Los años pasaron y las casualidades de la vida.
Hicieron que siguiéramos cruzando nuestros caminos.
Pero yo seguía enamorada de otra persona.
Y tu continuabas demostrándome el tuyo a tu manera.
Torpe y primitiva.
Aun no entiendo por qué lo hiciste.
Con lo fácil que era poner tus pensamientos en palabras.
Tal vez, te faltaba valentía para hacerlo.
Como me faltó a mi para reconocer detrás de ese odio disfrazado.
Hacia ti.
Se ocultaba un sentimiento más poderoso.