—Allí esta Christian Grey —señala Lisa hacia adentro del aula de Administración, me doy medio giro para observar al sexy profesor que me desconcentrara en clases, en mi primer día de clases, pero que mantendré mi cabeza enfocada al menos por un rato.
Ha decidió acompañarme hasta mi clase y es solo porque quería volver a ver al profesor, que aún no tengo la menor idea de cuál sea su nombre, solo sabía que era mi profesor de administración y lo supe gracias a unas cuantas chicas que no paraban de murmurar cosas sobre él, hoy era lunes y esta era mi primera clase del día, estoy tan ansiosa como nerviosa en este instante.
—Ya lo viste, ahora puedes irte— digo amablemente, lo poco que la había conocido en estos cortos días, es que te sabe entretener muy bien, te habla hasta por los codos, y lo peor es que cuando comenzamos a hablar es difícil parar, tenemos muchas cosas en común, ella es una chica muy extrovertida, yo no tanto, pero lo intento.
—No te pongas celosa, de todos modos no es mi tipo— me lanza un guiño y me da un pequeño golpe leve en mis costillas— Tienes a tu sexy profesor, alias Christian grey para ti solita…oh espera— frunció el ceño y luego dibujo una sonrisa ancha— Compites con las miles de estudiantes que tomaron su clase.
Pongo los ojos en blanco y niego con la cabeza.
—Primero deja de fantasear que ese tampoco es mi tipo —es decir es guapo y todo, pero por ahora no quiero saber nada de relaciones, ya tuve una y no fue para nada bonita— Y segundo ya debo entrar que en cualquier momento ya comienza.
Me da un abrazo fuerte y tras echar una última mirada hacia adentro del salón se marcha sonriendo de oreja a oreja, camina moviendo sus caderas exageradamente mientras algunos chicos voltean a verla.
Finalmente me adentro al salón.
Directamente me voy a sentar a la última fila, nunca fui de sentarme en los primeros asientos, nunca me gusto ser la primera en nada.
Un poco más aleja del resto de las estudiantes, así es, estudiantes, porque solamente veo chicas babeando por el profesor que está revisando algunos papeles en su escritorio sin prestar atención a su alrededor.
Comienzo a sacar mis libros y cuadernos.
—Hola, amiga guapa de Lisa— escucho una voz bastante alegre.
Levanto mi cabeza y me encuentro con el mismo chico moreno de ojos bonitos, Jack.
Esta vestido con unos pantalones vaqueros gastados, una camisa de cuadritos que deja un poco al descubierto su pecho, y con la mochila en el hombro, me mira sonriente, me sorprende que me recuerde ya que solo he hablado con él solamente cuando Lisa nos presentó a ambos, desde ahí no nos hemos ni siquiera visto, hasta ahora.
— ¿Jack? —pregunté confirmando su nombre.
Asintió con la cabeza sonriente.
— ¿Puedo sentarme aquí? —me pregunta y luego mira hacia adelante donde están sentada todas las chicas que no le quietan el ojo de encima al profesor— Me asusta estar cerca de ellas— arruga la nariz.
Suelto una risita divertida y le señalo el asiento de al lado para que lo tome, es bueno conocer a alguien amigable.
—Dime guapa ¿Qué tal llevas la universidad hasta ahora? —saca sus útiles y los coloca sobre la mesa.
Me encojo de hombros.
—Apenas he empezado, aun no tengo una respuesta en concertó.
— ¿Ya se te ha lanzado algún chico al que deba espantar para que no se te acerque? —me rio ante su comentario, él también se echa a reír a carcajadas.
Bien, tal vez no era la gran cosa por la cual deberíamos reírnos como dos par de locos, pero así lo hicimos, llamando la atención de las chicas babosas y hasta del profesor que parecía realmente confundido por nosotros, e inmediatamente nos callamos ya que además nos estaba mirando con mala cara.
—Ya hemos dado una mala impresión al profesor— me susurra Jack al oído.
—No creo— contesto.
Minutos más tarde, la clase comenzó.
—Mi nombre es Scott Woods y seré su profesor de Administración— dijo, ya se encontraba de pie, podía escuchar los suspiros de las chicas de adelante, este salón estaba que explotaba y Jack era el único chico en esta clase— Espero que todos den su mayor esfuerzo como yo les daré al enseñarles— volvió a su escritorio y tomo varias fotocopias con sus dos manos— Esto que les estoy por dar, son simples pregunta para ustedes, y así conocerlos bien— levanto las fotocopias al aire por unos segundos— ¿Alguna pregunta?
Varias manos se levantaron.
El profesor Scott señalo a una estudiante que se encontraba en la primera fila.
— ¿Tiene novia? ¿Cuántos años tiene? ¿Da clases particulares? ¿Me da su número? — era una bomba de pregunta y algunos comenzaron a reír con ganas.
—No debo responderte eso, tengo veinticinco años, no doy clases particulares, y no le voy a dar mi número— respondió seriamente, al parecer no le pareció nada agradable las preguntar de la chica rubia.
Después de eso, comenzó a repartir las hojas, hasta que llego a mi asiento.
—Hola de nuevo— me dice y me quedo mirándolo desconcertada.