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Despierto.

Abro la boca para tomar aire. No, no puedo respirar, sentía que mis pulmones quemaban y ardían, mi garganta estaba seca y cada vez que tragaba igual dolía, mi cabeza late y mi cuerpo está adormecido, miro alrededor mientras estoy tirada en el piso con desesperación. Por favor, tranquila respira, respira ¡Por favor respira!

Intento de nuevo pareciendo como un pez fuera del agua y siento el aire pasar por mis pulmones esta vez, miro a mi alrededor cuando pestañeo varias veces y noto que estamos en un elevador que iba subiendo. Me levanto del suelo y me siento apoyando mi espalda en una caja. ¿Donde mierda estoy? Y ¿Por qué nadie detiene este ascensor? Ya me esta molestando el sonido que hace.

Me levanto ya cansada y comienzo a golpear el ascensor.

-¡Detengan esto! ¡¿Donde carajos estoy?! ¡Solo deténganlo! -golpeo las paredes, pero no sucede nada.

Escucho un "meeeee" y me volteo asustada. Observo al fondo y veo una cabra, ¿Cómo una cabra llego aquí? Iba a acercarme, pero el ascensor deteniéndose en un golpe seco hace que caiga de pecho contra el piso. Joder, eso dolió.

Un sonido irritante comenzó, como una alarma. Me tapo mis orejas para tratar no escuchar el incesante ruido que aturdía, me siento ¿Cuando parará esto?

Cinco minutos después, todo había quedado en silencio, pero todo cambia cuando el se escucha un sonido fuerte y el techo por así decirlo, se abre como un puerta dejando pasar luz adentro.

Me arrastro a una esquina escondiéndome, ¿Quién sera? ¿Quién abrió la puerta?

Veo que una persona salta al adentro del ascensor haciendo que se moviera un poco.

-Newt ¿Que ves allá adentro? ¿Algún shank llorando, o mejor, lleno de pipí? -dice una voz gruesa desde arriba, risas se llenan en el aire e inmediatamente me molesto.

Miro al chico en silencio, estoy en una parte oscura y no creo que me vea bien, así que me quedo callada, vigilando cada paso.

-Oye, tranquilo, no te vamos hacer nada. Me llamo Newt y bienvenido a tu nuevo hogar -dice el chico con voz gruesa, Newt, lindo nombre. Lo observo de pies a cabeza.

Tenia pelo rubio con varias mechas caoba, sus ojos eran color marrón  oscuro, sus labios finos y rojos. Era alto, tal vez me sobrepase y delgado, pero se notaba que era agradable, pero aun así no debía confiar. Miro algo brillando a su costado y noto que es un cuchillo.

Si me van a sacar de esta caja será amarrada, porque no saldré de aquí, no se que hay allá arriba y tengo mucho miedo. Intento retener un poco el miedo que tenía y me levanto. Siento la mirada de Newt y me acerco a él.

-Oye, miertero, te apuras ¿O qué? No tenemos todo el día -dijo otra voz distinta a la de antes.

-Oye imbécil, cállate que puedes asustar al nuevo nova...-se quedo callado al verme.- to -susurro. Nos miramos fijamente.- Eres una chica -dice bajo como antes sin poder creerlo, lo miro con una ceja alzada.

En serio, no me digas, mira te digo un secreto antes era una cabra, pero bam, me convertí en mujer. Digo en mi mente mirándolo mal.

-Newt ¿Por que te quedaste callado? ¿Qué ves? -otra voz. ¿Habrá solamente hombres allá arriba o qué?

-¡Es una chica! -dijo gritando y mirando hacia arriba. Silbidos y palabras idiotas se escucharon haciendo que me enojará y no perdí la oportunidad de quitarle el cuchillo.

Tontos.

Rápidamente agarro el cuchillo y le doy una patada en su pierna haciendo que cayera al piso. Me monto sobre él y pongo el cuchillo en su cuello.

-¿Quienes son? ¿Y donde estoy? -digo con voz dura, intentando mostrar que soy mala.

-Oye, oye, flor salvaje. Deja que te sacamos de aquí y te diremos todo -dice con una sonrisa, pero se borra cuando aprieto el cuchillo.

-¡Dímelo! -él se queda callado y me mira fijamente, pero debes de decirme algo, en un rápido movimiento, me mordió la muñeca donde estaba el cuchillo e hizo que lo soltará haciendo que él se montara encima mio.- ¿Qué te pasa imbécil? Bájate -dije intentando soltarme.

-No, hasta que te tranquilices.- Iba a levantar una pierna, pero él la enreda con la suya- Ni siquiera lo pienses. No te vamos hacer nada -peleo un poco más hasta que me rindo. Suspiro y miro a un lado.

-Bien -dije bufando. Él me soltó lentamente y se levanto, yo igual y me aleje de él.

-Bajen la cuerda -dice y después de un rato, él sube primero y me ayuda a salir. Afuera tengo que entrecerrar mis ojos para enfocarme bien a donde estoy.

Miro a mi alrededor y noto como diez a quince chicos, que me miraban atentamente. Me remuevo un poco incómoda.

-Uy amiga, te hago todo y menos sufrir -dijo uno haciendo que todos comenzarán a reír y echar halagos estúpidos.

-No, no, otra. Si estuvieras en la miertera comida de Sarten te comería todos los días -dice y ubico el chico, me iba a acercar a pegarle, pero un chico moreno se le acerco y le golpeo.- ¡Oye!

-Cállate, cara fuco y cállense todos. Nadie le hará nada a nadie y menos a ella -todos hacen caso-. Es una chica, hay que respetarla shanks, parecen animales. Si le tocan un pelo, ya se verán allá afuera dándole compañía a los penitentes ¿Me entendieron? -dice y todos asienten. ¿Penitentes? ¿Qué es eso? ¿Se come?. Noto como ahora su mirada se fija en mi- Bienvenida, novata. Estas en el Área.