Todos son iguales (comedia romántica)

Capítulo 5:

Me estaba alistando para ir a la taquería cuando mi amiga tocó la puerta.

—Ya estás lista —me dijo cuando le abrí la puerta.

—No, aún no—

—¿Por qué no me dijiste? Estás loca, pudo ser un violador —me dijo esta.

—Que no te dije —le interrumpí.

—Que tuviste una cita con alguien—

—Eso no es importante —le dije.

—¿Cuánto tiempo llevas hablando, ya dos días o apenas ayer? —me dijo Luna, enojada.

—Bueno, me escribió hoy en la mañana—

—Si no fuera por Patrick, tú hubieses seguido hasta la casa y a saber qué te hubiera hecho. Eres una ingenua—

—Perdón, ok, no puede decirle que no quería sexo porque me puse nerviosa—

Mi amiga me abrazó. —Ok, a la próxima cuídate o escríbeme a mí; sabes que me preocupo mucho por ti—

—Sí —le dije mientras la abrazaba.

—Y recuerda, yo te hubiese ayudado a ir hermosa; Patrick me dijo que ibas con ropa de casa—

—Toda la ropa es de casa —le dije.

—¿Sabes? —me dijo mi amiga— seré tu guardia; cada vez que salgas a una cita, iré y me quedaré lejos, y cuando el hombre te pida sexo, yo me encargaré de sacarte. Solo hazme una señal—

—Qué señal —le dije.

—Bueno, revuélvete el cabello como si tuvieras calor —me dijo.

—Pero puedo salir con chicos como el de hoy —le dije con una sonrisa.

—Sí, pero si se te ocurre irte a un hotel, te voy a seguir y a jalar las greñas, ¿ok?

—Ok —le dije, abrazándola. Por eso es mi mejor amiga, porque ella me apoya en todo y siempre está para mí.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.