Todo lo impredecible

La vida en Viena

Olivia

Me recargué en la silla sintiendo mi cabeza explotar por horas viendo a la pantalla. Estaba tratando de terminar todos mis pendientes de la escuela antes de que Nik llegara mañana temprano a la ciudad. No pude evitar emocionarme, dejarlo luego de su cumpleaños hace un par de semanas había sido difícil. Especialmente luego del momento que compartimos. Y aunque seguía asustándome lo que sentía por Nik, no sabía cuanto más podía seguir conteniéndome.

Mi teléfono sonó con un mensaje, estirando mi espalda, revisé la pantalla de inicio. Un revoloteó se formó en mi estomago al ver que era de Nik.

[¿Tu personaje te dijo una mentira blanca?].

—¡Olivia! —El grito de Dani confirmó mis sospechas.

Tropecé en el camino un par de veces. El chico rubio de mis sueños estaba quitándose su chaqueta, luciendo como un modelo y con una sonrisa que muy bien podía hacer que el sol apareciera antes de tiempo.

Me abalancé sobre él sin vacilar, enterrando mi rostro en su cuello.

—¿Qué haces aquí? —pregunté con voz aguda.

Nik inclinó la cabeza hacía atrás depositando un pequeño beso en mis labios.

—Sabía que ya no podías esperar un día más —murmuró haciéndome sonreír.

—Yo también te extrañe —bufé.

—¿Estas reclamando? —Alzó una ceja.

—Ya quisieras. —Reí.

—Ustedes son adorables.

Mis mejillas ardieron al encontrarme con Dani sonriendo como un gato.

—Hola. —Nik se acercó para saludarla—. Tu debes ser Danielle.

—Es un placer, pensábamos que eras imaginario.

—Muy bien —intervine avergonzada—. Ya tendrán tiempo de conversar.

Nik compartió una mirada divertida con Dani, quien se reía de mí.

Lo llevé hasta mi habitación evitando más burlas de mi amiga.

—Definitivamente te gusta el azul. —Río estudiando el lugar.

Sintiéndome menos expuesta, me apresuré a abrazarlo. Porque de verdad lo había extrañado.

—¿No se supone que llegarías por la mañana?

—Pude desocuparme antes y quise sorprenderte, así como hiciste tu.

Explicó envolviendo sus brazos a mi alrededor y acariciando mi cabello como le gustaba hacer.

—No soy fanática de las sorpresas, pero esta me ha gustado.

Fui hasta el escritorio y cerré mi portátil.

—No planeaba hacer nada hasta que llegaras mañana, pero los chicos van a ir a un bar. No sé si quieras ir, aunque debes estar cansado y…

—Solo necesitó una ducha —cortó con un guiñó.

—¿Seguro? Entiendo si quieres quedarte a descansar.

—Dormí bastante en el avión. Además, aún tengo que conocer a Logan y Hans ¿no?

Depositó un beso en mi frente antes de ir a sacar algunas cosas de su equipaje.

—Gracias, Nik. —Sonreí con dulzura.

—No me opondría si quisieras acompañarme a la ducha —pronunció con sugerencia mientras se acercaba a mí con una sonrisa sexy.

Puse los ojos en blanco, pero sentí mi corazón latir emocionado.

—Eso no va a ocurrir.

—Eres difícil de corromper —bromeó.

—Tal vez algún día tengas suerte. —Mi comentario juguetón hizo que sus ojos centellaran.

Pero antes de perder la seguridad que había salido de algún lugar recóndito, lo empujé al baño. Yo me había duchado hace un par de horas, así que solo me maquillé y elegí un atuendo.

—Me siento moralmente obligado a decirte que puedo ver tu ropa interior.

Emití un pequeño grito al escuchar su voz a mis espaldas. Estaba inclinada en el armario alcanzando la chaqueta que dejé caer.

Llevé mi mano a la parte trasera de mi falda y volteé a verlo con los ojos entrecerrados.

—¿Y qué haces mirando mi trasero? —cuestioné.

Nik me dedico una sonrisa ladina.

—Puedo mirar ¿no?

—Recuerda que Duncan vino conmigo —amenacé con humor.

—Fuerte y claro.

Puse los ojos en blanco haciéndolo reír. Dani estaba bebiendo una gaseosa cuando entré en la cocina.

—Joder, Liv —manifestó—. Si que es atractivo.

Sonreí tratando de no sonrojarme. De lo contrario pasaría el resto de días con las mejillas acaloradas.

—Si fuera tú, ya me habría golpeado por hablar de mi chico así.

—Tu eres una celosa irremediable. —Reí—. Demasiado.

—¿Él lo es? —preguntó intrigada.

—Un poco, aunque nada tan extremo como tú. Al menos desde que salimos no lo he visto actuar de esa forma.

Hubo voces y pasos desde la entrada.

—¿Dónde está?




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.