Todo por el maldito contrato (ae #1)

17

17: Alerta.

Narrado por Marianne:

Cuando por fin los invitados se fueron, nos despedimos de mis padres con la escusa de que estábamos cansados por el viaje.

Y los padres de Joshua se fueron a hacer algunas cosas por la ciudad, nos avisaron que en la noche estarían llegando para la casa de Joshua.

Ese era otro tema por resolver, la mudanza:

- Ahora que estamos solos —. Joshua me mira asustado .— Explica... ¿Por que carajos le dijiste a tu madre que vivíamos juntos?

Joshua lo piensa un poco, parece como si no se acordara, pero que bruto.

- Pues la verdad no me acuerdo —. ¡Lo sabia! .— Pero supongo que habrá sido para que me crea.

Como odio a Joshua.

- ¡¿No podías decir otra maldita excusa?! —. Grité desesperada.

No es que no me lleve bien con los padres de Joshua, ellos no son unas personas excelentes, pensar en ellos me da un poco se culpa, ya que la mentira también los involucra.

El problema es su primo, que por lo poco que lo conozco puedo deducir que es un idiota, sé que soy buena actriz, pero con tantas personas que quieran saber de mi noviazgo con Joshua me pone nerviosa desde ahora.

- No seas exagerada Marianne, sabes que mis padres te adoran, hasta mas que a su hijo —. Eso último lo dijo en voz baja y con los dientes apretados. Eso me hizo sonreír un poco .— Literalmente con el único que tendrías que fingir es con mi primo.

- Vale, vale pero si algo sale mal no me eches la culpa, que tú solo te estas metiendo en la boca del lobo.

- Tranquila Anne, todo esta fríamente calculado —. Hace una pose extraña como de diva y me hace lanzar una carcajada.

- Como te odio —. Digo sin pensar... Ups.

- ¡Ey! ¡Sigo aquí! —. Murmura indignado.

- No importa —. Me río en su cara .— Entonces... ¿A que hora empezamos?.

- ¿Con que? —. Pregunta despistado, lo miro con cara de obviedad y el parece reaccionar .— Ahh, con la pequeña mudanza.

Duhhh

***

- ¡Eh! ¡Cuidado con eso! ¡Es delicado!—. Grité cuando uno de los ayudantes casi tira el jarrón que me regalo mi abuela.

Como extraño a esa viejita.

- ¿Que pasa Ann? —. Pregunta Joshua llegando a mi lado.

- Nada, sólo que tu ayudante casi rompe el último regalo que me dio mi abuela antes de que se vaya a la otra vida —. El pobre muchacho se encoje en su sitio ante la mordaz mirada que le da Joshua .— Pero no paso nada, tranquiliza tu ki(1).

- Pareces una adolescente hablando así —. Ríe Joshua negando con la cabeza.

Lo miro con una ceja alzada.

- Yo conservo mi niña interior, no es mi culpa que tú seas un viejo amargado —. Me cruzo de brazos y lo reto.

Él se ríe más fuerte.

- ¿Viejo amargado? ¡Si a penas nos llevamos 3 años! —. Grita haciéndose el indignado.

- Lo pareces.

- ¿Quieres que te lo pruebe? —.  Encarno la otra ceja y este se da cuenta de para donde va mi pensamiento .— Que mal pensada eres Anne, solo te quería mostrar mi pequeña colección de objetos de Marvel.

Chillo emocionada ante esa propuesta.

Desde que era una niña siempre me han gustado los súper héroes y todo lo que conlleva eso. Mi padre dice que saque ese lado de su familia, ya que cuando otras niñas querían una barbie, yo quería un comic de Wonder woman. Y mi padre encantado me lo compraba, para así él pueda leerlo después.

En fin...

Joshua me llevó hasta el fondo del pasillo, donde había una gran puerta, sacó una llave de su bolsillo.

Esta escena se me hace conocida.

Ingresó la llave y la puerta se abrió inmediatamente, dentro se vio todo oscuro y medio rojizo.

Oh oh alerta de Christian Grey.

Prendió la luz y todo la sala se ilumino de por si.

Era el paraíso. Bueno era el paraíso para la gente como yo.

Me acerque y cogí uno de los objetos. Era la imagen miniatura de Wonder woman. Luego de eso cogí uno de los cómic, grande fue mi sorpresa al ver que eran de primera edición.

Estaba pensando seriamente en quedarme a vivir en esta habitación.

- ¿Te gusta? —. Me pregunto Joshua luego de unos segundos al ver mi cara de sorpresa. Luego paso a ser de una repentina felicidad.

- ¿Que si me gusta? —. Pregunte aun en shock .— ¡Claro que me gusta! ¡No solo me gusta me fascina! ¡Me encanta! ¡Es el paraíso!

Él soltó una pequeña risa en contestación mientras yo seguía apreciando su "pequeña colección".

*** 
Narrador omnisciente:

- Entonces querida... ¿Que te gusta de mi hijo? —. Marianne se atoro con la comida cuando la mama de Joshua, termino de pronunciar aquellas palabras.

Joshua le dio unas pequeñas palmadas suaves en la espalda, luego le ofreció un vaso de agua que acepto gustosa.

- Cariño, no seas tan directa, mira como has dejado a la pobre chica —. Le regaño cariñosamente el padre de Joshua.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.