Todas mis razones para luchar por ti

Capítulo 18

Amber

De todas las cosas que podia escuchar esta noche esta es la que menos esperaba.

“Solo tengo claro una cosa en la vida. Que estoy enamorado de ti.”

En este momento de fragilidad y desorden en su vida decide aparcar todo para abrir su corazón conmigo. Esto no lo había hecho conmigo. NO al menos de esta manera. Creo que es un paso en el camino correcto. Me ha sorprendido tanto que he tenido que parar el coche en el arcén para asimilarlo mientras los demás vehículos me pitan supongo porque no me he molestado ni siquiera en poner los intermitentes.

Son permanece incrédulo esperando que le diga lo que se me está pasando por la cabeza.

¿Estás bien? arquea la ceja y pregunta preocupado.

Permanezco unos segundos antes de responder.

—Si, solo que no me lo esperaba. NO se que otras palabras utilizar para esto.

Decido aparcar esa frase que me da vueltas en la cabeza porque llegamos al hospital. Su abuela está fuera dando vueltas en círculo y con claro nerviosismo.

—¿Cómo va todo? —pregunta Son con la respiración acelerada.

A ido aumentando el ritmo conforme nos acercabamos.

—Nada. De momento no se nada.

Son supura y comienza a impacientarse mientras busca un sitio para sentarse. Yo miro a esta mujer que hace un año era desconocida para mí y puedo ver que ha perdido el brillo en su mirada.

—¿Tu crees que saldrá todo bien? —pregunta cogiéndome del brazo buscando un hombre al que apoyarse.

—Seguro que sí —respondo sin estar segura de mi respuesta.

La verdad es que solo se lo que me ha contado Son y cómo este chico se abre menos que un pistacho cerrado, se lo justo y necesario.

Me devuelve una sonrisa un poco forzada pero en su rostro se la ve que está más calmada.

Enseguida se marcha con su nieto que permanece inmibil moviendo las piernas con clara señal de nerviosismo. Se sienta a su lado y le pasa la mano por encima del hombre.

Eso hace que ahora Son sea el que se relaje y detenga su nerviosismo.

Mi respuesta ha servido para calmar y ella a su vez a calmado a Son. Me alegra verlos tan unidos en estos momentos tan duros.

Ojalá todos los momentos fueran así y no se evaporan como el azucarillo. Decido sentarme al lado de ellos para no quedarme sola en medio de la sala de espera. Miro mis manos y compruebo que están un poco rojas, he debido apretar demasiado fuerte el volante mientras conduce fruto de los nervios o de esa frase de Son.

Cuando levanto la vista observo que el doctor que nos ha atendido hace unas horas viene a nuestra posición.

—Bien, ya podéis entrar a verlo, está estable dentro de la gravedad, sólo pueden entrar tres familiares por usuario.

—Si hombre no te preocupes, que no nos hemos traído a los del bar —dice Son provocando que suelte una pequeña carcajada.

Se da la vuelta y nos convertimos en su sombra por todos los pasillos, hay silencio, ninguno comenta nada.

Llegamos hasta un box que está cerrado por una cortina, el doctor nada más llegar la abre. Lo observo y tiene la cara completamente vendada y tiene la nariz hinchada con un gran moratón, tiene los ojos abiertos pero la mirada perdida.

—A parte del botellazo que sufrió y que le provocó una brecha en la cabeza y que hemos tenido que cerrar con puntos al caer se dio un fuerte golpe en el tabique nasal provocando el hematoma que estáis viendo. Por favor estar el menos tiempo posible necesita descansar, en unas horas se le trasladara a la habitación. Os dejo con él —se explica con la voz bastante tomada como si llevase dos o tres días enteros trabajando.

El tono provoca que me ruborice sin llegar a entender porque, trato de ocultarlo colocándome el pelo detrás de la oreja.

Al fin se marcha y nos deja a solas con el protagonista de la noche.

—¿En que estabas pensando? —pregunta su abuela claramente preocupada cuando comprueba que está bien.

Mientras espera una respuesta comienza a colocar la sábana bien.

El no habla y se limita a levantar los hombros en señal de disconformidad.

—Creo que Son y yo nos vamos fuera —aclaro mientras cojo del brazo a Son. Este no hace amago de quedarse.

—Vamos a dejarles un momento a solas —le digo mientras desde la lejanía observamos que se dan un abrazo como si se hubieran vuelto a conocer.



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En el texto hay: pareja, adolescente, amor

Editado: 24.09.2025

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