~•~
Elisabeth
~•~
Tenía los nervios al máximo, sabía lo que me esperaba, tenía que salir de aquí antes de que él llegara. Sabía lo que me iba a pasar si no escapaba. Por primera vez en veinte años no me sentía aterrada, mi esperanza volvió.
¿Cómo podría escapar de aquí sin Gerald?, ya han pasado quince días desde que se fue a buscar información, Vitali regresará pasado mañana y yo debo irme antes.
Saco varias cartas de la gaveta y las dejo en la cama, observando fijamente cada una de ellas, se me forma un nudo en la garganta antes de tomar una para leerla.
Fecha 14/6/1801
Mi princesa, mi bailarina, el amor de mi vida, han pasado años, no hay ni un minuto de mi vida que no piense en la posibilidad de volverte a ver, sé que tal vez ya me olvidaste, pero sueño con que algún día nos volvamos a ver. No dejo de pensar en nuestro primer beso, nuestras pláticas en el laberinto y nuestras escapadas al pueblo. Te amaré toda mi vida.
Cada palabra era como un golpe en el corazón, creí que había muerto, tal vez mi error fue no seguir buscando, ahora simplemente me arrepiento, pero es tarde para eso.
Fecha 21/09/1792
Hemos estado tratando de liberarte, Pero desde que el nuevo rey llegó a la corona, entrar al palacio es imposible, no me imagino el infierno que estás viviendo ahí dentro. Seguiremos intentando, nunca me voy a rendir.
Mis manos temblaban con cada carta que abría, no paraba de llorar, no para de reprocharme el no haber seguido buscando, me arrepiento de dejarlo, de volver y de casarme. Desearía que nada de esto hubiera pasado, desearía nunca haberlo dejado, desearía que todo fuera diferente.
Me levanto de la cama y camino a la ventana, observo la gran estatua de Vitali que ocupa el lugar de lo que antes era mi paraíso, mi lugar seguro, mi hogar. El último recuerdo de mi abuelo era ese laberinto, Pero él lo arruinó todo. Tomé otra carta, se veía más nueva.
Fecha 10/02/1811
Era de hace unos días
Elisabeth, dejé de buscarte hace mucho, mi cuerpo esta débil, ya no puedo hacer lo que hacía antes, y André no me permite arriesgarme, estoy vigilado todo el día. Pero ellos aun siguen tratando de liberarte, tranquila, tal vez ya no estés en este mundo, Pero al menos debo saber que fue de ti.
Hice varias esculturas aquí, en tu honor, nunca te olvidé, y nunca lo haré, te esperaré el tiempo que sea necesario. Traté de tener algo con otra chica, y quedó embarazada, pero no fue lo mismo, ella no eras tú, y desgraciadamente perdió el bebé en un accidente, no nos volvimos a ver después de eso.
Te amo a ti, a nadie más.
Gerald debe apresurarse, Vitali regresará dentro de poco y necesito salir de aquí lo antes posible, pero sin su ayuda no lo lograré.
No te preocupes mi amor, pronto estaremos juntos, y si muero intentando salir, al menos se que estás bien y te voy a esperar en el más allá.
fin du chapitre soixante et onze