P A R T E - X X I V : SEMIÓTICA Y CASOS REALES

SEMIÓTICA EN LA CANCIÓN ANOTHER BRICK IN THE WALL

1.Pensamiento sensorial según Arheim y cómo se relaciona con la canción

Según Arheim, se le denomina pensamiento sensorial a todo aquello que se capta a través de los sentidos. En este sentido, el pensamiento sensorial guarda relación con el proceso y almacenamiento de las ideas por medio de la percepción, en otras palabras, la persona percibe y procesa la realidad a manera de impresiones captadas por los sentidos. Es por ello, que los verdaderos esfuerzos creadores de la mente, consiste en operaciones perceptivas, es decir, para aprender de la experiencia se requiere que la mente extraiga lo general de lo particular. 

En relación a la canción, se puede observar claramente en el video el dominio de la enseñanza tradicional, la cual se ha preocupado por la enseñanza de los números y palabras, alejando a la persona de la experiencia sensorial. Esto se debe a que la experiencia sensorial es considerada como un obstáculo para el aprendizaje; sin embargo, muchos de los procesos mentales que conocemos por el razonamiento intelectual, no son exclusivos del intelecto, ya que se producen también en el pensamiento visual. Asimismo, Arheim sostiene la probabilidad de que dichos procesos mentales se originan en el campo de la percepción y posteriormente, se convierten en operaciones intelectuales. Así, en el video, se trata de imponer una forma de educación a los niños, colocándolos a todos en un solo molde sin tomar en cuenta sus necesidades y capacidades individuales que cada uno presenta, por tanto, impide la imaginación y creatividad de la cual se caracteriza más el pensamiento sensorial. 

2.- Nivel denotativo y connotativo en la canción Another Brick in the Wall- Pink Floyd.

Another Brick in the Wall es la undécima canción lanzada por el grupo de banda Pink Floyd editada en 1979. 

Por un lado, en el nivel denotativo, que trabaja con significados descriptivos, objetivos y explícitos; la canción Another Brick in the wall comienza con una tonada en Re menor y la batería va marcando un ritmo repetitivo a lo largo del video. Los colores del video son tonos oscuros. Aparece un niño uniformado que está mirando un tren, donde se encuentran otros niños que usan una máscara redonda en el rostro. Un hombre en toga, llama al niño diciendo ¡Quédate quieto!, y, por un momento, a este se le aparece la máscara.  Se esconde y sale del túnel. La escena es oscura y apenas se pueden ver los rostros. 

Luego, el video muestra a varios señores en una habitación en la escuela, que, según la letra, son profesores que molestan a los niños. Los profesores, bien vestidos, salen hacia las aulas. Entonces, dentro del salón, el mismo señor que le había gritado antes al niño, se acerca a su pupitre y se burla de sus poemas, leyéndolo en voz alta. Los otros niños también se ríen. “¡Solo basura!”, le dice y tira el cuaderno en su mesa. “Sigue con tu trabajo”, grita y vuelve a dictar la clase en forma de repetición. Después, se ve al profesor comiendo con su esposa, de acuerdo a la letra. En una casa con tonos oscuros, se enfoca la cara del señor y aparece la escena de él golpeando el trasero de un estudiante frente a todo el salón y sonríe. 

De repente, la escena muestra a muchos niños caminando a paso lento dentro de una fábrica. Están con el uniforme del colegio y suben a un puente de metal que va a un túnel. Luego de pasar por ese proceso, los niños salen del túnel sentados cada uno en sus pupitres y llevando la misma máscara en la cara. La letra suena “¡Profesores, dejen a los niños en paz!” Los niños enmascarados marchan uniformemente sin parar, mientras el profesor, usando toga, les ordena.

“No necesitamos ninguna educación”, cantan otros niños al unísono. Cientos de ellos se encuentran encerrados ordenadamente en filas dentro de unos muros de ladrillos, mientras que el profesor les grita. “No necesitamos ningún control mental”, siguen cantando. Los estudiantes de la escuela también cantan. Luego, se muestra cómo los niños enmascarados caminan sin pensar y cada uno cae a una máquina de metal, que, al salir, los convierte en una masa de arcilla. 

De pronto, los niños se quitan violentamente las máscaras; otros, rompen y tiran con furia los pupitres y papeles del salón. Con hachas, los niños rompen poco a poco la pared de ladrillos. Tiran las mesas, sillas y papeles al patio y le prenden fuego. El fuego se esparce por toda la escuela y alrededores. Los niños celebran, saltan y siguen avivando el fuego, lanzando más sillas en él. Unos estudiantes tienen atrapado al maestro y lo tiran al fuego también. Finalmente, se muestra al niño del comienzo, escuchando la clase repetitiva del profesor, mientras observa una imagen. 

Por otro lado, al haber analizado la canción el nivel denotativo, ahora lo realizaremos en el nivel connotativo, que se basa en el anterior y se refiere a las interpretaciones subjetivas y de orden cultural de esta. Primero, la tonada en Re menor significa que la canción representa lo grave y devoto, así como se siente la melancolía y el rencor que se vive en los colegios. Asimismo, la batería marca una pauta repetitiva, tal como los pasos. Así, se puede entender como alguien que ordena e indica dichos pasos.  Del mismo modo, se puede interpretar los colores que se usan en el video. Son oscuros, porque esto evita que la luz del verdadero conocimiento y libertad lleguen a los niños. 

El tren que lleva a los niños enmascarados hacia la fábrica se interpreta como el camino que lleva a los jóvenes hacia un sistema educativo estricto y tradicional. Sus máscaras representan la poca libertad que tiene y que han sido instruidos para todos poseer la misma visión del mundo; es decir, les falta identidad personal e individual. El niño está fuera de este tren, porque está fuera del sistema. Luego, esta idea se solidifica cuando el profesor se burla de los poemas que escribe y comienza a dictar y dictar. Así, se muestra que no existe innovación por parte de los docentes, entonces, se minimiza el desarrollo de la creatividad y, por ende, la autonomía y la autorrealización del niño. No hay motivación de los alumnos para que ellos mismos descubran su aprendizaje, sino solo se ciñen al libro y a la explicación del libro. Entonces, cuando el profesor se pone a ridiculizar y a humillar al alumno enfrente de todos por escribir poesía, se muestra que él no es el perfil del alumno que el sistema pretende tener. En cambio, es una persona imaginativa, que no se limita a escuchar y asimilar lo que repiten todos como una manada. “¡Solo basura! Regresa a tu trabajo”, grita el docente. Lo que él quiere es que su punto de vista y conocimiento sea el que es impartido por él: no acepta al otro tipo de niños. Cuando esto no ocurre, o los humilla, o los golpea con la vara.