Tormenta

Capítulo 22

Lia

—Sabíamos que era cuestión de tiempo antes de que Yaser hiciera algo —sentencia Alma— habrá que averiguar de dónde sacó tanta información.

—Conocí a Yaser hace muchos años, él no era así, hasta que le tocó ser líder.

—¿Cuándo lo conociste? —pregunta mientras busca respuestas con la mirada.

—Antes de la prueba, no mucho antes —explico.

—No tiene sentido —suspira— A este paso no conseguiremos nada.

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Tormenta

Me recuesto en mi cama, en un rato iré a la universidad por primera vez.

No sé qué esperar, no quiero ir.

Le pedí a Rayo que me diera tiempo de procesar todo lo que pasó ayer.
El aceptó no muy contento.

—¿Puedo entrar? —golpea la puerta.

—¿Prometes no hacer muchas preguntas?

—Trataré.

Me levanto de la cama; escribo el código de acceso a la puerta en la pantalla y ésta se abre.

—Entonces pasa.

Cuando regresamos de aquella locura que hizo Yaser, él me hizo muchas preguntas que ni yo sé.

—Perdón por todas las preguntas que te hice... —suspira— Sé que no debí hacerlas.

—No hay problema, solo no vuelvas a hacerlo —sugiero.

Él me observa curioso.

—Yaser tiene planes locos —menciona— Ten cuidado; parece tener algo en contra de tu familia.

—¿Cómo lo sabes? —pregunto mientras él mira alrededor.

Él siempre sabe más que yo.

Tiene algún contacto para obtener información valiosa.

—Mi padre —susurra mientras se me acerca lentamente— Mi padre habló en estos días con el tuyo, entre tanta confusión por lo de tu madre él me habló sin preocuparse si le dirían algo; me contó muchas cosas.

—¿Cómo qué? ¿Qué sabes? —pregunto.

Antes de que pudiera responderme alguien golpea la puerta.

—¿Quién eres? —pregunta.

—Soy yo, Satu —responde— Debido a ciertos inconvenientes se suspenden todas las clases, por lo que no hay una fecha nueva para el inicio de la universidad.

—Gracias por la información —agradece Rayo mientras vuelve a mirarme.

—Por cierto; necesito hablar con Tormenta, sé que está ahí, te espero en el tercer piso sala catorce B —comenta— Te espero en veinte minutos.

Observo a Rayo; él parece distraerse con el techo.

—Cuando regreses te contaré sobre lo que hablé, si es que no nos interrumpen —comenta.

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Salgo de la habitación mientras aún tengo unos minutos de sobra.

Camino por los pasillos.

Bajo por las escaleras hasta el tercer piso.

Satu me está esperando fuera de la habitación.

—Justo a tiempo —menciona— Las salas están ocupadas, por lo que tendremos que ir fuera del edificio.

—¿Por qué tanto misterio? —pregunto.

—Solo sígueme; te explicaré todo una vez fuera.

Caminamos hasta salir del edificio; nos adentramos un poco en el bosque.

—Bien, para empezar trata de no molestar a Yaser, como puedes sospechar él está en contra de tu familia —advierte— Puede que en un tiempo los haga conocer el mundo real.

—¿El mundo real?

—Así es, un mundo donde están divididos por grupos de poder y sangre, por ejemplo; por tu sangre y legado familiar eres alfa, pero por tu poder aún no lo sabemos.

—¿Por qué está tan dividido y a nosotros no nos cuentan nada?

—Por la simple razón de que quieren ocultarlo hasta que tengan cierta madurez, no olvides que eres un Alfa, nadie puede decirte que eres inferior —sentencia.

—Entiendo, ¿por qué me ayudas?

—Porque cuando tenía tu edad nadie me advirtió y pasé de ser un Alfa a un Omega porque me lo dijeron; como yo no sabía no pude decir nada al respecto —su voz suena sincera.

—¿Entonces Satu no es tu nombre real?

—Sí, es mi nombre, más adelante tal vez te cuente mi historia, por el momento hay que concentrarse en tu entrenamiento; con Yaser como está ahora debes estar lista en caso de un ataque.

—Comprendo.

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Hay algo en Satu que no me convence.

"Pasé de ser un Alfa a un Omega"

Definitivamente no sé que pasa en este mundo.

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Dimitruk

Nada.

No tenemos ninguna respuesta por más que pensamos en el pasado.

La falta de Lia es notoria para todos, ella se encargaba de mantener la organización perfecta en la ciudad. 
Ya hay varias empresas que no han cumplido sus trabajos.

La lista continúa.

Suspendieron todas las clases que estaban por comenzar, necesitan volver a organizar todo.

Sin Lia; todo es un caos.

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Lia

—¿Te diste cuenta que todo en Esperanza está hecho un desastre? Se perdió el orden cuando te expulsaron —comenta.




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