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Elena

Dos cuadras antes Jay y Brian bajaron del coche, avisaron que estarían cerca y tendrían cuidado de que nadie los viera. Tuve que pasarme al asiento delantero para que mi madre nos vea y no sospeche de nada.

Antes de aparcar el coche, visualisé a mi madre mirando por la ventana, Louis bajó para ayudarme a bajar y salí tomándole la mano. Antes de tocar, la puerta se abrió dejando ver a mi madre muy sonriente mirando mi mano entrelazada con la de Louis. Nos dejó pasar, mi hermana y Liam actuaban normal, dirigiéndose a los sillones para estar atentos a lo que tenga que decir mi madre.

—Siéntense por favor.

Nos sentamos juntos y mi madre se sitúa al frente de nosotros.

—Los he citado porque tengo que hablar con ustedes—empieza a hablar y me asusta su sonrisa.

—Adelante señora Blake, escuchamos—Louis se mantiene firme.

Mi mirada se dirige a Sophia, que disimuladamente está prestando atención mientras que Liam pretende enseñarle algo en su móvil.

—Mi esposo y yo estuvimos conversando antes, sabemos que desde hoy están de vacaciones—mira a Louis—. por eso pensamos que sería una oportunidad para que fueras a visitar el trabajo de mi esposo, conocer más sobre el negocio y...—me pongo nerviosa en cuánto me mira—. también sería bueno que vayas con Elena, tu futura esposa, para que pasen un tiempo en la ciudad del amor, en París.

Dios mío. No puedo dejar que nuestro plan se arruine, mi madre sigue mirándome inquietante, su sonrisa está a punto de convertirse en una mueca, por eso me adelanto.

—Es una idea excelente!—hablo con un poco más de entusiasmo, y la verdad que salió natural.

Intento mover levemente con el hombro a Louis, que al parecer se quedó callado más tiempo de lo que debería. Al final reacciona, sonriéndonos.

—Tienes razón, es una gran oportunidad para conocer sobre mi futuro negocio y pasar tiempo con mi prometida.

Estuve a punto de reírme al escuchar esa última palabra. Puedo decir que lo hemos logrado, ya que a mi madre le brilla el rostro.

—Perfecto! Ahora solo dejo a ustedes para que escojan el mejor vuelo—se pone de pie—. Es recomendable que viajen mañana.

Estaba a punto de responder pero Sophia se adelanta poniéndose de pie, al lado de mi madre.

—Sería recomendable viajar yo también mamá, no crees?

—No me opongo ante eso—se encoge de hombros.

Mi hermana chilla y la abraza.

—No se preocupe—Louis se mantiene a mi lado—. Tengo un avión privado, así que pueden viajar algunos más.

Mi madre sonríe aún más—. Gracias Louis, eres el mejor yerno.

Liam deja su móvil y enarca una ceja—. Yo sigo aquí.

—Tienes un avión privado?—pregunta mi madre, cambiando su expresión a una aburrida.

Mi pobre cuñado niega.

—Ya veo—sin más mi madre desaparece escaleras arriba.

Me acerco para abrazarlo.

—No necesitas su aprobación, para mí eres el mejor.

—Te amo, pequeña.

Sophia se une al abrazo. Louis se queda sentado mirándonos.

—No quiero interrumpir el momento, pero tenemos que planear un viaje.

Liam reniega—. Tú siempre interrumpes todo.

Al final salimos para reunirnos con Jay y Brian. Ahora nos dirigimos a casa de mi mejor amigo para hablar lo del viaje, además la casa está sola y es mejor hablar ahí dónde nadie nos pueda reconocer.

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En el transcurso del camino, les contamos a los dos cuál era el motivo por el que mi madre quería conversar. Se sorprendieron, y mucho. Y Jay simplemente estaba pensativo. Ahora en casa de Brian, estábamos conversando sobre lo del viaje.

—Podremos viajar mañana, temprano—comenta Louis—. Quiénes vendrán?

—Definitivamente yo—se adelanta Liam.

—Nosotros—se acerca mi hermana enganchando su brazo al de Liam.

Agradezco tanto que puedan ir para no sentirme tan perdida en la ciudad. Brian, que estaba sentado, se levanta poniéndose a mi lado.

—Yo también iré—me sonríe y lo abrazo, agradeciéndole—. Nos merecemos esas vacaciones.

—Muy bien, alguien más?

Todos voltean a mirar al único que no ha dicho nada, Jay. Tiene las manos metidas en los bolsillos de su pantalón, nos analiza por unos segundos hasta que se acerca a mí, rodeándome la cintura con su brazo.

—I will follow you, to the end of the world, recuerdas?—asiento, a punto de llorar y mira a Louis—. Estaré ahí.

Me acerco para abrazarlo. Estaba pensando demasiado en la idea de pasar tanto tiempo sin verlo y comenzaba a deprimirme. Los demás se alejan un poco para dejarnos solos.

—Estás seguro que puedes venir?—pregunto al separarnos.

—Si puedo, chérie.

—Y tu representante no necesitará de ti? Tu madre?

Sus brazos me rodean una vez más y presiona un tierno beso en mi frente.

—Estoy seguro que mi representante entenderá que necesito un descanso, en cuánto a mi madre, puedo asegurar que estará feliz porque iré contigo—sonríe.

—Gracias por acompañarme, no iba a poder soportar estar lejos de ti.

—Ni yo, además necesitas un traductor, no crees?—muestra esa sonrisa coqueta que tanto me encanta.

—Lo necesito.

Nos reímos, y lo acerqué para besarlo. Después nos volvimos a acercar a los demás que estaban empezando a planear qué haríamos al llegar a la ciudad. En cierto modo, yo también estaba emocionada por ese viaje, nunca había conocido París, y eso que mi padre vive ahí, pero jamás me regaló un viaje para ir a visitarlo. Ahora que se presentó la oportunidad, es bueno para poder relajarme y mejor aún, con las mejores compañías. Tal vez Louis lo sea, a pesar de todo, nos estamos ayudando bastante y me doy cuenta que no es mala persona, no cómo antes solía aparentar.

Me alejo del grupo para acercarme dónde está Louis, sentado en la mesa con su móvil.

—Elena...—se percata de mí y sonríe.

—Solo quiero agradecerte, por ayudarme con esto.