…Olivia…
Era muy temprano y la única razón por la que había despertado a esta hora era porque Cassie, Beth y yo recibiríamos a Zach en el aeropuerto. Aún faltaban dos horas para eso, pero quise desayunar y alistarme con calma.
—Buenos días —saludó James entrando en la cocina.
Sus ojos verdes se posaron sobre mí. James estaba actuando extraño desde lo que paso con Blaire. Había escuchado a Rowen intentando hablar con él, pero este negaba que algo estuviera pasando.
—Buenos días.
James se sirvió café y se sentó a mi lado.
—James. —Sony entró dedicándome un saludo rápido—. Están aquí ¿les digo que esperen a que termines de desayunar?
Escuché con curiosidad mientras le servía el desayuno a mi hermano.
—Déjalos pasar —dijo mirándome un momento antes de concentrarse en su desayuno.
—¿Quién está aquí?
—Ya lo veras —murmuró.
—Buenos días.
Nina sostenía el brazo de un chico, no debía ser mucho más grande que yo o eso parecía.
—¡Nina! —chillé llena de emoción.
Corrí hasta ella abrazándola con fuerza.
—Mi niña. —Río con cariño respondiendo mi abrazo.
—Te extraño como no tienes una idea.
Nos separamos y le regalé una enorme sonrisa.
—Yo no tanto —fingió indiferencia.
—Creí verte lagrimear en tu fiesta de despedida —canturreé con humor.
Nina negó con la cabeza y acomodo mi cabelló oscuro con suavidad.
—Te ha crecido el cabello, me gusta. —Sonrió.
—¿Qué haces aquí?
Sus ojos grises fueron al chico a su lado. Me sonroje ante mi comportamiento descortés, es solo que me había emocionado mucho al verla.
—Hola de nuevo, Nina —saludó mi hermano depositando un beso en su mejilla.
—Este es mi sobrino Ethan —lo presentó haciéndole un gesto que solía darnos a nosotros cuando éramos niños y teníamos visitas.
—Mucho gusto, Ethan.
Ambos estrecharon las manos.
—Igualmente y gracias por la oportunidad —añadió el muchacho.
James se giró hacía mí.
—Esta es mi hermana Olivia.
Saludé al chico aun con algo de vergüenza.
—Ethan estará trabajando con nosotros una temporada, acaba de terminar la academia de policía.
Observé a mi hermano de forma interrogante. No más seguridad para mí, por favor. James me regaló una sonrisa divertida que, en vez de molestarme, me animó. Tenía días sin mostrar una sonrisa tan genuina.
—Cubrirá los turnos de los demás.
Asentí sintiéndome aliviada.
—Estas aprueba, la única razón por la que te acepté fue porque eres sobrino de Nina y confió en ella plenamente.
Ethan asintió con seriedad.
—No estarás solo. Sony, Duncan o Calvin siempre estarán en tu guardia.
El primero apareció como si hubiera estado esperando en el pasillo.
—Sony te llevara con el resto del equipo. Espero lo mejor, Ethan. Al primer error, te vas.
Nina sonrió con humor a su sobrino, incluso si sabía que mi hermano hablaba en serio.
—Claro, señor.
Reprimí una sonrisa.
—Llámame James.
—Ha sido un placer y gracias, de nuevo —dijo antes de seguir a Sony.
—En un momento iré a despedirme.
Nina le sonrió a su sobrino mientras este salía de la cocina.
—Gracias, muchacho.
Nina besó la mejilla de mi hermano.
—Aún no me agradezcas, todo está en su desempeño.
—No es para menos, cuidara de lo más sagrado que tienes.
Su mirada cayó sobre mí.
—¿Cuánto tiempo vas a quedarte? —interrogué animada—. Podemos hacer una comida mañana o ir a ese lugar de Pretzels que te gusta tanto.
—Me temó que debo regresar a New Jersey hoy mismo, solo quería acompañar a Ethan y agradecerle a James en persona.
Mi alegría disminuyó sin ocultarlo. Nina me dedicó una sonrisa triste.
—Lo siento, Olivia.
—Entiendo —murmuré cabizbaja—. Me conformó con haberte visto.
La abracé y dejé un beso en su mejilla.
—Me ha hecho el día verlos —declaró mirándonos con cariño—. Los echo de menos, pero sé que Rowen cuida bien de ustedes.
—Le hubiera encantado verte.
—A mí también. —Sonrió.
—Un coché te llevara hasta New Jersey.
Informó James.
Editado: 07.09.2025