse involuntariamente a una montaña rusa que no se detiene y que cada vez va más y más rápido.

—Mira —aclara su garganta—, es una historia muy larga y te la puedo contar si quieres pero ahora necesito que me digas si a ti te están molestando porque lo único que veo con ellas es que intentan molestarte, ¿no?

Niego, aunque es verdad lo que él dice.

—No tienes que mentir —pide—, sé quien eres… hace unas semanas vi unas fotos…

— ¿Fotos? —pregunto sintiendo como la cabeza ha comenzado a dolerme—. ¿Puedes explicarme?

—Hubo una fiesta y algo pasó ahí, alguien le pasó unas fotos a alguien y terminé viéndolas —mueve sus manos para sacar su teléfono—. Esto, y este video.

Mis ojos se abren cuando noto que soy yo con la ropa de Kelly en la fiesta, el video es de cuando David estaba cerca de mí. Recuerdo todo de esa noche y las ganas de llorar vuelven a mí.

Un video de mí ha estado circulando entre la escuela y yo no lo sabía.

También hay fotos pero estas no son de la fiesta, son de una vez que estaba con Rodney comiendo pero a su alrededor le escribieron cosas como que yo soy una chica rápida y fácil.

Mis ojos se nublan, ¿desde cuándo ha estado sucediendo esto? ¿Quiénes más lo han visto?

—Pero… —no puedo hablar.

—Lo siento —Michael susurra—. Mira, yo no sé quiénes la enviaron porque nadie quiere quejarse de otros pero presiento que el origen está entre ellos, siempre han causado este tipo de problemas.

— ¿Dónde las viste? —pregunto—. ¿En dónde más? Solo es por mensaje o…

—Socials —afirma—, ahí una cuenta anónima las publicó, es nueva y solo hizo esas publicaciones luego de agregar a la mayoría de por aquí.

Respiro profundo y me aguanto las lágrimas. — ¿Puedo ver la cuenta?

Él mueve sus dedos y me la enseña. Es cierto, solo están dos fotos y ese video. Los comentarios están llenos de burlas y muchos insultos. No me sorprendería que las cuentas de Carmen y Kelly estuvieran por aquí.

¿Fueran ellas?

— ¿Cuándo las publicaron? —pregunto.

Michael mueve la pantalla para mostrarme la fecha, fue hace una semana.

— ¿Ellos están ahí? —Pregunto bajando aún más la voz—. ¿Alex y Rodney pueden ver esto?

Michael no me contesta por mucho tiempo, lo cual solo puede significarse una cosa. Que sí, que ellos sabían sobre esto y aun así no me dijeron nada.

—Cassandra —Michael suspira—. Lamento que lo sepas de esta forma, pero tenías que saberlo así podemos detenerlo.

Esto jamás se detendrá.

Es por esto que tengo cuentas donde no agrego a nadie conocido, es por esto que no uso Socials tan seguido y que no publico nada de mí. Ya estaba cansada de los comentarios negativos y crueles de mi otra escuela.

Ahora soy una burla para muchos que ni siquiera conocen mi nombre.

Una lágrima se escapa de mi ojo derecho y la limpio inmediatamente. No quiero volver a llorar en la escuela, no quiero ser patética de nuevo. No quiero que se sigan burlando de mí. No quiero que sigan hablando sobre mí. Ya no quiero nada de eso.

—Cassandra —Michael baja la voz, guarda su teléfono y coloca su mano sobre mi brazo—. No queremos que siga esto en la escuela, es por eso que quiero ayudarte —propone—. Tenemos que hablar con el director pero antes necesito que me digas si te están molestando y qué te han hecho.

No puedo hablar, mi garganta está presionada y mis ojos me arden demasiado. Quiero gritar realmente, quiero dejarme caer al suelo y soltar todas las lágrimas que siempre me he obligado a retener.

—Está bien —susurra—, ahora no es el momento, lo entiendo. Pero hay que hacer algo, ¿sí?

Muerdo mi labio inferior y bajo el rostro aún más, un pequeño sollozo se escapa. —Tengo que irme —le digo.

Michael se acerca un poco más. —Está bien, si necesitas que…

—Cassie —Alex me habla por detrás—, ¿nos vamos ya?

Teníamos planes por la tarde, él, Rodney y yo. Ahora ya no más, ellos sabían de esas fotografías, sabían de lo que ocurrió en la fiesta y aun así intentan actuar como si son mis amigos.

Aun así, Rodney tomó mi mano.

Aun así, Alex quiere pasar tiempo conmigo.

Sé que no soy nada especial y que soy bastante patética pero no creo realmente merecer que me traten de esta manera. No sé porque lo hacen. Estoy cansada de esto.

—Cassie… —Alex vuelve a hablar.

Michael exhala. —Cassandra, Janne y Elizabeth están en el salón, ¿prefieres ir con ellas ahora?

—Michael —Alex lo llama—. ¿Terminaste de hablar con ella? Tenemos algo que hacer, estamos ocupados.

Retrocedo unos pasos. —Gracias —trago saliva con dificultad—, yo… ahora me iré a casa, gracias por esto.

Michael asiente y levanta la mano. —Nos vemos, ya sabes que puedes acercarte con nosotros.

—Cassie —Alex repite y su voz comienza a irritarme—, ¿vamos?

Me giro aunque no los veo a los rostros, camino al frente y los rebaso.

No me importa que aún no es hora de irse a casa, no me importa que se molesten conmigo y no me importa que Rodney diga que solo me defiendo con él.

Ya no me importa.

—Cassandra —Rodney dice—, espéranos.

No estoy caminando para irme con ellos a ninguna parte, estoy saliendo de la escuela para llegar a mi casa lo más pronto posible y encerrarme en mi habitación para llorar.

—Cassandra —Rodney y Alex me alcanzan antes de salir por la puerta de atrás—. Espera, ¿A dónde vas?

—Mi auto no está aquí, es…