“El inicio de lo que alguna vez lo vi como el más grande infierno, pero que ahora agradezco”
10 de marzo del 2009.
Los Angeles Central Hospital.
—Buenos días. —Saludo al entrar el doctor.
—Buenos días. —Saludaron al unisonó las tres personas asustadas esperando la noticia que cambiaría su vida por completo.
La pareja estaba impaciente, y la pequeña niña solo estaba asustada porque no le gustaban los hospitales. No entendía nada de lo que estaba pasando, lo único que deseaba era salir de allí.
El doctor no quería soltar la noticia, ya que sabía que ahora vendrían retos para nada faciales, una espera casi infinita. Y le dolía ver que una niña llena de infinita alegría estaba a punto de recibir la peor noticia que alguien podría recibir.
—Hola, hermosa princesa… —se agacho a la altura de la niña, quien mostro una gran sonrisa.
—Princesa mágica. —Corrigió
El doctor soltó una pequeña risa al igual que los padres de la pequeña niña de solo cuatro años de edad, pero con una inteligencia grandísima y sorprendente quien pensaría que esa pequeña llena de vida y alegría tendría que pasar por las peores cosas hasta encontrar su salvación.
—Mi nombre es Isaac ¿Y cuál es tu nombre? —Pregunto.
—Mi nombre es Vida. —Dijo con una gran sonrisa.
—Qué lindo nombre. —alago.
—Mi mami lo eligió. —Dijo con orgullo.
Todos rieron un poco, y Vida mantenía esa postura de elegancia como toda una princesa, con sus piernas cruzadas y sus manos una arriba de la otra colocadas en su rodilla de forma elegante.
— ¿Cómo te sientes princesa mágica? —Pregunto.
—Bien, aunque me duele un poco aquí. —Llevo su pequeña mano hasta su pecho, justo donde le dolía.
Grandes lágrimas bajaban por el rostro de los padres de la pequeña niña. Y el doctor sonrió débilmente para transmitirle seguridad. Tenían que empezar a buscar soluciones o alternativas para poder controlar la aceleración de su corazón.
—Ven aquí, hagamos algo. —Le tendió la mano a la niña quien la tomo enseguida. Se levanto de su asiento y caminaron juntos hasta fuera del consultorio, sus padres venían detrás de ellos, Caminaron por un largo pasillo hasta llegar a una habitación igual a las otras que se encontraban a los lados.
Entraron a una habitación un poco espaciosa donde había todo tipo de aparatos y un carrito con medicinas, un montón de peluches, y tantas cosas que la pequeña se emociono solo de ver todos esos juguetes.
Caminaron hasta el otro extremo de la habitación y el doctor la levanto y la sentó en la camilla, y encendió todos los aparatos que habían a su lado, los padres de la pequeña miraban todo desde la puerta, les dolía ver a su pequeña hija siendo conectada a todos esos aparatos para así mantenerla con vida hasta encontrar un donante que podría durar años, muchos años poder encontrar algún corazón para Vida. Está creciendo cada vez más y con eso su corazón se va haciendo más débil.
—Vamos a jugar un juego, ¿Quieres? —Pregunto el Isaac. —la pequeña asintió rápidamente, emocionada. —Si te dejas poner todo esto. —señalo todos los cables que están conectado a los aparatos. —Te regalo un peluche gigante, solo si te dejas poner todo sin ponerte nerviosa, ¿Va?
Vida asintió frenéticamente, emocionada por la gran propuesta, pero lo que no sabía y tampoco comprendería en ese momento que estaba siendo conectada a la maquina que la mantendría con vida. Vida estaba a punto de comenzar lo que sería su vida hasta encontrar un corazón nuevo.
El doctor comenzó a ponerle los cables, mientras le cantaba para así tranquilizarla y evitar que su corazón se acelere:
We are as strong as the waves
Together we can swim against the current
Of course we can cross, we are a strong team they will never defeat us
We are strong, yes, yes
Together we can, yes, yes
Each step is stronger than the other; let’s continue like this, we will achieve victory
Yes, yes
Let’s swim together, I well be your guide in this mission, you are strong you just have to believe it
Yes, yes…
En la habitación solo se oía la voz del doctor Isaac, Su voz es tan melodiosa, que Vida solo lo oía atentamente.
—Ya terminamos, ahora te explicare algo importante princesa mágica, eres muy inteligente y muy fuerte así que te tengo una misión importante, ¿ok? — Vida asintió. —Bueno, tú te quedaras aquí solita, mientras yo y tu papas vamos a buscar el gran peluche, porque es muy grande y yo no puedo solo, así que mientras estas aquí solita te quedaras aquí sentada mientras juegas con estos juguetes. —camino hasta la canasta y tomo unas barbies y se los dio. —ahora escúchame bien, cuando suene esto. —señalo el aparato que estaba al lado de la camilla, ese es el que lleva el control de su corazón. —cuando suene tu solo presiona este botón de aquí. —en el espaldar de la cama se encontraba un botón rojo, que cuando lo presione enfermeros vendrán rápidamente. — ¿Qué harás cuando suene? ¿Qué botón presionaras? —Pregunto.
—El rojo. —respondió.
El la miro con una gran sonrisa de orgullo al igual que sus padres, es una niña muy inteligente para solo tener cuatro años.
—Exacto, ese mismo es. —le respondió.
Los padres de Vida y el doctor volvieron a al consultorio, él quería evitar cualquier reacción de ellos frente a Vida para mantener su corazón al ritmo normal. Se le hacia un poco difícil decir los resultados de los exámenes que se le practicaron a Vida ya hace unos días, es complicado ya que desde ahora nada será completamente normal, ahora tenían que nadar contra corriente, y esperar, sobre todo esperar y no rendirse.
—De ante mano para mí esto es difícil de decir, pero tengo que ser profesional y decir los resultados aunque quisiera que no fueran reales, pero quiero que lo tomen con calma para que ella se mantenga tranquila. —Suspiro, Eva y Erik asintieron lentamente. —Vida fue diagnosticada con Miocardiopatia Dilatada, es una enfermedad del musculo del corazón, que, en general, comienza en la cavidad de bombeo principal del corazón. —Camino hasta el cartel donde estaba las principales causas y consecuencias, para así darles una mejor explicación. — El ventrículo izquierdo se estira y se reduce (dilata), por lo que no puede bombear sangre de la misma manera que lo hace un corazón sano.