*Capítulo 5*

Aleksandr “Sasha”

-¿QUÉ HICISTE QUE?- grito y puedo jurar que toda la sangre se ha evaporado de mi cuerpo.

-¡Ay! Jefecito, pero no te alteres, es más siéntese por acá, tómese el vasito con agua y respire conmigo a ver- esquivo su mano al trata de sentarme.

-Pero como se te ocurre hacer semejante estupidez, ahora me estoy cuestionando si Adrián en vez de molesto estaba feliz de que te convirtieras en mi asistente- camino como león enjaulado por toda la estancia.

-Triste, en caso severo de depresión, eso puedo asegurarlo- comienza a caminar detrás de mi -esta viendo el vaso medio vacío, hay que verlo medio lleno, hay que…- detengo mi caminata de manera abrupta sacándole un maldición al chocar contra mi espalda.

-Jefecito mi nariz, ¡auch!, no tengo ni un año con ella y ya me la quiere dañar, que vengativo es-

-Soy ruso, está en mi naturaleza-

-Si es malo- responde de manera gangosa al tener presionada la nariz -yo solo cumplí con mi trabajo-

-¿De cuándo acá tu trabajo es ser el chivo expiatorio DE MI MADRE?-

-Ya nos estamos desviando de la estabilidad emocional jefecito- presiono mis puño conteniendo las ganas de lanzarlo por la ventana y que arruine los rosales.

-No, no se enoje respire, a ver respire…- expiro pesadamente y ahora el que sostiene el tabique nasal soy yo, conteniendo mis ganas de remodelar el jardín con José.

-Explicate-

-Bueno Jefecito, a ver… ¿yo soy?...- mueve su mano izquierda alentándome a responder, mientras continúa presionando su nariz.

-Un ser que puede convertirse en abono para los rosales-

-¡AHHHHHH!- grita de manera exagerada -deje lo mafioso que no… espere, si le queda y más con ese porte, ese perfil y es acara de cu…-

-Al grano ¡Por Dios!-exijo tomándolo de los hombros y sentándolo.

-Ve Jefecito si parece de la Bratva, es más, esto parece de novela- se levanta y comienza a caminar y su cara de emoción me asusta -en un libro leí que el protagonista era así como usted, el jefe de la Bratva y su asistente toda virgen, joven, bella e inocente, como yo, pero…-

-Tú no te pareces en nada a la protagonista en tal caso-

-¿Es por qué no soy mujer?- pregunta exagerando indignación.

-No, sino porque de joven, bello e inocente no tienes nada y no me hagas hablar de virginidad, porque no te queda ni el recuerdo- sentencio rodando los ojos dejándome caer en el sofá.

-¡Ahhh!, eso es porque… la semana pasada me hice un refrescamiento facial- corre a ver su reflejo en el espejo en todos los ángulos posibles -es el estrés que me tiene mal y por ende su culpa me hace trabajar demás y me regaña mucho-

-¿Trabajar demás, regañar? ¿quién te mando actualizar un perfil de citas que no quería? ¿por qué te confabulaste con el engendro del mal de Lana? ¿y por qué mi madre anda ventilando que saldré con una mujer?-

-¿No me diga que quería salir con un hombre?, porque de ser así yo soy el primero en sacrificarme, todo sea por el bien de la humanidad-

-¡Pshh! no seas imbécil-

-No lo soy, soy eficiente y cumplo a cabalidad mi labor… además jefecito es algo insignificante es solo una salida, una cena, un cine, un desayuno, no sé lo que desee, es hasta gracioso si lo ve bien-

-Ja ja ja, mira como me río- me tomo el cabello con las manos sintiendo como la frustración emana por mis poros -una salida, una cena… no, y no es para nada gracioso al momento en que el engendro y mi madre se involucraron-

-Jefecito no…-

-Seguramente mi hermana me venderá a una secta de mujeres donde buscan hombres exitosos, bien parecidos, inteligentes y con dinero, para hacer sacrificios humanos y mi madre… ¡aish! Mi madre ya debe estar apartando fecha para el bautizo de los hijos que nunca tendré-

-Vaya jefecito, eso es a lo que yo llamo autoconcepto y autoestima… yo simplemente hice lo que me dijo, y cito “no tengo tiempo”… “pídele a mi hermana la contraseña” y eso fue lo que hice, llame a Lanita de oveja, me dijo que podía usar su computador para hacer la actualización de perfil y mire- señala mostrando la Tablet con el perfil abierto.

-Actualice la imagen, los datos y Lanita concreto tres citas y solo queda que usted elija a la candidata y obviamente no se puede negar, porque cuando esta haciendo la depuración de los match, que cabe destacar que en 4 horas obtuvo 320, no es récord, pero es algo- lo dice como su hubiese ganado el nobel o algo así -pues su madre la llamo y le pregunto ¿qué estaba haciendo?-

-Y ella tan buena hija obediente me lanzo a los tigres-

-A la leona en realidad Jefecito y no me mire como si realmente quisiera convertir este delicioso cuerpo en abono… ella solo respondió que estaba organizando tu próxima cita y bueno pidió evidencia fotográfica-

-Lo sabía- golpeo con mi puño el respaldo del mueble, haciendo que José salte -seguro quiere la imagen, para presumirlas con sus amigas o peor… para LAS INVITACIÓN A LA BODA… te voy hacer abono José-

-¡No Jefecito!- se aleja como presa asustada, mientras los persigo lentamente -soy muy joven para morir, además usted solo selecciona a una de estas candidatas y listo todos felices-

-Te voy a…- justo cuando lo tengo acorralado mi teléfono suena.

-Je, jefe, jefecito debería contestar, muy pocos conocen su número debe ser importante…- me alejo para tomar la llamada.

-Tienes media hora para solucionar esto- afirma con la cabeza nervioso.

- Kuznetsov- hablo sin dejar de mirar a José que comienza a hablar por teléfono.

-Vodka Bebeeeeeeeeeeeé-

-Juan Ron, ¿dónde dejaste a tu Hermione?-

-Está tratando de no verse tan hermosa, para no tener que golpearte por querer lo que es mío, normal-

No aguanto y comienzo a reír, ganándome una mirada extraña de José, que sigue al teléfono, muevo mis manos para que salga.

-Vodka Bebé, recuerda nuestra cena, necesito tu apoyo-

-Se que no he podido conocer a tu Hermione, pero no creo que sea tan mala-