Narra Charlotte:
Me tire en la cama a pensar en lo que había sucedido hoy, la confesión de Tom, la amabilidad de Zack y el chico guapo llamado Dennis Johnson, el empeño que ponían para hacerme sentir bonita y única, todo esto me hace pensar que quizás si hay un cambio en mí, más que en mi actitud, en mi cuerpo.
Me levanto de la cama y camino a mi ropero para sacarme de la gran duda que me comía la mente: ¿Estoy más delgada?, al llegar abro las puertas y saco la báscula (balanza, pesa), me subo a ella con los ojos cerrados, *la última vez que me pese, pesaba 105 kilogramos*, despacio abro mis dedos dejando ver el número que marcaba la báscula, al ver mi peso me pongo a llorar de la emoción, *¡peso 70 kilogramos! * de verdad había bajado de peso, comienzo a revisar mi ropa, toda ropa gigante.
¡Estoy más delgada!
Al despertar el día siguiente tenía nuevas fuerzas para seguir adelante, camine a la regadera y me bañe, salí, busque mi mejor atuendo y baje a la cocina que estaba desierta, eran las 7 de la mañana y yo estaba sentada sobre la mesa de la cocina con un café y un libro entre las manos.
A las 8:30 escucho el sonido de la puerta que me desconecta de mi lectura, era Eve que entraba con sus zapatos en las manos
Char: Buenos días, señorita Evelyn – digo elevando las cejas – ¿Cómo paso la noche?
Eve: Char – sonríe amplio – lo pase increíble, John es un caballero, respetuoso, pasamos la noche hablando de recuerdos, flores y estrellas, me sentía en paz
Char: Me alegro Eve – sonrío amplio – te mereces a alguien que te haga una mejor persona, que te alegre los días en vez de amargártelos con sus tonterías
Eve: Se a lo que te refieres Char, Tom debe desaparecer de mi vida, solo ha sido un capricho estar a su lado, solo lo hacía para fastidiarte – baja la mirada – perdón Char, he sido una pésima prima, te he lastimado, solo por envidia
Char: ¿Envidia? ¿Envidia de qué?, estoy prácticamente sola en una ciudad gigante, perdí a mis padres en un accidente, mi prima me acaba de confesar que salía con alguien solo para fastidiarme – dejo mi libro a un lado - ¿es por el dinero? El dinero no da la felicidad Eve, yo – mis ojos se nublan a causa de mis lágrimas – daría todo lo que tengo por 5 minutos más al lado de mis padres Eve, quizás tú no tienes a tus padres biológicos, pero mis tíos te han dado todo el amor que han podido, eres su hija y mi prima, hermana de Logan y Lorena, ¿Qué es lo que tanto me envidias?
Eve: No lo sé Char, en mi mente tu vida es perfecta, pero al escucharte me doy cuenta de que soy una estúpida, no puedo envidiar tu vida, además eres mi prima no debería hacerte daño en ninguna circunstancia – se acerca a mí y me abraza – lo siento, lo siento mucho, primita
Char: Ya no importa Eve – le abrazo de vuelta y comienzo a llorar – extraño tanto a mis padres, los necesito en mi vida, que vean todo lo que he podido lograr, que ya estoy en la Universidad, que el próximo año saldré con mi título profesional y podré trabajar y ganar mi propio dinero, que ya no soy la niña que dejaron al morir
Eve: Me rompe el corazón escucharte Char, he sido tan estúpida en serio – acaricia mi cabello – y no estás sola, nos tienes a nosotros, tus primos que no te dejaremos
Char: Gracias…
Escucho unos pasos que vienen bajando las escaleras y caminan a la cocina, era Lorena, al vernos abrazadas tapa su boca que formaba una “O”, camina hasta nosotras y se une al abrazo.
Luego de un rato estábamos todos sentados en la mesa comiendo unos ricos panques que habíamos hecho con Eve y Lorena antes de que Logan y Zack se levantaran, esta es la escena que siempre había querido, una familia alegre rodeando una mesa.
Narra Charlotte:
Lunes por la mañana y el ánimo es el mejor, ya han pasado un par de semanas desde la fiesta de cumpleaños, camino a la universidad de la mano de Zack, sí de su mano, a nuestro lado van Lorena, Eve y Logan, luego del desayuno en casa del sábado recién pasado todos estamos mejor, Evelyn nos ha hablado todo el camino acerca de cómo va a terminar su relación con Tom, personalmente me hace muy feliz que vaya a terminar su relación con ese patán.
Al entrar al establecimiento todos nos quedan mirando, somos los más populares en este momento, vamos a grandes fiestas, tenemos amigos importantes. Ahora todos saben lo de mi fortuna y quieren ser mis amigos, claramente por conveniencia, pero mi “yo” interno no se acostumbra a esto, que la gente ponga tanta atención en mí y en cómo me veo, que quieran ser amables, a mis primos siempre les ha sentado bien la popularidad, pero a mi… a mí no.
Las cosas con Zack van demasiado bien, cuando digo demasiado, es demasiado, hemos salido a caminar.
“Flashback”
Era sábado y lo primero que veo al abrir los ojos es a Zack mirándome, sonríe amplio.
Zack: Despertaste – besa mi mejilla – te estaba esperando
Char: ¿me esperabas? – Digo con mi voz perezosa – pero si no teníamos planes
Zack: Exacto, tú misma lo has dicho – sonríe – no teníamos planes, pero ahora si – ríe – arriba, que saldremos de paseo a un hermoso lugar